¡Hola, estimados lectores del sitio Ruiz-Healy Times! Hoy no les está escribiendo Octavio García; no, no, no, hoy les escribe Garcian, astrólogo de nivel 31, con 35 horas vagadas en las Tierras Intermedias. En estos parajes hermosos, aunque lúgubres, y que siempre están vigilados por el ojo celoso del Árbol Áureo, he muerto y renacido cientos, tal vez miles, de veces. En serio, no estoy siendo hiperbólico en la afirmación anterior: he perdido la cuenta de las veces que el texto «MORISTE» ha aparecido en la pantalla de mi televisor.
Si usted no es un gamer acérrimo, es probable que aun así haya escuchado sobre una cosa llamada Elden Ring, ya sea en un feed de noticias, un sitio de internet o en televisión. Y no es para menos: estrenado el 25 de febrero de este 2022, el videojuego desarrollado por el estudio FromSoftware y publicado por Bandai Namco ya vendió la friolera de 12 millones de copias en todo el mundo (probablemente esta cantidad aumente para cuando esta colaboración salga a la luz). Desde el día de su estreno, las noticias relacionadas con este título no han parado de salir: desde buenas (como la de ser uno de los títulos con más jugadores en su estreno en la plataforma Steam) pasando por las curiosas (como la de los jugadores que venden sus puntos de experiencia en Ebay) hasta las malas (como la de los alegatos de malas condiciones laborales en el estudio). Sin embargo, en este artículo quiero centrarme únicamente en el producto final. Después de haber pasado decenas de horas dentro del mundo creado por el equipo de Hidetaka Miyazaki, director del juego, me parece que Elden Ring entraña una muy bella metáfora de la vida. Sí, con todo y los monstruos terribles que pueden matar a nuestro protagonista con un solo golpe. Déjeme explicarle por qué.
Las Tierras Intermedias
La trama de Elden Ring, en la que colaboró el autor de Song of Fire and Ice, George R.R. Martin, no constituye el punto fuerte del juego. Al menos, no en el sentido tradicional. En resumen, la premisa del juego es que el Círculo de Elden (de ahí el título), el mismo origen del Árbol Áureo (una especie de árbol de la vida), ha sido destruido. Esto provocó una guerra entre semidioses y la devastación posterior del mundo y nuestro protagonista deberá restaurar el orden. Sí, es una trama bastante «común» para un juego de fantasía. Sin embargo, la forma en la que está contada es única, ya que no hay largas escenas relatándonos lo que ocurre. La trama fluye, en cambio, a través de conversaciones con los habitantes de las Tierras Intermedias o por medio de textos desperdigados.
Esto hace que Elden Ring sea una especie de novela interactiva enorme, armada por los trozos que cada jugador encuentra y comparte con la comunidad. La historia nunca se mostrará claramente ante el jugador, sino que es una labor que comienza por escuchar a los demás habitantes de estas tierras y ver qué más han encontrado otros jugadores para ir uniendo las piezas del rompecabezas.
El valor de la comunidad
Elden Ring es, en esencia, un juego hecho para formar una comunidad, desde un punto de vista diferente del de los títulos multijugador en línea. Como es costumbre en los videojuegos de FromSoftware, hay un sistema para que los jugadores, a la par que van descubriendo el mundo, dejen mensajes de ayuda para advertir a los demás acerca de peligros, dar consejos para las peleas con los jefes o mostrar la ubicación de algún ítem especial. Este sistema no es único: Death Stranding, de 2019, también utilizó esta forma de comunicación asincrónica (¡qué bonita palabra, caray!) para que los jugadores pudieran ayudarse entre sí.
Este sistema en el que los jugadores se ayudan mutuamente dentro de Elden Ring se asemeja a la vida misma. No es necesario que pasemos el juego solos, ya que podemos nutrir nuestro conocimiento de este mundo fantástico a través de la experiencia previa de los demás. Nuestro sufrimiento en las Tierras Intermedias puede aligerarse un poco si atendemos los consejos de los demás. De la misma manera, nosotros podemos aliviar el sufrimiento de alguien más al dejar plasmado lo que ya aprendimos a partir de nuestros errores. Esto es algo que hacemos en nuestra vida diaria y lo cual forma parte de la experiencia humana.
