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La fiebre del vaping

El uso de vapeadores se ha popularizado entre la población adolescente mexicana. ¿Realmente son menos nocivos que fumar un cigarro directamente?

2 de septiembre, 2022

Jareth Lassard

El tabaco ha sido un problema de salud pública en México desde hace varios años, siendo el cáncer de pulmón (que gran parte de la etiología es debida al consumo de dicha planta) el segundo tipo de cáncer con mayor mortalidad en hombres mayores de 60 años, el tercero en hombres de 30 a 59 años, y el cuarto en mujeres mayores de 60 años, según datos del INEGI¹. Además, según el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), es la primera causa prevenible de enfermedad y muerte a nivel mundial².

A manera de enfrentar dichos datos, la industria tabacalera empezó el desarrollo de los SEAN “Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina” (o vapes, Juuls, cigarros electrónicos, e-cigarretes), siendo dispositivos que, por medio de resistencias o cartuchos, calientan un líquido o tabaco y la administran al usuario en forma de humo, y de esta manera se llega a fumar “algo menos dañino”, al reemplazar al cigarrillo o cigarro, y esperando que se cese el consumo de dichos productos en un mediano o largo plazo.

Pero ¿realmente disminuyen el consumo de productos con nicotina a un mediano o largo plazo? El estudio realizado por Hajek y colaboradores³ en 2019, en más de 800 fumadores, dice que no. En este estudio se dividieron a los participantes en dos grupos, unos usaron una terapia de reemplazo de nicotina, y los otros cigarros electrónicos, a manera de comparar cuál es más efectivo para cesar el consumo de tabaco y nicotina en fumadores. En un año el 18% de los que usaron vapes dejaron de fumar y el 9.9% de los que usaron la terapia de reemplazo dejaron de hacerlo; pero al segundo año, el 80% de los usuarios de vape lo seguía usando, mientras el 9% de los que estuvieron en terapia de reemplazo seguían usando dichos productos. Se concluyó, que a pesar de que los SEAN son efectivos para dejar de fumar, se convierten en una nueva adicción en los consumidores.

Un problema adicional es el uso de estos dispositivos en individuos sin antecedentes de consumo de tabaco. En un estudio de Barrientos y Thrasher⁴⁵ se encuestaron a 10 000 estudiantes de secundarias públicas en México, se encontraron con que el 12% usaban SEAN, cifra mayor que el 11% de fumadores.

Se presupone que el vaping es una actividad sin consecuencias nocivas para la salud, y al igual que otras actividades como el fumar en hookahs o en otros dispositivos, pero esto está alejado de la realidad. Estudios in vitro como los de Behar y colaboradores⁶, han demostrado que 57% de los líquidos para vapear presentan sustancias citotóxicas (que dañan las células) de las células epiteliales pulmonares, células madre de embriones y fibroblastos pulmonares, dañando el ADN, reduciendo la reproducción celular y aumentando el riesgo carcinogénico, además se ha demostrado que el humo, al presentarse en altas temperaturas diferentes a las manejadas intrapulmonarmente, causan inflamación y mayor respuesta inmune, disminuyendo barreras de protección pulmonar y nasal, posteriormente evolucionando a patologías como bronquiolitis obliterans y ‘pulmón de palomitas’ (o popcorn lung)⁷.

En el mismo entender, se ha estudiado que los líquidos usados para vapear contienen sustancias carcinogénicas como formaldehido, glicerina, propilenglicol y etanol, además de concentraciones altas de plata, hierro, níquel, aluminio, silicio, estaño y cromo.

Otras patologías que se presentan tras vapear se incluyen la progresión de enfermedades como el EPOC, asma, tos crónica, aumento de la frecuencia cardiaca, presión arterial, estenosis arterial, disfunción en la interacción cerebral, discapacidad de aprendizaje, ansiedad, depresión, insomnio, daño en sistema inmunológico, digestivo, reproductor y tegumentario2.

Por lo que, con la desinformación de los “beneficios” del vaping y el alto poder de marketing de dichos productos, más de 160 000 adolescentes son consumidores de vapes en México, según datos del INER⁸, y empezará una cuenta atrás hasta el inicio de patologías en los mencionados.

A manera de mitigar dichos datos, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó en junio de 2022, por una previa alerta máxima contra el consumo de los SEAN emitida por al Cofepris, un decreto prohibiendo la circulación y comercialización de dichos productos, que anteriormente no estaban regulados por ninguna entidad. Y, si antes se desconocía el origen de dichos productos y sus contenidos, ahora adicionalmente solo serán conseguidos en mercados “negros”, donde peligrará aún más el consumidor final.

Finalmente, no queda más que recordar que los SEAN no son de ninguna manera productos de bajo riesgo, sino que son peligrosos para el desarrollo de patologías diversas en el organismo, además que se encuentran comercializándose sin autorización vigilancia o legalidad en países como el nuestro. Y si son productos menos nocivos que el tabaco, ¿realmente es preferible a no consumir ningún producto derivado del tabaco?

Referencias:

¹ INEGI. Estadísticas a Propósito Del Día Mundial Contra El Cáncer (4 de febrero). INEGI 2021;1-11.

² INSP. Evidencia actualizada sobre vapeo: un reporte del Repositorio SEAN. INSP. 2021;2.

³ Hajek P, Phillips-Waller A, Przulj D, et al. A Randomized Trial of E-Cigarettes versus Nicotine-Replacement Therapy. N Engl J Med. 2019;380(7):629-637.

⁴ Barrientos-Gutierrez I, Lozano P, Arillo-Santillan E, Morello P, Mejia R, Thrasher JF. “Technophilia”: A new risk factor for electronic cigarette use among early adolescents? Addict Behav. 2019;91:193–200.

⁵ Thrasher JF, Abad-Vivero EN, Barrientos-Gutíerrez I, Pérez-Hernández R, Reynales-Shigematsu LM, Mejía R, et al. Prevalence and Correlates of E-Cigarette Perceptions and Trial among Early Adolescents in Mexico. J Adolesc Heal. 2016;58(3).

⁶ Behar RZ, Wang Y, Talbot P. Comparing the cytotoxicity of electronic cigarette fluids, aerosols and solvents. Tob Control 2017; 27(3):325–333.

⁷ Martin EM, Clapp PW, Rebuli ME, et al. E-cigarette use results in suppression of immune and inflammatory-response genes in nasal epithelial cells similar to cigarette smoke. Am J Physiol Lung Cell Mol Physiol 2016; 311(1):L135–L144.

⁸ Secretaría de Salud. 270. Alerta el INER sobre los daños a la salud del cigarrillo electrónico. INER 2019. Disponible en: https://www.gob.mx/salud/prensa/270-alerta-el-iner-sobre-los-danos-a-la-salud-del-cigarrillo-electronico

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