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LA SUPERSTICIÓN ENERGETICA DE MEXICO

Hoy la superstición creada ha dejado una escuela en prácticas, conductas y hábitos que difícilmente podrá ser erradicada en nuestra cultura. Eliminar nuestra propia creencia energética choca con los dogmas de la clase política dominante, las cuales...

14 de enero, 2021

Ramses Pech

En 2013, antes de la Reforma Energética, la energía representaba alrededor del 10.5% del PIB al tercer trimestre (hidrocarburos el 8.5% y 2.5% Eléctrico). En 2020 descendió a 8.5% (hidrocarburos el 4.5% y 3.5% Eléctrico).

¿Por qué disminuyeron las inversiones? Porque a partir de 2015 se contrajeron los presupuestos para PEMEX y CFE y, en 2018, la evaluación del mercado de las políticas públicas y leyes, que no han terminado, han mermado la certidumbre de invertir en este rubro.

Consideremos dos grandes mercados que toman las energías primarias, y las transforman para su utilización en actividades del ser humano: Hidrocarburos y Electricidad.

¿Qué necesitamos en cada una de ellas?

Mercado de Hidrocarburos

El error que cometemos en México y hemos creado una SUPERSTICIÓN, tiene que ver con la forma de explotar y extraer la materia prima para su transformación, en el contexto de una soberanía malentendida que ha proporcionado una contracción en el volumen de barriles y millones de pies cúbicos producidos, menor que lo que podríamos haber tenido en un momento dado. Proteger la soberanía no significa no dejar entrar a la inversión a un país, significa hacer reglas, normas y acuerdos que ayuden a tener una explotación ordenada de los recursos naturales que tenemos en el subsuelo. ¿Es acaso factible que hoy día PEMEX tenga los recursos necesarios para incrementar la producción y acondicionamiento de las plantas actuales?

El crudo sirve para dos cosas: para comercializar en el exterior o dentro del mercado local, y para su envío a refinerías para su transformación. En México alrededor del 60 al 70% de la mezcla mexicana de exportación es enviada a refinerías de EEUU, siendo los principales compradores en volumen, empezando con Valero, Shell, Chevron, Phillips 66.

El crudo en el mundo, alrededor del 80%, es utilizado para generar combustibles para el transporte. Gran parte del rechazo energético proviene por el calor que provocan las malas combustiones en los motores. De ahí que muchos países hayan mejorado la calidad de éstos al adicionar aditivos como los oxigenantes para mejorar el rendimiento, y eliminado en una mayor cantidad el azufre en el diésel y combustóleo. Así se crearon algunas empresas del tipo ecológico (Diamond Green Diesel).

El gas natural es utilizado para la industria de la petroquímica, fertilizantes, y generación de electricidad. Éste tendrá un crecimiento potencial a partir de 2030, derivado de una electrificación en todas las actividades del ser humano.

La superstición por eliminar es la “Soberanía” energética, ya que está en función de una ideología política ligada a energía. Los hidrocarburos serán la energía primaria base por más de cuatro décadas, pero dependerá de cómo usar las tecnología para evitar contaminar la atmosfera y el entorno.

Mercado Eléctrico

Mucha gente asume que energía y electricidad significan lo mismo, pero la electricidad es solo un componente del consumo total de energía primaria.

La SUPERSTICIÓN energética ha creado una politización del mercado.

El nuevo mercado ha realizado una separación correcta de empresas dentro del negocio de la electricidad: los que tienen el control del balance en reguladores, y quienes otorgan los permisos para ser parte del mercado. Se deja así afuera a la empresa productiva del estado, como parte del mercado, como un prestador de servicios, y solo confiriendo (de acuerdo con lo que la nación cree conveniente) la transmisión y distribución, a donde por ley hay un pago que tiene que realizar cada generador o suministrador por el uso de la infraestructura.

CFE no determina quién puede tener un contrato de interconexión o conexión en el mercado eléctrico; el facultado es CENACE. Por medio de estudios determinará si con la infraestructura actual puede realizar dichas operaciones o si requerirá de un reforzamiento y/o nueva línea. Además, debemos dejar en claro que CENACE-CRE deberán tomar una decisión para el mercado correcta, involucrando no solo a CFE, sino a los privados generadores y suministradores.

A las energías limpias se les han querido ver como un problema cuando realmente no lo hay. En México hay un potencial tecnológico con la generación fotovoltaica o eólica, a lo cual el CENACE, y no CFE, deberá estudiar la forma de coordinar el balance en la red. Acaso en otros países es un problema hacer esto por el controlador.

¿Qué necesitamos en México? Una estructura de red de las interconexiones que ayuden a mantener la confiabilidad del sistema de energía al proporcionar múltiples rutas para que fluya la energía y permitir que los generadores suministren electricidad a muchos centros de carga. Esta redundancia ayuda a evitar que las fallas de la línea de transmisión o de la planta de energía causen interrupciones en el servicio. El CENACE debe confirmar ser un operador del sistema independiente y imparcial de la red, que no tenga interés económico alguno en ningún segmento individual, y que garantice un acceso equitativo y transparente a la red de transmisión y al mercado de transacciones.

La nación vía la Cámara de Diputados y/o el Senado, debe crear Organizaciones Regionales de Transmisión (ORT) que operen sistemas de energía eléctrica. Las ORT pueden ser organizaciones independientes, sin fines de lucro, basadas en miembros que garanticen la confiabilidad y optimicen la oferta y demanda de energía eléctrica mayorista.

El mercado eléctrico residencial en México tiene el mayor número de usuarios, pero el de mayor consumo es el sector industrial con el 57% del total vendido en el mercado.

Estamos listos para cambiar de mentalidad de una política unilateral sexenal o crear planes de largo plazo acorde a la demanda en crecimiento.

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