De la misma manera, los retos que se presentan ante la comunidad de jugadores pueden enfrentarse con la ayuda de alguien más. El juego cuenta con un sistema mediante el cual podemos invitar a un amigo (o completo desconocido) para que nos ayude a terminar con los jefes. Es decir, por más terrible que sea el enemigo que tengamos enfrente (y hay muchos que seguramente poblarán nuestras pesadillas futuras), no es obligatorio que lo hagamos en soledad. Esto se asemeja a los problemas que enfrentamos en nuestras vidas: los podemos resolver nosotros mismos, pero hay veces en las que necesitamos el acompañamiento sincero de un amigo, familiar o, en ocasiones extraordinarias, de un completo extraño que por alguna razón se encuentra en el mismo camino que nosotros.
La opción de hacerlo todo por nosotros mismos también está presente en Elden Ring. Sin embargo, nuestro trajín será más complicado (a menos que seamos unos iluminados en eso de los videojuegos) y, a la postre, menos divertido y enriquecedor.
El círculo de Elden y la vida misma
Como es de esperarse, en Elden Ring hay dragones. Muchos. Es difícil ignorar lo simbólico de este ser mitológico con el que nos encontraremos con frecuencia. Un dragón, por lo general, es el guardián de algo o alguien especial (por ejemplo, un tesoro o una persona). Estos enfrentamientos ejemplifican otra de las lecciones que Elden Ring nos deja: por más difícil que sea la vida, siempre hay una manera de superar los obstáculos y los retos que se nos presentan. Vayamos más allá todavía: sólo lo verdaderamente importante y valioso nos hará sudar, nos costará trabajo, dedicación y, sí, muchas veces sufrimiento. Pero la recompensa, al final, es más trascendental que aquello que obtenemos fácilmente. En el juego, por ejemplo, seremos premiados con una pieza de armadura especial o un nuevo fragmento de la historia.
La constante resurrección de nuestro personaje es similar a las veces que fracasamos en la vida únicamente para levantarnos y volver a intentarlo. En la experiencia humana, no son pocas las veces en las que deberemos «morir» (en un sentido metafórico, claro) para reconstruirnos en una versión más fuerte y sabia de nosotros mismos, una versión que está mejor preparada para enfrentar al mundo, con todos sus riesgos y peligros. En Elden Ring, nuestro personaje atraviesa todo el tiempo por el ciclo del ave fénix y su resurgimiento a partir de las cenizas. Con cada fracaso, nuestro personaje se hace cada vez más fuerte, es decir, «sube de nivel». Nosotros, en la vida real, también «subimos de nivel», a partir de nuestra experiencia, lo cual nos acerca un poco más a nuestras metas. Por ejemplo, Garcian, mi personaje, simplemente no estaba preparado para enfrentar al Malnacido Leonino (uno de los primeros jefes opcionales) la primera vez que se cruzó con él. Sin embargo, después de practicar sus habilidades mágicas con otros enemigos menores y de prepararse mejor para la batalla, el Malnacido (¡así se llama, lo juro!) pereció de forma sencilla a manos de mi astrólogo. Esto era algo impensable para el Garcian inexperto e ingenuo de nivel 1.
¿Qué nos deja Elden Ring?
Como he intentado explicar, espero que de forma clara y entretenida, es que más allá de la apariencia, Elden Ring es uno de los videojuegos recientes que mejor retrata varios aspectos de la vida. En cierta medida, pienso que esto es una de las razones del tremendo éxito que ha tenido el título de FromSoftware. Es imposible no vernos reflejados en las tribulaciones de nuestro protagonista, quien, a pesar de saber cuál es su objetivo dentro de las Tierras Intermedias, pasará mucho tiempo confundido, pero también aprendiendo.
Gracias por leer este rollo acerca de uno de los eventos más importantes dentro de la historia de los videojuegos. Y ustedes disculparán, pero ahora sí debo volver a convertirme en Garcian, el astrólogo, para seguir explorando la vastedad de las Tierras Intermedias y, muy probablemente, morir unas mil veces más.
Gracias a la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística, AC por otorgarme los Reconocimientos al Mérito de la Producción Editorial y a la Difusión Histórica y Cultural
El Dr. Juan Carlos Tolentino Flores presidente de la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística Fundada en 1942,...
noviembre 21, 2024De Frente Y Claro | MENOS PRESUPUESTO PARA CULTURA
Grave y preocupante el panorama para la Cultura no solamente en el 2025, sino en lo que será esta...
noviembre 21, 2024Las pequeñas cosas: monstruos
“Me agarra la bruja, ay, me lleva a su casa, me vuelve maceta y una calabaza” – La Bruja
noviembre 20, 2024Batalla sin perdedor
…cada noche me visto de tentación para hacer realidad la fantasía.
noviembre 18, 2024