El medio es el mensaje, dijo el filósofo Marshall McLuhan. El saludo con los brazos abiertos de Richard Nixon, las camisas blancas de Jack Kennedy, el pelo de Donald Trump o la seriedad de Gerald Ford son algunos ejemplos. Es asi como en apenas una semana Joe Biden ha impreso su estilo y sus mensajes a la presidencia de Estados Unidos.
El 20 de enero Joe Biden juró el cargo como 46º presidente de Estados Unidos. La insólita ceremonia se llevó a cabo frente al capitolio ante un público limitado, en un Washington fortificado tras los ataques de hace un par de semanas a la sede que alberga las dos cámaras del Congreso de los Estados Unidos. Los cubrebocas, la pandemia, la caminata casual a la Casa Blanca, el poder de la palabra, el apoyo de los expresidentes de Estados Unidos y la ausencia de Donald Trump hicieron de la toma de posesión de Biden un evento único. “Este es el día de Estados Unidos. Es el día de la democracia. Un día para la historia y la esperanza (…) Hemos aprendido que la democracia es valiosa. La democracia es frágil y en este momento, amigos, la democracia ha prevalecido”, señaló Biden.
Por su parte, Donald Trump y su esposa, Melania, abandonaron la Casa Blanca a primera hora de la mañana del miércoles, no sin antes despedirse en su último acto como mandatario: “Volveremos de alguna manera”, resaltó el ahora expresidente. La ceremonia y símbolos tradicionales en el cambio de poder del país más poderoso del mundo han quedado atrás al existir eventos atípicos en este cambio de gobierno. Por ejemplo, Donald Trump no felicitó a Joe Biden y mucho menos lo invitó a tomar el té en la Oficina Oval como marca la tradición. Tampoco Melania Trump llevó a cabo su último deber como esposa del presidente de Estados Unidos, que es invitar a la siguiente Primera Dama, la doctora Jill Biden, a tomar el té y darle un tour por la Casa Blanca. Con la ausencia y abandono de estos actos se marca el rompimiento de una tradición que ha estado vigente por 100 años entre la pareja presidencial saliente y la entrante.
Las ceremonias de investidura de presidentes en Estados Unidos suelen ser una jornada llena de festividades, pero esta fue muy diferente. Un gran dispositivo de seguridad fue desplegado en Washington después del asalto al Capitolio. La explanada del National Mall, donde habitualmente se concentran miles de personas para este evento, fue cerrada al público. En su lugar fue decorada con banderas en recuerdo a la gente que no pudo asistir, por cuestiones de seguridad o las restricciones por la pandemia. En esta ocasión, solo se proporcionaron unas 1000 entradas a la ceremonia, en lugar de las decenas de miles que habitualmente suelen distribuirse.
Joe Biden llegó acompañado de su esposa, Jill Biden, y de Kamala Harris, primera vicepresidenta de Estados Unidos, a un Capitolio blindado por miles de efectivos de la Guardia Nacional donde también hicieron presencia los expresidentes demócratas Barack Obama y Bill Clinton y el exmandatario republicano George W. Bush.
Como indica el protocolo de la ceremonia, primero Kamala Harris rindió protesta como vicepresidenta de Estados Unidos, convirtiéndose en la primera mujer que ocupa el cargo en la historia del país. Harris, de 56 años, prestó juramento con una mano sobre la Biblia ante la jueza progresista de la Corte Suprema Gloria Sotomayor, que fue la primera latina en ser elegida como magistrada del alto tribunal.
Instantes después, Joe Biden prestó juramento como el presidente 46 de Estados Unidos, mientras su esposa Jill Biden sostuvo una Biblia que la familia Biden posee desde 1893. Estados Unidos enfrenta “el surgimiento del extremismo político, la supremacía blanca, el terrorismo doméstico, que es algo que debemos confrontar y que vamos a derrotar”, afirmó Biden tras jurar como presidente. La ceremonia inusual se dio en medio del cambio de poder de un país que enfrenta grandes retos en materia sanitaria, económica y social.
Destacó la presencia de estrellas del espectáculo, como Lady Gaga y Jennifer López, y que si bien públicamente han sido abiertamente embajadoras del hoy presidente Joe Biden, hoy nos dejan un sabor de boca de medio tiempo del Superbowl en las intervenciones que ambas realizaron en tan importante acto.
Posterior al juramento el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris se dirigieron al frente del Capitolio para pasar lista a las tropas militares, una tradición militar larga que transmite a los ciudadanos una transferencia pacífica del poder. Acto seguido, Biden firmó los primeros decretos con los que formaliza la proclamación de su toma de protesta y los nombramientos de los miembros que conforman su Gabinete. Luego de ello, Biden viajó al Cementerio Nacional de Arlington, para depositar una ofrenda floral en la tumba del Soldado Desconocido, junto con los expresidentes Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton y sus esposas.
Las cuentas oficiales de Twitter del presidente estadounidense Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris fueron activadas este mismo miércoles; “Lista para servir”, tuiteó la primera vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris; por su parte, Joe Biden envió el mensaje por Twitter: “No hay tiempo que perder para lidiar con las crisis que enfrentamos”.
Pensar la vida
Construir nuestra vida a partir del planteamiento de un propósito nos permite insertarnos en el mundo a partir de...
noviembre 22, 2024México regresa al complejo escenario mundial
El regreso de México al escenario internacional se da en medio de una realidad global que se ha modificado...
noviembre 21, 2024Presupuesto educativo. Obras y no buenas razones
Si quieres conocer el valor del dinero, trata de pedirlo prestado – Benjamín Franklin
noviembre 21, 2024IMPULSA CLAUDIA SHEINBAUM UN GOBIERNO CON ENFOQUE HUMANISTA: SERGIO SALOMÓN
En México, la desigualdad y división que existían en el pasado van quedando atrás con una autoridad con enfoque...
noviembre 20, 2024