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Mátalos y luego averiguas

Los principales actos de gobierno de Andres Manuel López Obrador han sido realizados al revés. Pongamos como ejemplo el NAICM. AMLO comenzó por el final: canceló la obra asegurando que estaba llena de corrupción. Prefirió “matarla y...

15 de enero, 2021

Julio Chavezmontes Messner

Los principales actos de gobierno de Andres Manuel López Obrador han sido realizados al revés. Pongamos como ejemplo el NAICM. AMLO comenzó por el final: canceló la obra asegurando que estaba llena de corrupción. Prefirió “matarla y no averiguar”…

Si hubiera obrado con apego a la lógica de los actos de gobierno, debería haber ordenado la realización de diversas auditorías: debió constatar la viabilidad aeronáutica de la obra; auditar su administración exhaustivamente; verificar si efectivamente “había corrupción” y en caso de haberla, identificar a los corruptos para proceder contra ellos; debió analizar su viabilidad financiera, operativa, y logística. En conclusión, debió hacer una revisión exhaustiva del proyecto.

Solamente a partir de un análisis exhaustivo y profesional del NACIM, habría sido admisible determinar su cancelación, o bien, ordenar la continuación de la obra limpiándola previamente de toda corrupción, y en su caso, habiendo actuado legalmente contra los corruptos. El NACIM fue el primer caso de corrupción sin corruptos.

Los 109 fideicomisos

La desaparición de los 109 fideicomisos decretada por López Obrador también se hizo al revés: mató los fideicomisos en caliente sin averiguarlos previamente.

Lo correcto habría sido auditarlos exhaustivamente para determinar su viabilidad financiera, la honestidad o corrupción en su manejo, la identificación y castigo de los fiduciarios corruptos. Una vez llevado esto a cabo, determinar si hay que continuarlos o liquidarlos previa comprobación contable y financiera de su incosteabilidad, ineficacia o de su bondad y necesaria continuación.

Los organismos autónomos

Ahora parece que el presidente López Obrador quiere desaparecer al INAI y al IFETEL: quiere matarlos en caliente sin averiguar primero. Mi sugerencia es que los titulares de los organismos autónomos se adelanten ante los actos inminentes de su desaparición por orden presidencial, y promuevan juicios de amparo para los efectos de que las cosas no se hagan al revés.

Desaparecer los organismos autónomos “por inútiles y corruptos” sin acreditar previamente su inutilidad ni su corrupción, viola directamente los artículos 14º y 16º de la Constitución Federal.

Desaparecer al INAI y a IFETEL entre otros organismos autónomos, equivale a fusilar a alguien por considerarlo corrupto y criminal sin haberle dado previamente la oportunidad de defenderse en juicio con todas las garantías de imparcialidad, independencia judicial, debido proceso y demás formalidades indispensables.

No podemos darnos el lujo de tener un INSTITUTO PARA DEVOLVERLE AL PUEBLO LO ROBADO sin que se haya demostrado la existencia de ladrones a los que se les hayan quitado los bienes que supuestamente están siendo devueltos al pueblo.

Cancelar obras, liquidar fideicomisos y abolir organismos autónomos por corruptos e ineficientes sin haber probado previamente su ineficiencia y su corrupción, equivale a revivir a Porfirio Díaz que decía: MÁTALOS Y LUEGO AVERIGUAS.

El presidente López Obrador es la encarnación personificada de la HONESTIDAD VALIENTE.

NO ROBA, NO MIENTE Y NO TRAICIONA.

AMLO promete sustituir las funciones del INAI encargándoselas a la Secretaría de la Función Pública, ¿PERO QUIÉN NOS GARANTIZA QUE DESPUÉS DE AMLO YA NO HABRÁ MERCADERES EN EL TEMPLO DE LA CUARTA TRANSFORMACIÓN?

Si un futuro gobierno se vuelve opaco, oscuro, contrario a la transparencia y a la rendición de cuentas, tendríamos que luchar de nuevo contra corriente para revivir al INAI. Aceptemos por un momento que Andrés Manuel López Obrador es el paladín, el adalid, el prócer, el líder soñado por los mexicanos. ¿Podemos fusionar la vida de la nación con la vida de AMLO?

Si resulta que López Obrador es insustituible, tenemos que defender las instituciones que ahora quiere desaparecer porque cuando él llegue a faltar, dejará tras de sí un pueblo enlutado, un pueblo como los hebreos abandonados en el desierto sin Moisés, un pueblo indefenso ante el autoritarismo del que venga después de AMLO.

La única forma de garantizar que sigamos teniendo acceso a la información pública, es defender y conservar el INAI, y al proponer esto, evoco las palabras de Plutarco Elías Calles del 1º de septiembre de 1928, a raíz de la muerte del presidente reelecto, Álvaro Obregón:

“…Pero la misma circunstancia de que quizá por primera vez en su historia se enfrenta México con una situación en la que la nota dominante es la falta de caudillos, debe permitirnos, va a permitirnos, orientar definitivamente la política del país por rumbos de una verdadera vida institucional, procurando pasar, de una vez por todas, de la condición histórica de país de un hombre a la de NACIÓN DE INSTITUCIONES Y DE LEYES”.

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