Prófugos del ácido fólico

El Cata Domínguez, jugador de Cruz Azul, se vio envuelto en un escándalo tras organizar una fiesta infantil con temática de narcoviolencia. ¿Qué valores puede inculcar a sus hijos alguien como El Cata Domínguez?

10 de enero, 2023

Julio César Domínguez, mejor conocido como El Cata Domínguez, jugador del Cruz Azul, felizmente decidió hacer una gran fiesta para celebrar los 12 años de su hijo –jugador de las fuerzas básicas del mismo equipo–. No escatimó en gastos, invitó a sus amigos y contrató un servicio de Gotcha. Hasta ahí todo bien. Todos los padres queremos ver felices a nuestros hijos el día de su cumpleaños.

¿Por qué no? El Cata decide ir un poco más lejos para hacer más divertida y original la fiesta infantil, así que decide hacerla temática. No se le ocurrió ningún personaje de Marvel, AC o Disney, tampoco le da para organizar una fiesta con temática de fútbol o de algún otro deporte o pasatiempo propio de la edad de su hijo y de la gente normal y pensante. Elige entonces como tema para la fiesta el narco.

Usted leyó bien. Convencido de su gran idea, decoró el lugar con globos, imágenes de granadas, metralletas y logos representativos del cártel del Chapo Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, uno de los criminales más peligrosos del mundo.

El Cata decidió entonces ataviar a los chicos con chaquetas y gorras que llevaran las iniciales JGL (Joaquín Guzmán Loera), Chapo o Chapiza y les asignó armas de juguete que emulan metralletas, cuernos de chivo y rifles para que los niños se diviertan a lo grande jugando a ser capos de la mafia.

Ignoro qué más hubo en la fiesta. Prefiero no saber qué les dio de comer, ni cuáles fueron los premios para los ganadores, ni qué tipo de bebidas ofreció para calmar la sed de los púberes invitados, quienes seguramente después de tanto jugar quedaron cansados y sedientos.

Me pregunto yo: ¿una dosis temprana de ácido fólico durante el embarazo habría ayudado a prevenir esta tragedia?; ¿se les cayó cuando era bebé en el quirófano a los médicos o algún balonazo en el lóbulo pre frontal le impidió madurar su pensamiento?; ¿qué habría tenido que pasar para prevenir esta hecatombe neuronal?

Resulta imperdonable que un adulto no solo idee una fiesta poniendo como héroes a narcotraficantes, asesinos a sueldo y criminales sin ningún tipo de valor ni conciencia, sino que además lo comparta en todas las redes sociales orgulloso de su idea y de la alegría que provocó en los invitados, entre los que no sé si alguno pensó que esto tal vez podía ser un poco raro.

No hay disculpa pública que valga.

Ya de por sí los mexicanos tendemos a la encumbrar  celebridades de dudoso comportamiento y buscamos vestirnos y comportarnos como artistas o famosos que no solo no aportan nada positivo a la sociedad, sino que se vuelven famosos por su escandaloso modo de vida, por sus impúdicas declaraciones e imágenes y por pretender ser líderes de opinión con base a información obtenida de las redes por sus homólogos.

No, todavía podemos darles mejores ideas a nuestros hijos ¿Por qué no jugar a ser mafiosos, narcotraficantes y asesinos? ¿Exagero o más adelante trascender los juegos a la realidad pudiese ser una posibilidad?

¿Por qué no hacer conciertos clandestinos en la Ciudad de México y algunas ciudades del interior de la República Neonazista? Revivir esta ideología y reclutar simpatizantes para proclamar el odio racial y el genocidio

¿Qué sigue? Ya nada me extraña. ¿Rodadas  y caravanas para perseguir y agredir migrantes o gente en condición de calle?

Poca fe en la humanidad nos queda después de leer este tipo de noticias, quisiésemos que fuera una broma, pero es triste reconocer que cada vez la teoría vuelve a ser confirmada. Somos una prueba de error de la naturaleza.

