Con respecto a lo que acontece con los A’s hay mucho pero mucho que comentar.
El equipo fundado en 1901, ganador de nueve Series Mundiales, sí, nueve Series Mundiales, quince banderines de la Liga Americana y diecisiete títulos divisionales (lo que los coloca sólo detrás de los New York Yankees) anunció el año pasado su mudanza a la ciudad del pecado, Las Vegas, en el estado de Nevada tras cincuenta y siete temporadas con base en Oakland, California. Pero la nueva casa de los A’s no estará disponible sino hasta bien entrado el 2028.
Mientras queda listo su nuevo estadio, el equipo se mudará temporalmente al Sutter Health Park en Sacramento, California, sede de los River Cats, equipo de AAA (ligas menores) durante el período 2025-2027. Dicho recinto tiene una capacidad para 10,624 espectadores (sentados) y con algunas adecuaciones puede albergar hasta 14,000.
Los fanáticos de los River Cats, por lo que implica para su propio calendario de juegos y estado del campo y otras consideraciones semejantes, no tomaron la noticia con demasiado entusiasmo. Justo el domingo pasado circuló en redes (en X, antes Twitter para ser más específicos) una mayor asistencia de la fanaticada del equipo de AAA, comparado con la asistencia de los A’s, en sus respectivos encuentros y recintos, imagen que se volvió viral con el transcurso de las horas.
Si el intento por mover al equipo obedece estrictamente a una estrategia para relanzar una marca que hace mucho perdió su brillo, podría encontrársele cierta dosis de lógica. Nuevos aires, nuevos fanáticos. Un nuevo comienzo para la histórica escuadra verde y oro. Sin embargo, cabe mencionar que los equipos acostumbrados a moverse de un lado a otro difícilmente logran echar raíces y muy pocos fanáticos consiguen identificarse y sentir sus colores como propios.
Peor aún, los problemas que aquejan al conjunto de Oakland son más numerosos y profundos que lo que un simple cambio de sede puede solventar y éstos comienzan con su administración.
Al Opening Day del año 2005 acudieron casi 45,000 aficionados de los Athletics. Al del presente año, poco más de 13,000 y muchos de ellos, decidieron quedarse en los alrededores del Coliseum como forma de protestar contra el dueño del equipo, John Joseph Fisher. La mayor protesta por el cambio de sede se dio el 13 de junio del 2023, cuando más de 27,000 fanáticos portaron playeras con la leyenda de ¡Vende el equipo! Y ondearon pancartas con mensajes similares. Fisher, heredero de la marca GAP, se volvió el accionista mayoritario de los A’s justo en el 2005 (en una adquisición compartida con Lewis Wolff) y en 2016 se volvió su dueño por completo.
Su gestión ha sido duramente criticada dado que la inversión en el equipo ha sido virtualmente nula del 2005 a la fecha.
Hoy en día, el salario del roster activo de los Athletics apenas supera los $43 millones y, a modo de ejemplo, sólo Jacob deGrom de los Texas Rangers, quien se recupera de una Tommy John, se embolsará $40 millones durante la presente campaña.
No es que una inversión millonaria garantice en forma alguna un éxito rotundo en el deporte profesional y existen numerosas pruebas de ello. Pero en un ambiente tan competitivo como lo son las grandes ligas, cualquier inversión (bien planeada) puede generar un impacto notable y los A’s con Fisher al timón, lucen más como un equipo juvenil intentando competir con atletas profesionales que como una auténtica escuadra de la MLB.
Actualmente, la nómina de los A’s corresponde a la quinta parte de la de los Mets, la cuarta de los Astros, una tercera de la de los Red Sox y la mitad de la de Kansas City. Tanto Pittsburgh como Miami, los más cercanos en la tabla comparativa referente a sueldos erogados y por erogar, superan a los A’s por varias decenas de millones en este 2024.
Lo anterior salta a la vista; esta campaña los A´s han arrancado con 3 victorias por 7 derrotas*.
Para el juego del viernes 19 de marzo, se vendieron 3,837 entradas. La capacidad del Oakland Coliseum es de 63,000 espectadores.
Y nada de esto es nuevo.
Durante la temporada regular del 2023, los A’s cerraron con 112 derrotas y 50 victorias.
En el 2022, con 102 y 60.
¿Recuerdan la película “Moneyball” titulada en Latinoamérica como “El juego de la fortuna” con Brad Pitt como Billy Beane, gerente general de los A’s?
Bueno, pues eso justamente.
