La OMS publicó hace unos días algunas recomendaciones éticas sobre la edición del genoma humano (1). Dentro de las recomendaciones se señala el problema de la accesibilidad a los beneficios. Uno de los problemas clásicos de la salud es cómo repartir beneficios al máximo sin descuidar la viabilidad de las investigaciones.
El advenimiento de nuevas técnicas, como la edición genética, provoca cuestionamientos éticos: por ejemplo, si las investigaciones son financiadas por entidades privadas que esperan recuperar lo invertido, ¿deben tener estas mismas empresas preferencia en la explotación de la técnica?
En ese caso, resultaría conveniente buscar estrategias para poder distribuir más rápido y a más personas los beneficios de la edición genética. Un ejemplo sería de la propiedad intelectual, como patentes limitadas en el tiempo; otra estrategia podría ser subvenciones o compra de patentes por parte del gobierno. Paralelamente, habría que mantener los incentivos para la inversión privada en esta técnicas, asegurando que su disponibilidad no se convierta en un recurso solo para privilegiados, pero que tenga beneficios económicos para los inversionistas.
Las técnicas de edición genética podrían usarse no solo para remediar enfermedades sino para perfeccionar capacidades humanas. Lo anterior supone la pregunta ética sobre el perfeccionamiento: por ejemplo ¿deberíamos alterar nuestras capacidades para ser más inteligentes? Si esto se logra de un modo eficaz y seguro, entonces plantearía desigualdades enormes en la sociedad humana. La realidad es que de hecho intervenimos en nuestro desarrollo: así, quien posee recursos económicos puede mejorar su rendimiento deportivo para ganar competiciones al contratar a un equipo completo de profesionales de la salud. La pregunta es qué tanto deberíamos intervenir en eso. Supongamos que podemos tener personas más veloces en los deportes. ¿Tendría sentido las competiciones internacionales donde por un lado tendríamos superatletas de diseño y por otro “atletas normales” que sólo maximizaron sus talentos naturales?
La OMS recomendó compartir las técnicas de edición genética con los países más pobres. Esta recomendación nos remite al problema de las vacunas: se busca un acceso más equitativo de las mismas porque consideramos que, al menos algunas de las vacunas deberían ser patrimonio de la humanidad.
Otro tema es que la OMS ha señalado que no se debería modificar el genoma que pueda heredarse y que se conoce como edición genómica en línea germinal. ¿Por qué? Un tema, por supuesto es la seguridad de las técnicas. Pero el otro problema es el ya indicado de generar humanos con ventajas o desventajas con respecto a otros y que fomente la inequidad entre los humanos.
La técnica de edición genética, como todo nuevo recurso producto de la inteligencia humana, debe ponerse al servicio de todos los seres humanos por la razón de que los seres humanos somos fines en sí mismos y no debemos ser tratados como Instrumentos o medios por ninguna persona. En pocas palabras, porque poseemos dignidad.
Referencias
- Véase Recomendaciones de la OMS para establecer la edición genómica como herramienta para salud 14 de julio de 2021. Disponible en:
https://genotipia.com/genetica_medica_news/recomendaciones-oms-edicion-genomica/
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