Comentarios


object(WP_Query)#18462 (52) { ["query"]=> array(5) { ["cat"]=> int(15) ["posts_per_page"]=> int(2) ["orderby"]=> string(4) "rand" ["post__not_in"]=> array(1) { [0]=> int(87574) } ["date_query"]=> array(1) { [0]=> array(3) { ["after"]=> string(10) "02-03-2023" ["before"]=> string(10) "30-03-2023" ["inclusive"]=> bool(true) } } } ["query_vars"]=> array(66) { ["cat"]=> int(15) ["posts_per_page"]=> int(2) ["orderby"]=> string(4) "rand" ["post__not_in"]=> array(1) { [0]=> int(87574) } ["date_query"]=> array(1) { [0]=> array(3) { ["after"]=> string(10) "02-03-2023" ["before"]=> string(10) "30-03-2023" ["inclusive"]=> bool(true) } } ["error"]=> string(0) "" ["m"]=> string(0) "" ["p"]=> int(0) ["post_parent"]=> string(0) "" ["subpost"]=> string(0) "" ["subpost_id"]=> string(0) "" ["attachment"]=> string(0) "" ["attachment_id"]=> int(0) ["name"]=> string(0) "" ["pagename"]=> string(0) "" ["page_id"]=> int(0) ["second"]=> string(0) "" ["minute"]=> string(0) "" ["hour"]=> string(0) "" ["day"]=> int(0) ["monthnum"]=> int(0) ["year"]=> int(0) ["w"]=> int(0) ["category_name"]=> string(18) "opinion-y-analisis" ["tag"]=> string(0) "" ["tag_id"]=> string(0) "" ["author"]=> string(0) "" ["author_name"]=> string(0) "" ["feed"]=> string(0) "" ["tb"]=> string(0) "" ["paged"]=> int(0) ["meta_key"]=> string(0) "" ["meta_value"]=> string(0) "" ["preview"]=> string(0) "" ["s"]=> string(0) "" ["sentence"]=> string(0) "" ["title"]=> string(0) "" ["fields"]=> string(0) "" ["menu_order"]=> string(0) "" ["embed"]=> string(0) "" ["category__in"]=> array(0) { } ["category__not_in"]=> array(0) { } ["category__and"]=> array(0) { } ["post__in"]=> array(0) { } ["post_name__in"]=> array(0) { } ["tag__in"]=> array(0) { } ["tag__not_in"]=> array(0) { } ["tag__and"]=> array(0) { } ["tag_slug__in"]=> array(0) { } ["tag_slug__and"]=> array(0) { } ["post_parent__in"]=> array(0) { } ["post_parent__not_in"]=> array(0) { } ["author__in"]=> array(0) { } ["author__not_in"]=> array(0) { } ["ignore_sticky_posts"]=> bool(false) ["suppress_filters"]=> bool(false) ["cache_results"]=> bool(true) ["update_post_term_cache"]=> bool(true) ["update_menu_item_cache"]=> bool(false) ["lazy_load_term_meta"]=> bool(true) ["update_post_meta_cache"]=> bool(true) ["post_type"]=> string(0) "" ["nopaging"]=> bool(false) ["comments_per_page"]=> string(2) "50" ["no_found_rows"]=> bool(false) ["order"]=> string(0) "" } ["tax_query"]=> object(WP_Tax_Query)#18458 (6) { ["queries"]=> array(1) { [0]=> array(5) { ["taxonomy"]=> string(8) "category" ["terms"]=> array(1) { [0]=> int(15) } ["field"]=> string(7) "term_id" ["operator"]=> string(2) "IN" ["include_children"]=> bool(true) } } ["relation"]=> string(3) "AND" ["table_aliases":protected]=> array(1) { [0]=> string(21) "rt_term_relationships" } ["queried_terms"]=> array(1) { ["category"]=> array(2) { ["terms"]=> array(1) { [0]=> int(15) } ["field"]=> string(7) "term_id" } } ["primary_table"]=> string(8) "rt_posts" ["primary_id_column"]=> string(2) "ID" } ["meta_query"]=> object(WP_Meta_Query)#18460 (9) { ["queries"]=> array(0) { } ["relation"]=> NULL ["meta_table"]=> NULL ["meta_id_column"]=> NULL ["primary_table"]=> NULL ["primary_id_column"]=> NULL ["table_aliases":protected]=> array(0) { } ["clauses":protected]=> array(0) { } ["has_or_relation":protected]=> bool(false) } ["date_query"]=> object(WP_Date_Query)#18459 (5) { ["queries"]=> array(4) { [0]=> array(6) { ["after"]=> string(10) "02-03-2023" ["before"]=> string(10) "30-03-2023" ["inclusive"]=> bool(true) ["column"]=> string(9) "post_date" ["compare"]=> string(1) "=" ["relation"]=> string(3) "AND" } ["column"]=> string(9) "post_date" ["compare"]=> string(1) "=" ["relation"]=> string(3) "AND" } ["relation"]=> string(3) "AND" ["column"]=> string(18) "rt_posts.post_date" ["compare"]=> string(1) "=" ["time_keys"]=> array(14) { [0]=> string(5) "after" [1]=> string(6) "before" [2]=> string(4) "year" [3]=> string(5) "month" [4]=> string(8) "monthnum" [5]=> string(4) "week" [6]=> string(1) "w" [7]=> string(9) "dayofyear" [8]=> string(3) "day" [9]=> string(9) "dayofweek" [10]=> string(13) "dayofweek_iso" [11]=> string(4) "hour" [12]=> string(6) "minute" [13]=> string(6) "second" } } ["request"]=> string(503) " SELECT SQL_CALC_FOUND_ROWS rt_posts.ID FROM rt_posts LEFT JOIN rt_term_relationships ON (rt_posts.ID = rt_term_relationships.object_id) WHERE 1=1 AND ( ( rt_posts.post_date >= '2023-03-02 00:00:00' AND rt_posts.post_date <= '2023-03-30 00:00:00' ) ) AND rt_posts.ID NOT IN (87574) AND ( rt_term_relationships.term_taxonomy_id IN (15) ) AND ((rt_posts.post_type = 'post' AND (rt_posts.post_status = 'publish'))) GROUP BY rt_posts.ID ORDER BY RAND() LIMIT 0, 2 " ["posts"]=> array(2) { [0]=> object(WP_Post)#18461 (24) { ["ID"]=> int(90172) ["post_author"]=> string(3) "189" ["post_date"]=> string(19) "2023-03-14 10:56:13" ["post_date_gmt"]=> string(19) "2023-03-14 15:56:13" ["post_content"]=> string(5275) "El título de esta columna fue votado por mis compañeras de marcha. Este 8 de marzo volvimos a salir a las calles. Esta vez no fui sola, esta vez fuimos todas, mis hijas y sus amigas, para las más jóvenes fue su primera marcha. Tenían un poco de incertidumbre al principio, regresaron felices, convencidas y empoderadas. Tanto que este fin de semana una se enfrentó sin miedo a la opresión patriarcal y tuvo el valor de levantar la voz y ante la ridícula pregunta “¿Qué lograron?”, desarrolló un discurso que podría sin problemas titularse “El manifiesto feminista”. ¿Orgullosa? Sí, como nunca. Feliz de haber criado mujeres y hombres con una profunda conciencia feminista. Personas que gritan, que denuncian, que desaprueban, que no se callan más. Volvimos a salir a la calle, bajo el sol implacable, vestidas de morado, de verde, de negro, de valor. Organizadas en colectivos, grupos de amigas, asociaciones, en realidad el nombre de tu contingenté no era lo más relevante, lo importante es que estuvimos allí. Dicen que éramos 90 mil. Ya sabemos que el gobierno no cuenta bien. Yo estuve y creo que éramos muchísimas más y gritamos como si fuésemos millones. Tambores, altavoces, guitarras, letreros, mantas, humo morado, diamantina rosa, flores, pero sobre todo caras, rostros de una y de miles de mujeres, descubiertos, tal vez con miedo, pero con un gran valor. Un grito individual y colectivo, una por una lo logramos de nuevo, pintamos la ciudad, callamos todos los demás ruidos, nos hicimos visibles. Gritamos por nuestros derechos, por las injusticias, por la indiferencia, cantamos, bailamos, nos tomamos de la mano, exhibimos frases que cada una pintó en su cartel, en su ropa  o en su cuerpo.  

