DIÁLOGO RENOVADO Y ABIERTO ENTRE LOS GOBERNADORES Y LA FEDERACIÓN, PLANTEA MBH

El mandatario estatal participó en la edición número 34 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara

 

-Consideró que las inquietudes sobre el Pacto Fiscal expuestas por determinados gobernadores, tienen fines políticos de cara a las elecciones de 2021 y 2024

CIUDAD DE PUEBLA, Pue.- Al participar en el 9o. Seminario Internacional “Federalismo y combate a la corrupción en América Latina: Hacia un nuevo pacto social en México”, como parte de la edición número 34 de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, el gobernador Miguel Barbosa Huerta planteó que se establezca un espacio de diálogo renovado y abierto entre el Gobierno Federal y los 32 mandatarios estatales a través de la Conago.

Señaló que la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) se ha convertido en un instrumento con el que algunos mandatarios buscan hacerle contrapeso a la federación, facultad que solo la tienen las dos cámaras del Congreso de la Unión y el Poder Judicial: “no hay organismo ni poder intermedio entre las tres formas de gobierno: federal, estatal y los municipales”, subrayó.

Opinó que las inquietudes expuestas por determinados gobernadores tienen fines políticos de cara a las elecciones de 2021 y 2024, luego de considerar que el Pacto Fiscal con el que se están inconformando algunos de sus homólogos, se tendrá que renovar, pero destacó que no debe de utilizarse como una estrategia para socavar al régimen.

“El tema del nuevo federalismo y del nuevo Pacto Fiscal ya nadie lo para, gobernadores, se va a dar, pero no que sea como un instrumento o estrategia para socavar al régimen porque entonces nos estamos olvidando del mandato del sufragio, del voto; vamos a buscar las leyes de hoy y promover la renovación de las que puedan darnos un mejor federalismo, una mejor convivencia entre los poderes y la sociedad”, dijo.

Por último, Barbosa Huerta consideró que el supuesto centralismo del que se quejan los gobernadores de la Alianza Federalista, sí se ejerció en los gobiernos priistas y panistas del pasado: “un centralismo desbordado en corrupción”, concluyó.