Entre aquéllos que desean ingresar al mundo de los negocios, ha surgido un especial interés por conocer los orígenes de quienes han fundado empresas exitosas.
De manera particular, existe en los nuevos emprendedores, un profundo deseo por descubrir la historia personal (storytelling) de esos grandes empresarios, es decir, los valores, motivaciones y experiencias que impulsaron a muchos de ellos a la creación de sus negocios; su trayectoria profesional y la forma en la que gestionan sus empresas.
Un numeroso grupo de empresarios han sabido desarrollar una adecuada marca personal (personal branding), que ha traído beneficios considerables para sus negocios.
Contar con una marca personal sólida, le abre a los emprendedores muchas puertas en el mercado, y les ayuda a crear una reputación de liderazgo en el medio en el que se desenvuelve su empresa; les permite tener una mayor influencia en futuros negocios que deseen realizar y el tener una dirección más efectiva en su vida personal y profesional. Se trata de elaborar una historia auténtica que genere interés y notoriedad en la sociedad acerca de tus proyectos.
El dueño de una empresa es el representante de su marca; de ahí la importancia de hacerse de una imagen diferenciadora, única y positiva que haga que el empresario consiga un mayor éxito en sus relaciones sociales y profesionales en un entorno tan competitivo y cambiante como el actual.
Para crear una imagen personal fuerte, hay que ser coherente con lo que se dice y se hace, y saber comunicarse con seguridad. Esto te dará más credibilidad en los ambientes en los que interactúas de forma cotidiana.
Un error que cometen muchos emprendedores es el pensar que su empresa es un ente ajeno a ellos, y se muestran con sus clientes de una forma que no los representa. Suele suceder que a muchos de esos clientes se los llegan a encontrar en sus redes sociales o en eventos, por ser familiares y conocidos de sus círculos de amigos, y cuando estos consumidores notan ésta escisión entre un negocio y su dueño nunca lo vuelven a ver igual, e incluso puede hacer que se inclinen por otras marcas; por eso hay que tener un especial cuidado en la manera en la que nos conducimos dentro y fuera de nuestra empresa.
Existe mucha competencia en el mercado y lograr diferenciarse como profesional y empresario es crucial para que tu target (público meta) se fije en ti y en tu negocio.
Es elemental medir el impacto que vayamos teniendo, la evolución y aceptación de aquello que deseamos transmitir, y tener en mente posibles mejoras. Darle la debida atención a éstos aspectos va a hacer que seas considerado como un emprendedor valioso y confiable.
Tu marca personal no es lo que dices que eres, es lo que los demás perciben que eres.
Algunas cuestiones que debes de considerar para definir tu marca personal son:
- ¿Quién eres?
- ¿Qué ofreces?
- ¿A qué te dedicas?
- ¿Qué te hace diferente?
- ¿Qué atributos personales tienes?, tales como creatividad, ética, especialización.
- ¿Quién es mi perfil de cliente / contacto profesional?
El networking juega un papel fundamental en la creación del personal branding. De nada sirve ser un emprendedor exitoso si nadie te conoce.
Acude con regularidad a éste tipo de eventos. Te van a dar visibilidad y nuevas ideas de negocio.
La calidad de tus relaciones definirá tu éxito. Utiliza las redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn) como aliadas para promocionar y comercializar tu negocio, así como a tu marca personal.
Implementa un productivo marketing de contenidos que le aporte valor a tu audiencia. Sé constante a la hora de publicar en tus redes sociales. Mantente presente. Crea un calendario editorial. Esto le dará más solidez a tu marca.
El personal branding se va construyendo poco a poco y requiere de estrategia; es una inversión a largo plazo. No basta con ser muy bueno en lo hagas, es esencial que sepas llegar a tu target.
En una época con un avance tecnológico tan acelerado como el actual, va a sobresalir quien se sepa manejar de forma inteligente y quien logre hacerse visible. Sé tú mismo, sé sincero, conócete. Ten muy claros aquellos objetivos que deseas alcanzar en los diferentes ámbitos de tu vida.
El mercado está saturado en muchas áreas, y hoy más que nunca hay que saber destacarse frente a la competencia y estar especializado.
Invierte en tu educación. Es de vital importancia estar actualizado ya que hoy día, la información cambia todo el tiempo.
Tu pasión marcará tu camino y te hará seguir adelante; de ahí la relevancia de dedicarte a aquello que verdaderamente disfrutas.
Recuerda que “Si le gustas a la gente, te escucharán, pero si confían en ti, harán negocios contigo” Zig Ziglar*
*Hilary Hinton. Escritor y orador motivacional estadounidense.
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