Te puede interesar:

Las pequeñas cosas: ubuntu

  Con una sonrisa nos fuimos reconociendo. Aquí sí les puedo asegurar sin el más mínimo ápice de duda que no hubo acarreadas. Nos vi llegando en Metro, caminando, reconociéndonos con una sonrisa, cantando y caminando juntas sabiendo que a todas nos movía la misma fuerza, la indignación y la fe de que el mundo pueda ser distinto para nosotras. -Es mi hija –me dijo una mujer que me solicitó llevar una pancarta con la foto de una joven–  Llevamos dos años buscándola. No dije nada, el nudo en la garganta me impidió hablar, tomé la pancarta y la levanté con mi mano derecha durante más de cuatro horas que marchamos. Podría hablar de cada historia, de cada letrero, de cada rostro, podría contarles que era increíble el espíritu de sororidad que se vivía, que cada consigna era más poderosa que la anterior, que los decibeles de nuestras voces y la resistencia de nuestras piernas nos sorprendieron a todas. También podría contarles –y esto es una impresión total y absolutamente personal– que a mí me pareció, a diferencia de otros años, una marcha bastante contenida, organizada desde fuera por fuerzas que sin darnos cuenta nos dijeron por dónde marchar. Vallas que obstruyeron y diseñaron nuestro camino, límites y señalamientos que hicieron de esta marcha más que una manifestación un tanto patriarcal. No es que uno salga esperando ver los más destrozos posibles ni mucho menos, pero para quien lo ve de lejos y no lo ha sufrido la radicalidad y violencia de muchas de las manifestantes obedece a una desesperada indignación y a una rabia de siglos de abusos y sometimiento. Este año no hubo eso, tampoco oradoras ni sorpresas. Tal vez por eso a mi hija le dijeron que no era una marcha concisa. Aun así sabemos muy bien todas porque fuimos, lo que demandamos y lo que esperamos cada que salimos a la calle a gritar ¡Justicia! Esta no es una marcha de intereses, esta es una marcha por nuestras vidas. De dignidad y de igualdad de derechos, una marcha para ser libres, para vivir seguras, para vivir sin miedo. Un grito por las que ya no están, una demanda por todas un voto de esperanza porque nuestras jóvenes tengan el derecho de vivir sin miedo. Una consecuencia, un reconocimiento a la lucha de nuestras ancestras, una obligación con nuestras hijas. ¡Mujer que escucha, esta es tu lucha! ¡Señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente!  

Te puede interesar:

