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Ni Paulina, ni Otis ni AMLO

Gracias a Dios, Acapulco, además de sus bellezas naturales, tiene fuerzas de sobra para sobreponerse a Paulina, a Otis y a AMLO.

27 de octubre, 2023

Julio Chavezmontes Messner

Nadie habría podido evitar que el huracán Otis golpeara a Acapulco con la fuerza devastadora que lo impactó.PERO…SI LÓPEZ OBRADOR HUBIERA ALERTADO A LOS ACAPULQUEÑOS en especial y a los guerrerenses en general sobre la inminente llegada del ciclón, se habrían podido evitar las muertes y los lesionados cuyo recuento no ha ni siquiera comenzado.A López Obrador, lo único que le importa es SU AGENDA.Al narciso tabasqueño no le importan los damnificados acapulqueños del huracán, ni de la violencia que los azota, ni de las extorsiones y cobro de derecho de piso que agobia a sus negocios medianos y pequeños…Es más devastador un individuo concentrado en la adoración de sí mismo, que no se tomó la molestia de alertar a los acapulqueños ni a los guerrerenses en general o a los oaxaqueños, sobre la inminente llegada del huracán que según los pronósticos tendría una fuerza categoría 5 con ráfagas de viento superiores a los doscientos kilómetros por hora.Al fin y al cabo todo se arreglaría montando un espectáculo estilo Indiana Jones en que se le viera desafiando a los elementos a bordo de un jeep del ejército, y luego caminando incansable para tomarse retratos en que se le viera “presidencial”, para que inmediatamente después, se regresara ahora si en uno de sus helicópteros Black Hawk o Puma a reposar en el palacio que cree de su propiedad.La omisión de alertar a la población de Acapulco y zonas aledañas sobre la inminente llegada del huracán Otis, hace a AMLO responsable de HOMICIDIO POR OMISIÓN, porque HABIENDO PODIDO IMPEDIR LA PÉRDIDA DE VIDAS HUMANAS, haciendo saber del peligro inminente que corrían, Y NO LO HIZO.AMLO se ha jactado innumerables veces diciendo que el presidente de México es la persona mejor informada del país; que él, como presidente, lo sabe todo con anticipación.AMLO pudo haber alertado de la llegada del huracán más de 20 horas antes de que tocara tierra, y prefirió alimentar su rencilla contra el Poder Judicial, y maniobrar para dividir a la oposición con miras a la prolongación de su poder a lomos de Claudia Sheinbaum.A Acapulco le ha tocado hoy, pagar el precio de aceptar la imposición de “LA TORITA” como dizque gobernadora, para que Félix mande y disponga ni tan tras bambalinas.Si a eso le agregamos a Abelina López, la nominal alcaldesa de Acapulco, se completa LA TORMENTA PERFECTA.El huracán Otis solamente ha venido a sumarse a la larga lista de cataclismos que los acapulqueños sufren todos los días a través de la extorsión, el cobro de derecho de piso, la corrupción rampante, la ineficiencia y la indiferencia de un gobierno municipal compuesto de puro JUANITO.Improvisados, parientes y compadres ineptos como aquel delegado que AMLO impuso en Iztapalapa, que responde al nombre de Rafael Acosta Angeles, alias JUANITO.Acapulco ha sufrido numerosos terremotos, huracanes, tifones, ciclones, incendios, pandemias, epidemias y toda clase de calamidades desde tiempos inmemoriales, Y SIEMPRE HA REGRESADO MÁS FUERTE, MÁS VIBRANTE Y MÁS HERMOSO.El único y verdadero Acapulco, vive en la sonrisa de Vanessa, una joven madre acapulqueña que encarna toda la fuerza y la dulzura de la mujer guerrerense; vive en la inocencia espontanea de los niños que sacan cangrejos en la playa para los turistas; vive en la valentía temeraria de los clavadistas de La Quebrada; vive en la hospitalidad de sus lancheros, en la alegría de sus músicos y en sabor de su gastronomía. No me cabe duda de que, sin el estorbo de las autoridades morenistas, los acapulqueños estarán listos muy pronto para brindar su hospitalidad a los muchísimos de visitantes que le son y le seguirán siendo fieles.Cuando el huracán Paulina en 1997 sembró destrucción y muerte sin precedente, mi hermana menor, Lourdes vivía allá. Ella experimentó en carne propia el miedo y el horror que nadie olvida, pero que no prevaleció, porque tan luego como la tormenta se disipó, los acapulqueños comenzaron a reconstruir su ciudad.Esta vez no va a ser diferente.Mientras López Obrador se tomaba retratos a bordo de un jeep del ejército para aparentar liderazgo y control de la situación, los acapulqueños ya están limpiando sus calles, retirando escombros y sepultando a sus seres queridos, disponiéndose a levantarse y continuar trabajando, sin necesidad de planes DN3E ni del FONDEN, el fideicomiso para atención de desastres, cuyos miles de millones de pesos se robó López Obrador para comprar votos en las próximas elecciones.Gracias a Dios, Acapulco, además de sus bellezas naturales, tiene fuerzas de sobra para sobreponerse a Paulina, a Otis y a AMLO. ___________________________Para V.R.M con admiración y gratitud.Acapulqueña excepcional y madre ejemplar.La fotografia que ilustra estas líneas, es de la autoría del fotógrafo J.J Pintos, y pertenece al acervo de México en Fotos.