Lágrimas y Risas

En la vida todos vivimos diferentes escenarios y tenemos experiencias diferentes, así unos sufren hasta las lágrimas y otros en el poder se debaten entre las risas que da el triunfo electoral. Por esto como periodista es necesario contarles lo que vemos y vivimos, lo cual levanta adeptos y enemigos acérrimos que no concuerdan y sienten un ataque, sin serlo, si las historias o los puntos de vista no concuerdan con ellos. Esta situación sucede en los dos bandos entre los que hoy se debaten los mexicanos.

Ninguno de esos bandos se da cuenta que en medio de ellos están millones de mexicanos que unos llaman ciudadanía y otros pueblo.Para sentir el pulso del pueblo es necesario que uno se hunda en ellos y siendo aceptado le cuenten fácilmente a uno sus penas y glorias. Que nos cuenten sus desgracias y sus terrores con lo que viven todos los días. Ninguno de los dos bandos sabe lo que un periodista sabe porque nosotros estamos empapados del sentir de los dos bandos y de la gente que está en medio de ellos sufriendo y luchando por sobrevivir.

Es por eso que yo les escribo lo que veo, lo que la gente me dice y lo corroboro con otras fuentes. Así, la columna de ayer no gustó a muchos de mis lectores habituales que no les gusta la actual situación, pero lo que mal entendieron fue la columna de ayer no fue para alabar a Claudia Sheinbaum, sino para analizar a lo que ella se enfrenta en mundo de hombre y en un movimiento de hombre que siempre han sido recalcitrantes machistas y manipuladores de mujeres, y planteo la posibilidad que si ella quiere salir triunfante de esta gran oportunidad que le da el destino, puede cambiar esto y hacer un país si, con las máximas sociales de MORENA, pero con las libertades que hemos estado construyendo todos los mexicanos. Así, llegarán a convertir al país en una potencia como Dinamarca.

Desgraciadamente, las lágrimas del pueblo están manchando y opacando las risas de nuestro país. En un 80 por ciento, los chiapanecos están sufriendo el destierro de sus comunidades y ciudades, para “vivir como arrimado”, como me comentó una señora pobre que no tiene ningún apoyo social. Esta señora, que pidió omitir su nombre, salió huyendo del municipio de Pijijiapan porque “ya no aguantó tanta matazón y los balazos que se escuchan todos los días”. Otros, buscan la manera de rescatar a sus familiares del municipio de Motozintla y los ejidos tomados por la mafia.

Estos casos y muchos otros no se ven en los medios, no se platican entre los hoy encumbrados, y si alguno se atreve a comentar, contestan con fastidio que solo es una “percepción”. Pero los muertos se apilan en una lista interminable de DESAPARECIDOS que cada día engrosan los archivos de la una Fiscalía General del Estado de Chiapas, que no investiga y que solamente resuelve las desapariciones “fáciles” de investigar como la de algún adolescente (femenino o masculino) rebelde que son rápidamente encontrados.

Hay mucha percepción de miedo, pero ese miedo es porque la gente ve con sus propios ojos la desgracia que llama a sus puertas o que se da a notar a su paso. No se enteran por los medios, sinopor las redes sociales que hoy se han convertido en el centro de chismes, rumores y dimes y diretes con mentadas de madre tal y como sucedía en antaño en los mercados o en los lavaderos públicos y de las vecindades.

Así, en una combi de pasaje urbano me enteré de un rumor que no ha circulado en ningún medio y en ninguna red. La combi venía repleta de gente parada y sentada, todos retacados y en silencio, mientras que yo platicaba con la señora que salió huyendo de Pijijiapan, lo que llamó la atención de todos y otra señora (trabajadora de un supermercado nacional) comentó “aquí en Tapachula ya hay toque de queda a las 10 de la noche”, ahí encontré mi “señal” para entrevistar… ¿Cuántos de ustedes han escuchado de este toque de queda? A lo que contestaron afirmativamente 10 de los 16 pasajeros de la combi de transporte público… ¿A cuántos de ustedes los han asaltado o robado de alguna manera con violencia? 13 de los 16 dijeron que sí… Y un señor cerró la entrevista grupal al decir “Esta de la chingada”.

El silencio volvió a tomar el control de la combi de pasaje colectivos y la humedad penetraba en todos por la frescura de la tormenta que rodea a un destartalado y caro transporte público en Tapachula.

En México hay muchas caras, muchas vivencias con la felicidad que provocan nuestras risas, pero también hay muchas desgracias llenas de lágrimas que son más importantes para la gran mayoría de los mexicanos que otros temas políticos. Los mexicanos queremos comer bien, vivir bien, educar lo mejor posible y que reciban la mejor educación académica en la escuela que los haga hombres de bien y que cuando llegue la muerte dejarle una buena educación u oficio que les de mejor vida a nuestros hijos.

Te puede interesar:

Presidenta o albacea…