Las pequeñas cosas: ubuntu

" ["post_title"]=> string(27) "Esa morra sí me representa" ["post_excerpt"]=> string(201) "Podría hablar de cada historia, de cada letrero, de cada rostro, podría contarles que era increíble el espíritu de sororidad que se vivía, que cada consigna era más poderosa que la anterior… " ["post_status"]=> string(7) "publish" ["comment_status"]=> string(6) "closed" ["ping_status"]=> string(6) "closed" ["post_password"]=> string(0) "" ["post_name"]=> string(26) "esa-morra-si-me-representa" ["to_ping"]=> string(0) "" ["pinged"]=> string(0) "" ["post_modified"]=> string(19) "2023-03-14 11:10:11" ["post_modified_gmt"]=> string(19) "2023-03-14 16:10:11" ["post_content_filtered"]=> string(0) "" ["post_parent"]=> int(0) ["guid"]=> string(35) "https://ruizhealytimes.com/?p=90172" ["menu_order"]=> int(0) ["post_type"]=> string(4) "post" ["post_mime_type"]=> string(0) "" ["comment_count"]=> string(1) "0" ["filter"]=> string(3) "raw" } [1]=> object(WP_Post)#18488 (24) { ["ID"]=> int(90558) ["post_author"]=> string(2) "42" ["post_date"]=> string(19) "2023-03-22 12:14:18" ["post_date_gmt"]=> string(19) "2023-03-22 17:14:18" ["post_content"]=> string(3563) "Más allá del fentanilo que entra por México, la epidemia por adicción a los opioides sintéticos fue creada de la forma más perversa posible por la industria farmacéutica legal en  Estados Unidos. Este tipo de fármacos se recetaban de una forma regular, sin ética, al por mayor, con comisiones generosas a los médicos por receta incluidas por los mismos laboratorios.  Hoy, bajo un contexto electoral, el Tío Sam busca culpables, obviamente fuera de sus fronteras y para crear en la mente de sus ciudadanos otro enemigo público que amenaza su seguridad nacional. Es el sello de la casa. Cuando no es el narcotráfico, es el terrorismo, o el comunismo.  En nombre de la paz mundial y envueltos en la bandera de la Democracia, siempre les ha venido bien tener un enemigo que, entre otros beneficios, aceite sus gigantes industrias armamentistas, energéticas, de materias primas e incluso (¿o son los únicos impolutos?) el tráfico y distribución misma de drogas ilícitas. Te podría interesar: Síndrome de Estocolmo (ruizhealytimes.com) Invasiones a lo largo de la Historia, sobran, so pretexto de cualquier tema antes aquí enumerado. Al morir el bloque comunista, muy a principios de los años 90, el primer enemigo fue Irak, régimen al que no descansaron de asediar por muchos años hasta no transmitir la ejecución de su líder Sadam Huseín, con la razón aquella (que se supo luego falsa) de poseer armas de destrucción masiva en su territorio.  Pero incluso en su entrada a la Segunda Guerra Mundial y las posteriores bombas nucleares arrojadas sobre dos ciudades del Japón (que, hay que decirlo, han sido pilares para evitar cualquier cantidad de conflictos bélicos a nivel mundial), y también en sus incursiones a Afganistán e Irak, con el enemigo a combatir por entonces, el terrorismo, hay quienes afirman, con seriedad y argumentos sólidos que EEUU sabía del ataque a Pearl Harbor durante la Segunda Guerra Mundial y simplemente dejaron que ocurriera. Lo mismo  se ha dicho sobre los atentados a las Torres Gemelas  en 2001. Y es que por entonces se necesitaba urgentemente a un enemigo en la psique del Pueblo estadounidense y del mundo, ya que, como se mencionó, el fantasma del comunismo había sido vencido. Te podría interesar: El genocida indultado (ruizhealytimes.com) Hoy se pretende colocar a México como el único responsable de la tragedia de la adicción mortal al fentanilo en ese país, pero baste con tan solo mencionar su nivel de cinismo, que en vez de ultra limitar la circulación de esos fármacos a un uso exclusivamente hospitalario, los mismos laboratorios fabricantes ahora han optado por fabricar y vender con el aval de sus autoridades (y a muy altos precios) el fármaco antídoto para casos de sobredosis de los mismos opioides y así evitar la muerte de los infelices que han caído en las garras de la demoníaca adicción. El presidente López Obrador tiene toda la razón, en este caso, de ponerles un alto a tiempo, obviamente sin dejar de colaborar con ellos en sus esfuerzos conjuntos por detener esa problemática, que es una realidad de lo más dantesca." ["post_title"]=> string(73) "La creación del mercado de opioides sintéticos, con el sello de la casa" ["post_excerpt"]=> string(99) "El tema del fentanilo ha alcanzado niveles de alta tensión en la relación bilateral México-EEUU." ["post_status"]=> string(7) "publish" ["comment_status"]=> string(6) "closed" ["ping_status"]=> string(6) "closed" ["post_password"]=> string(0) "" ["post_name"]=> string(70) "la-creacion-del-mercado-de-opioides-sinteticos-con-el-sello-de-la-casa" ["to_ping"]=> string(0) "" ["pinged"]=> string(0) "" ["post_modified"]=> string(19) "2023-03-22 12:16:12" ["post_modified_gmt"]=> string(19) "2023-03-22 17:16:12" ["post_content_filtered"]=> string(0) "" ["post_parent"]=> int(0) ["guid"]=> string(35) "https://ruizhealytimes.com/?p=90558" ["menu_order"]=> int(0) ["post_type"]=> string(4) "post" ["post_mime_type"]=> string(0) "" ["comment_count"]=> string(1) "0" ["filter"]=> string(3) "raw" } } ["post_count"]=> int(2) ["current_post"]=> int(-1) ["in_the_loop"]=> bool(false) ["post"]=> object(WP_Post)#18461 (24) { ["ID"]=> int(90172) ["post_author"]=> string(3) "189" ["post_date"]=> string(19) "2023-03-14 10:56:13" ["post_date_gmt"]=> string(19) "2023-03-14 15:56:13" ["post_content"]=> string(5275) "El título de esta columna fue votado por mis compañeras de marcha. Este 8 de marzo volvimos a salir a las calles. Esta vez no fui sola, esta vez fuimos todas, mis hijas y sus amigas, para las más jóvenes fue su primera marcha. Tenían un poco de incertidumbre al principio, regresaron felices, convencidas y empoderadas. Tanto que este fin de semana una se enfrentó sin miedo a la opresión patriarcal y tuvo el valor de levantar la voz y ante la ridícula pregunta “¿Qué lograron?”, desarrolló un discurso que podría sin problemas titularse “El manifiesto feminista”. ¿Orgullosa? Sí, como nunca. Feliz de haber criado mujeres y hombres con una profunda conciencia feminista. Personas que gritan, que denuncian, que desaprueban, que no se callan más. Volvimos a salir a la calle, bajo el sol implacable, vestidas de morado, de verde, de negro, de valor. Organizadas en colectivos, grupos de amigas, asociaciones, en realidad el nombre de tu contingenté no era lo más relevante, lo importante es que estuvimos allí. Dicen que éramos 90 mil. Ya sabemos que el gobierno no cuenta bien. Yo estuve y creo que éramos muchísimas más y gritamos como si fuésemos millones. Tambores, altavoces, guitarras, letreros, mantas, humo morado, diamantina rosa, flores, pero sobre todo caras, rostros de una y de miles de mujeres, descubiertos, tal vez con miedo, pero con un gran valor. Un grito individual y colectivo, una por una lo logramos de nuevo, pintamos la ciudad, callamos todos los demás ruidos, nos hicimos visibles. Gritamos por nuestros derechos, por las injusticias, por la indiferencia, cantamos, bailamos, nos tomamos de la mano, exhibimos frases que cada una pintó en su cartel, en su ropa  o en su cuerpo.  

