Pobreza generalizada

Desde hace décadas en nuestro país existen decenas de programas sociales que en su gran mayoría buscan crear y mantener una base social para cada gobierno en turno. Así pues, a lo largo de la historia te enteras de anuncios espectaculares, con bombo y platillo, en los cuales anuncian que han acabado con la pobreza, y otros más realistas dicen que solo han disminuido la pobreza.

Claro, esto siempre de acuerdo con sus métodos de medición, los cuales siempre les son favorables para anunciar esos éxitos. Aun así, la realidad nos revienta a todos en la cara, cuando en cada esquina vemos a los despectivamente llamados “Pedigüeños” y en otros lugares nos topamos con los menesterosos tirados en la calle envueltos en la inmundicia y la desesperanza de sus propios y particulares problemas, junto con el saber de la falta de futuro sabiendo que cada día la muerte está más cerca. 

En esta situación están miles y a estos no llegan ni han llegado los problemas sociales, siendo lo más probable que nunca serán atendidos por autoridad alguna. A todo el pueblo les duele, pero voltean a otro lado con y sin conciencia del problema, mientras que a otros les molesta verlos y no dudan en hacerles “el feo” con muecas de desagrado o de plano gritándoles “ponte a trabajar” o “hubieras trabajado cuando eras joven”.

En este contexto, la Voz del Pueblo considera que el día que no se ven este tipo de escenas de gente sufriendo pobreza y desesperanza, se verá mejora de la situación económica y el buen resultado de los programas sociales. Es necesario tomar cartas en el asunto, hacer algo para que como gobierno humanista se encargue de los verdaderos pobres y olvidados de la mano de Dios.

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