¿Habrá algo peor que ser gobernados por AMLO?

No, para los pesimistas de toda la escala social, desde los que están cerrando sus empresas y enviando sus divisas… No, para los pesimistas de toda la escala social, desde los que están cerrando sus empresas y...

17 de mayo, 2018

Octavio de Jesús Rebollar

No, para los pesimistas de toda la escala social, desde los que están cerrando sus empresas y enviando sus divisas…

No, para los pesimistas de toda la escala social, desde los que están cerrando sus empresas y enviando sus divisas al extranjero hasta los que están preparando sus maletas para aceptar la invitación que tienen del extranjero a cambiar de aires para llegar a ser lavaplatos o cosechador de jitomate con los riesgos de Trump y la Migra, dispuestos a cualquier cosa menos a ser gobernados por ese señor, que personifica la materialización de todos los malos augurios que ha recibido nuestro país en el pasado reciente.

Piensan que México llega a su fin con esta debacle, mas creo que un país es mucho más grande que un mal gobernante. Estados Unidos sobrevivirá a Donald Trump, México sobrevivió a Luis Echeverría y a José López Portillo.

Las características relevantes del candidato que lidera las encuestas conjugan las cualidades que distinguieron a los gobiernos de la docena trágica de nuestro país: ignorancia completa de las medidas que se requieren para mantener boyante la economía; preparación y capacidad para encaminar los destinos nacionales; autoritarismo a toda prueba; encontrar responsables y/o culpables de todos los males nacionales a un grupo de maleantes producido por la rica imaginación deformante de la realidad que exonera al gobernante y culpa a las transnacionales y los ejecutivos de Wall Street en épocas pasadas y a la Mafia del poder en la actualidad; considerarse el ombligo del mundo, centro del Universo, apoyador irrestricto de gobiernos extranjeros socialistas que finalmente llevaron al fracaso a sus países, Cuba y Chile antes, Venezuela y Nicaragua hoy; pésimos estudiantes que creen que con su divina inspiración sacarán adelante la educación de nuestro país con sus fumadas medidas como la importación y adopción de maestros ajenos al sistema, que en vez de mejorar la enseñanza colaboran a echarla a perder mas de lo que está, chilenos antes y miembros de la malévola banda de la Coordinadora hoy; gastos faraónicos en obras inservibles o costosísimas, inadecuadas a la inversión hecha, v.gr. Centro Ceremonial Otomí, Aeropuerto de Santa Lucía.

Baste por el momento lo hasta aquí enumerado para presagiar el pésimo gobierno que nos espera y plantearnos la pregunta ¿puede la nefasta intervención del enviado de Belcebú agregar males a los que ya se prevén?

La respuesta es afirmativa, considerando la evolución del socialismo/populismo durante estos años, la exacerbación del odio inter social, la ampliación de la brecha entre ricos y pobres, la descarada impunidad, la violencia, la corrupción y el acertado acento que de todos estos fenómenos ha hecho el hoy candidato líder en las encuestas el número de seguidores se ha elevado exponencialmente a causa de tantos factores y la calidad de los mismos ha abierto su abanico con una amplitud imprevisible.

Poco o nada le sirve al dirigente la experiencia del PRD, partido integrado por diversos grupos a los que sólo los unía su ambición de poder y su denominación de izquierdistas, nunca pudieron ponerse de acuerdo en el significado de tal palabra y así comunistas, maoístas, trotskistas, anarquistas, se integraron en un grupo caracterizado por la desunión y la indisciplina.

Cegado por la ambición y ensoberbecido por la cercanía del triunfo, compensando su baja autoestima con un autoritarismo donde se supone omnipotente, dispara toda clase de infundios, declaraciones y propuestas.

Por carecer de una filosofía o doctrina perfectamente definida ha reclutado toda clase de personajes de lo más disímbolos, desde intelectuales de primer orden, hasta las hordas que llenan las redes sociales con improperios, insultos, dislates y faltas de ortografía; desde delincuentes a quienes ofrece su protección a cambio de su aportación de nombre o de seguidores hasta un sinnúmero de personas decentes de buena voluntad; desde personas de la tercera edad hasta jovencitos ignorantes incapaces de formarse un criterio propio y un razonamiento que respalde su decisión de niño berrinchudo que con pataditas en el suelo afirman que están con el Peje.

El señor Lagarto ha hecho tantas promesas, ha envuelto con su labia amorosa a tantas y tan diferentes personas y lo ha hecho con tal desaseo, fiel a su sistema de decir a cada auditor y auditorio lo que quiere escuchar para conseguir su afiliación y carece de ideales y valores consistentes y armonizados en un plan de gobierno constructivo, positivo, ambicioso en el sentido de engrandecer al país y no al gobernante, que el resultado es un revoltijo de mariscos, carnitas y barbacoa servido para una cena de un club vegetariano.

Y como los recién enamorados están dispuestos a créele todo al nuevo amor defienden lo que han querido escuchar y no lo que en realidad se les ha dicho.

Díganlo si no las diferentes y hasta contradictorias interpretaciones que voceros y representantes dan a las declaraciones del jefe y que van desde búsqueda de conciliación hasta amenazas de ostracismo para quienes se atrevan a disentir del pensamiento que creen que tiene su jefe.

El gran peligro es entregar poder de decisión a tales personas y no dudo que muchos tengan ofrecido esto para agregarse a la campaña.

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