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Los principales desafíos para las pymes después del sismo del 19 de septiembre

Debido al pasado sismo de 7.1 acontecido el 19 de septiembre y en el que entidades como la ciudad de México, Puebla y Morelos...

5 de octubre, 2017

Verónica Romero

Debido al pasado sismo de 7.1 acontecido el 19 de septiembre y en el que entidades como la ciudad de México, Puebla y Morelos resultaron altamente afectados, miles de mexicanos sufrieron pérdidas de una trascendencia mayúscula.

Un gran número de personas perdieron a sus seres queridos y muchas familias se quedaron sin hogar, por lo cual, se encuentran en una difícil situación económica.

La solidaridad no se hizo esperar en esta tragedia, y un sinnúmero de ciudadanos se dieron a la tarea de ayudar en importantes actividades, como la remoción de escombros, en el rescate de personas atrapadas ó a la organización de las donaciones hechas por la sociedad, de víveres y de varios insumos para los diferentes albergues que se adaptaron en auxilio de los damnificados.

Muchos empresarios abrieron sus negocios para atender a los rescatistas y voluntarios, y prestaron sus instalaciones como centros de acopio.

El uso de la tecnología fue un factor muy relevante en la localización de personas y para la coordinación de acciones para auxiliar a los sectores de la población más afectados.

Sin embargo, lo más complicado apenas inicia, ya que continúa el recuento de los daños y habrá que tener un control del manejo de los recursos, en un ambiente de transparencia para la reconstrucción de los lugares que resultaron dañados.

Vienen meses muy complicados. El estricto apego a la Ley debe imperar en las labores de reconstrucción, ya que si muchos de los edificios que se derrumbaron, se colapsaron o que tienen daños estructurales, se encuentran en esa situación, es por las corruptelas existentes entre las constructoras (que en gran medida no cumplen con los estándares para construir) y las autoridades delegacionales. Además, diversas empresas utilizan materiales de baja calidad para minimizar costos.

En la colonia del Valle, que es donde está ubicado mi negocio, todo el año se observa la existencia de nuevas construcciones de más de 6 pisos y con muchos departamentos. Esto ha encarecido el agua en la zona, que por cierto cada día eleva más su costo, a pesar de que varios días a la semana y a diferentes horas no contamos con el servicio, además, si te toca una de éstas construcciones junto a tu casa o negocio, es seguro que te vas a enfrentar con daños en tu propiedad a los que varios constructores hacen caso omiso. No se respetan los espacios de colindancias y finalmente no pasa nada y las constructoras siguen operando y los ciudadanos vivimos en una total indefensión.

Las autoridades han estado visitando los inmuebles dañados, muchos de los cuales están ocupados por empresarios. Desgraciadamente, un gran número de negocios sufrieron daños estructurales, y al no contar con los recursos para superar las pérdidas, han tenido que cerrar.

Son muchos los negocios que no están abriendo, debido a que tienen al lado o en la misma calle, edificaciones con daño estructural, y por lo cual, la autoridad no les permite operar. Demoler un edificio representa para el dueño un gasto muy elevado y que no todos pueden cubrir, por ello, el gobierno debe intervenir para que estos casos se resuelvan y la economía de muchas zonas pueda seguir activa y en crecimiento.

Por otro lado, varias empresas siguen operando a pesar de que en el lugar que ocupan sus negocios hay afectaciones que no garantizan la seguridad de la gente que labora ahí ni de sus clientes, pero afortunadamente son los menos, ya que otros empresarios han dejado de laborar para darle solución a problemas tales como la cuantificación de daños, reparaciones, búsqueda de financiamiento, uso de su Seguro; para solicitar un dictamen estructural que les de la confianza de que su inmueble no representa ningún peligro para sus asistentes, y el soporte legal ante la autoridad. Además, es necesario tener al día el Plan de Protección Civil y un segundo dictamen de ésta dependencia para seguir funcionando.

En algunos casos, los empresarios se han tenido que reubicar en espacios de coworking para seguir adelante con su operación.

Aunque actuar de ésta manera, cumpliendo con la Ley y con la debida responsabilidad que el tema requiere, significa grandes pérdidas económicas, también se va a traducir en considerables beneficios y te van a evitar enormes dificultades.

Para los negocios que no sufrieron mayores percances, vienen retos sustanciales y se deben tomar medidas preventivas para éste tipo de eventos.

Algunas recomendaciones a seguir que te van a ayudar a reactivar tu empresa son:

Platica con tus empleados para que conozcas cómo se sienten e identifiques qué tipo de apoyo necesitan.
Como líder de tu empresa, sé la persona que guíe a tus colaboradores para seguir adelante a pesar de la crisis.
Comunícate con tus clientes y de ser el caso, coméntales la causa por la que vas a suspender tus actividades por algunos días, de lo contrario, avísales que tu negocio no sufrió ningún daño estructural y que seguirás trabajando de manera habitual.
Es elemental que el empresario mantenga una comunicación constante con sus proveedores, para que si algunos de ellos no pueden prestarle sus servicios, tenga la posibilidad de localizar a otros negocios que puedan satisfacer sus necesidades en tiempo y forma.
Crea promociones para la venta de tus productos o servicios.

Ante éste panorama, es fundamental que el gobierno federal investigue las causas que suscitaron el derrumbe y la afectación de tantas propiedades de la ciudad, y que se empiecen a asumir las debidas responsabilidades al respecto, ya que la sociedad estará más atenta y exigirá al gobierno, con mayor dureza, la reconstrucción de lo perdido y una adecuada administración de los recursos.

La creación, a la brevedad, de nuevas fuentes de financiamiento y que el SAT ofrezca beneficios fiscales a las pymes, impulsará la reactivación de la economía de una forma más acelerada.

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