Te puede interesar:

Las pequeñas cosas: ubuntu

  Con una sonrisa nos fuimos reconociendo. Aquí sí les puedo asegurar sin el más mínimo ápice de duda que no hubo acarreadas. Nos vi llegando en Metro, caminando, reconociéndonos con una sonrisa, cantando y caminando juntas sabiendo que a todas nos movía la misma fuerza, la indignación y la fe de que el mundo pueda ser distinto para nosotras. -Es mi hija –me dijo una mujer que me solicitó llevar una pancarta con la foto de una joven–  Llevamos dos años buscándola. No dije nada, el nudo en la garganta me impidió hablar, tomé la pancarta y la levanté con mi mano derecha durante más de cuatro horas que marchamos. Podría hablar de cada historia, de cada letrero, de cada rostro, podría contarles que era increíble el espíritu de sororidad que se vivía, que cada consigna era más poderosa que la anterior, que los decibeles de nuestras voces y la resistencia de nuestras piernas nos sorprendieron a todas. También podría contarles –y esto es una impresión total y absolutamente personal– que a mí me pareció, a diferencia de otros años, una marcha bastante contenida, organizada desde fuera por fuerzas que sin darnos cuenta nos dijeron por dónde marchar. Vallas que obstruyeron y diseñaron nuestro camino, límites y señalamientos que hicieron de esta marcha más que una manifestación un tanto patriarcal. No es que uno salga esperando ver los más destrozos posibles ni mucho menos, pero para quien lo ve de lejos y no lo ha sufrido la radicalidad y violencia de muchas de las manifestantes obedece a una desesperada indignación y a una rabia de siglos de abusos y sometimiento. Este año no hubo eso, tampoco oradoras ni sorpresas. Tal vez por eso a mi hija le dijeron que no era una marcha concisa. Aun así sabemos muy bien todas porque fuimos, lo que demandamos y lo que esperamos cada que salimos a la calle a gritar ¡Justicia! Esta no es una marcha de intereses, esta es una marcha por nuestras vidas. De dignidad y de igualdad de derechos, una marcha para ser libres, para vivir seguras, para vivir sin miedo. Un grito por las que ya no están, una demanda por todas un voto de esperanza porque nuestras jóvenes tengan el derecho de vivir sin miedo. Una consecuencia, un reconocimiento a la lucha de nuestras ancestras, una obligación con nuestras hijas. ¡Mujer que escucha, esta es tu lucha! ¡Señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente!  

