El pleito entre derechas que tuvo como escenario local el gobierno de Nuevo León, a cargo del reincorporado Samuel García, sigue teniendo repercusiones nacionales. Luego de que el PRIAN torpedeara la candidatura presidencial de Movimiento Ciudadano, ha provocado acciones de revancha en el mandamás del partido emecista, Dante Delgado. En un mensaje de X, antes Twitter, Delgado informó que el denominado bloque opositor de contención se rompía, dejando abierta la posibilidad de que, al menos en el senado, la bancada de morena y sus partidos aliados puedan lograr la mayoría calificada requerida para realizar reformas constitucionales.
La andanada de desencuentros, enfrentamientos, locuras y violaciones a la ley que trajo la fallida candidatura presidencial de Samuel García y su influencer esposa, Mariana Rodríguez, han traído un cisma opositor entre los partidos enfrentados al oficialismo. Como se recordará en los tiempos que se fraguaba el frente opositor, las cúpulas empresariales que determinan el devenir de sus integrantes, buscaron afanosamente la incorporación de MC a la alianza opositora que terminó imponiendo la precandidatura única de Xóchitl Gálvez.
No fueron pocos los ataques y amenazas que desde los partidos tradicionales se esgrimieron para que el partido naranja, nutrido de trásfugas políticos, se alineara con los intereses de la clase política derrotada en el proceso electoral de 2018. En el nacimiento de la pretenciosa figura opositora de Gálvez, la división dentro de MC estuvo liderada por el impopular gobernador, Enrique Alfaro, que con el pretexto de sumarse a la oposición al régimen morenista, disfrazó de alianza sus intenciones de no perder la importante gubernatura a manos del oficialismo.
Las presiones fueron incesantes por parte de las oligarquías en contra de MC para que se adhiriera por convicción o por coacción a la coalición opositora, hasta que se definieron las dos candidaturas presidenciales de las dos alianzas más fuertes en el país. Al no haberse concretado la ruptura de Marcelo Ebrard con Morena, y con la unidad interna del oficialismo en torno a la virtual candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum, el momento político aumentó su ya importante ventaja en las encuestas de preferencia electoral.
El escenario se volvió muy pesimista en torno a la virtual candidatura de Xóchitl provocando las alarmas de un escenario que no se había vislumbrado en la miope estrategia del frente opositor y sus ideólogos. MC podría acercarse demasiado a la votación del PRIAN y con la mínima posibilidad de relegarlos al tercer lugar. Esta hipótesis hizo eco en las aspiraciones emecista con la figura tipo influencer de Samuel García, bien apuntalado por su popular esposa.
Desafortunadamente el cálculo político del joven gobernador llevó al desastre su proyecto presidencial, sus cálculos políticos de ser candidato, obtener una votación importante a favor de MC, para luego regresar a gobernar Nuevo León y posicionar a su partido como un fuerza importante cercana al segundo lugar, no tenían sustento sino lograba instalar a un sucesor a modo en la gubernatura.
El congreso local neolonés de mayoría prianista tenía el poder constitucional de designar al suplente de García, junto con otros fiscales y funcionarios de la admiración local que serían afines a sus intereses opositores. En los hechos, MC estaría perdiendo todo el control de poder ejecutivo en la poderosa entidad, además de poder ser investigados en el ejercicio gubernamental del mandatario, por lo que los ímpetus del joven político fueron apaciguados y optó por bajarse de la contienda presidencial.
Con esa visión torpe y prepotente, Gálvez y otras figuras de la oposición pretendieron buscar la unidad, para que MC se aliara con la ahora denominada coalición, fuerza y corazón por México, llegando incluso a hacer llamados a deponer a su líder Dante Delgado. En la lógica idealista de que en política la aritmética se aplica al contentillo, los estrategas del frente opositor dan por hecho que por una suerte de meritocracia divina, los sectores clasemedieros que simpatizaban con la candidatura de Samuel se les adicionaran por simple fenómeno político natural.
Lo que nadie avizoraba era la movida de Dante Delgado, que enfundado en sus tenis “fosfo, fosfo”, planeaba cómo hacer pagar al PRIAN el haberle bajado a su mejor candidato, ya que así sean solo amagos, o solo pirotecnia política, los senadores de MC podrían aliarse con los de morena y sus aliados para hacer la diferencia en votación que requieren mayoría calificada. La amenaza aunque difusa y poco creíble, está ahora en la mesa, al parecer es resultado de un daño colateral que no vislumbro el frente opositor tan ensimismado en su odio e irracionalidad contra la figura presidencial.
Será hasta enero cuando MC designe a su nuevo candidato, pues al parecer no piensan doblegarse ante la andanada de la oposición de que participen juntos en una candidatura en torno a Xóchitl. Otras voces mencionaban que al avanzar la contienda presidencial, el candidato con menores posibilidades de enfrentar al oficialismo, declinaría a favor del mejor posicionado. En la lógica del voto útil, incluso esa idea de consumarse, podría no ser suficiente para disputarle de verdad la presidencia de la República a Morena, que a siete meses de la elección, luce muy fuerte y con amplias posibilidades de triunfo.
La apuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador de tener a un tercer candidato que robe los votos de la alianza del PRIAN se vio mermada con la salida de Samuel García de la contienda presidencial, pero al presentar MC un candidato propio a la elección de 2024, se sigue cumpliendo con el escenario de diezmar al alicaído frente opositor que no puede refundarse de la nada.
A la alianza opositora y a su virtual candidata no les queda más que reciclar a verdaderos cartuchos quemados del PRIAN, que son una suerte de políticos fracasados, privilegiados de puestos por designación directa o protegidos de las posiciones plurinominales, con trayectorias políticas deficientes, cuando no plagadas de corrupción y con serias acusaciones delictivas.
La propia Xóchitl reconoce que el cargar y tener que negociar con los partidos políticos que la apoyan le hacen ser menos imaginativa y espontánea, siendo esta característica una arma de dos filos, como se ha demostrado en lo que va de su candidatura. Ahora con la ruptura con un partido aliado, por más falsamente progresista, así como poco democrático, la oportunidad de crecimiento de la candidata prianista es muy poca, con la posibilidad real de protagonizar el naufragio político del Titanic que el propio Dante ha profetizado.
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