Te puede interesar:

Las pequeñas cosas: ubuntu

" ["post_title"]=> string(27) "Esa morra sí me representa" ["post_excerpt"]=> string(201) "Podría hablar de cada historia, de cada letrero, de cada rostro, podría contarles que era increíble el espíritu de sororidad que se vivía, que cada consigna era más poderosa que la anterior… " ["post_status"]=> string(7) "publish" ["comment_status"]=> string(6) "closed" ["ping_status"]=> string(6) "closed" ["post_password"]=> string(0) "" ["post_name"]=> string(26) "esa-morra-si-me-representa" ["to_ping"]=> string(0) "" ["pinged"]=> string(0) "" ["post_modified"]=> string(19) "2023-03-14 11:10:11" ["post_modified_gmt"]=> string(19) "2023-03-14 16:10:11" ["post_content_filtered"]=> string(0) "" ["post_parent"]=> int(0) ["guid"]=> string(35) "https://ruizhealytimes.com/?p=90172" ["menu_order"]=> int(0) ["post_type"]=> string(4) "post" ["post_mime_type"]=> string(0) "" ["comment_count"]=> string(1) "0" ["filter"]=> string(3) "raw" } ["comment_count"]=> int(0) ["current_comment"]=> int(-1) ["found_posts"]=> int(54) ["max_num_pages"]=> float(27) ["max_num_comment_pages"]=> int(0) ["is_single"]=> bool(false) ["is_preview"]=> bool(false) ["is_page"]=> bool(false) ["is_archive"]=> bool(true) ["is_date"]=> bool(false) ["is_year"]=> bool(false) ["is_month"]=> bool(false) ["is_day"]=> bool(false) ["is_time"]=> bool(false) ["is_author"]=> bool(false) ["is_category"]=> bool(true) ["is_tag"]=> bool(false) ["is_tax"]=> bool(false) ["is_search"]=> bool(false) ["is_feed"]=> bool(false) ["is_comment_feed"]=> bool(false) ["is_trackback"]=> bool(false) ["is_home"]=> bool(false) ["is_privacy_policy"]=> bool(false) ["is_404"]=> bool(false) ["is_embed"]=> bool(false) ["is_paged"]=> bool(false) ["is_admin"]=> bool(false) ["is_attachment"]=> bool(false) ["is_singular"]=> bool(false) ["is_robots"]=> bool(false) ["is_favicon"]=> bool(false) ["is_posts_page"]=> bool(false) ["is_post_type_archive"]=> bool(false) ["query_vars_hash":"WP_Query":private]=> string(32) "b235f8b6854425208ca831235fa040ca" ["query_vars_changed":"WP_Query":private]=> bool(false) ["thumbnails_cached"]=> bool(false) ["allow_query_attachment_by_filename":protected]=> bool(false) ["stopwords":"WP_Query":private]=> NULL ["compat_fields":"WP_Query":private]=> array(2) { [0]=> string(15) "query_vars_hash" [1]=> string(18) "query_vars_changed" } ["compat_methods":"WP_Query":private]=> array(2) { [0]=> string(16) "init_query_flags" [1]=> string(15) "parse_tax_query" } }
marcha feminista

Esa morra sí me representa

Podría hablar de cada historia, de cada letrero, de cada rostro, podría contarles que era increíble el espíritu de sororidad que se...

marzo 14, 2023
La creación del mercado de opioides sintéticos, con el sello de la casa

La creación del mercado de opioides sintéticos, con el sello de la casa

El tema del fentanilo ha alcanzado niveles de alta tensión en la relación bilateral México-EEUU.

marzo 22, 2023




Más de categoría
Cultura democrática y el espacio del centro político

Cultura democrática y el espacio del centro político

Por supuesto que un régimen democrático no garantiza, de ninguna manera, que se resuelvan, de una sola vez y...

marzo 30, 2023
Que no te haga bobo Edmundo Jacobo

Que no te haga bobo Edmundo Jacobo

Edmundo Jacobo sorprendió a propios y extraños al decidir renunciar abruptamente a su cargo dejando en la orfandad a...

marzo 30, 2023
¿Por qué el #$%& fútbol?

¿Por qué el #$%& fútbol?

Socioculturalmente, los mexicanos estamos predestinados a la derrota más que a la victoria, en buena medida porque estamos más...

marzo 30, 2023
De Frente Y Claro | LA GUARDIA NACIONAL DEJARÁ EL METRO

De Frente Y Claro | LA GUARDIA NACIONAL DEJARÁ EL METRO

Según Sheinbaum, le dio resultado aquello de “Para todo mal, la Guardia Nacional”. Pero no conocemos si detuvieron a...

marzo 30, 2023