Al final del día, un equipo carente de motivación (e inversión) no puede esperar absolutamente nada de cara al futuro. Del mismo modo, perder en el terreno de juego, una vez tras otra, aleja fanáticos, espectadores, patrocinios, espacios publicitarios y mucho más. Cualquier equipo profesional es un negocio, en efecto, pero éste depende en gran medida de sus resultados en el ámbito deportivo. Fisher ha tratado de exprimir a los A’s más allá de su límite y los fanáticos se lo han reprochado con justa razón. Como pareciera poco probable que el equipo cambie de dueño en el futuro inmediato, veremos qué tan efectivo resulta el paliativo del cambio de sede, aunque no albergamos demasiadas esperanzas para lo que les espera a los Athletics en los años venideros, ni en Sacramento ni en Las Vegas.
Lo cual es una verdadera lástima para un equipo histórico de la MLB y una pena, sin duda, el modo en que han sido tratados sus aficionados, sobre todo durante esta última década.
Los A’s agonizan de a poco y no parece que alguien esté interesado en modificar su destino.
Ohtani, el jonronero y las apuestas ilegales
Hablando de cosas también relacionadas con el dinero pero del otro lado del espectro, en este caso de los equipos multimillonarios, el miércoles 3 de abril Shohei Ohtani conectó su primer home run enfundado en el jersey de los Dodgers durante el juego que el conjunto blanquiazul terminó por ganar sobre los Gigantes de San Francisco por 5 carreras a 4. Seis años antes exactamente, el 3 de abril del 2018, Ohtani conectó su primer cuadrangular en la MLB con el uniforme de los Angels. De a poco, los Dodgers empiezan a mostrar su poderío y con una marca de 8-4* caminan como líderes de la oeste de la nacional.
Del asunto que explotó casi por empezar la temporada regular (Ohtani, Ippei Mizuhara y las apuestas deportivas) nada se ha sabido ya, salvo que se encuentra “bajo investigación”. Siendo sinceros, parecía probable que esto sucediera así. A la mayoría de los interesados les urgía meter bajo la alfombra la curiosa relación de la superestrella de los Ángeles y su intérprete/confidente/amigo, que no termina de convencer ni a propios ni a extraños como tampoco resultó convincente la declaración del astro japonés a los medios: parca, artificial y culpando a un blanco fácil, a un chivo expiatorio. Al menos, esa impresión nos llevamos numerosos fanáticos del rey de los deportes.
Difícil resulta creer que nada supiera el astro japonés de los movimientos y transacciones de alguien con quien pasaba 24 horas al día los 7 días de la semana, según declaró en su momento el mismo Ohtani, cuyo nombre aparece en al menos dos transacciones que superan el millón de dólares acorde con la información que ha logrado trascender a cuentagotas.
Según las palabras de Ippei Mizuhara, sus deudas relacionadas con el juego llegaron a superar los 4-4.5 millones de dólares y éste, temiendo por su seguridad, pidió apoyo al astro de los Dodgers, quien le ayudó a solventarlas sin saber “supuestamente” el destino del dinero prestado.
Poco después la versión cambió y el intérprete había sido quien le robó a Ohtani, utilizando sus cuentas y contraseñas para gastar a diestra y siniestra en apuestas con corredores ilegales.
No cabe duda alguna de que Shohei Ohtani es un gran, gran jugador. En el campo de juego es un auténtico fenómeno: completo, disciplinado, carismático. Debido a ello, se ha transformado en el rostro de la MLB actualmente. Y también en la apuesta más fuerte de las grandes ligas por lo que es y representa a nivel global.
Y hay que decirlo, los $700 millones que pagaron los Dodgers por firmarlo (y lo que implican para la MLB) resulta un precio demasiado alto para perderlo por un escándalo, aunque un embrollo semejante le haya costado al poseedor del récord de por vida en cuanto a número de hits, número de sencillos, juegos jugados y turnos al bat, Pete Rose, una sanción de por vida.
Y también, su inclusión en el salón de la fama.
Rose admitió, en su momento, haber participado en apuestas deportivas (basquetbol, futbol americano, carreras de caballos y por supuesto, béisbol) cosa que Ohtani, acompañado de multitud de abogados, salió a negar a la primera oportunidad.
Las reglas de la MLB (la 21 en particular) dictan que “cualquier jugador, umpire, club, oficial o empleado que realice apuestas, cualquiera que sea la suma invertida en estas, en cualquier juego de beisbol que comprometa al apostador será declarado permanentemente inelegible”.
Justo esta semana Toyo Tires (marca japonesa de neumáticos) anunció su patrocinio, presencia en medios digitales y tradicionales, así como en espectaculares dentro del Dodger Stadium como parte de un acuerdo multianual platicado con anterioridad. ¿Cuánto aportará Toyo Tires al conjunto angelino? Mucho más de $4 millones, eso es seguro. Y dicha marca es sólo una de las varias que arropan a Sho Time.
Dudo sinceramente que se dé a conocer, con transparencia, cómo fue la relación de Shohei e Ippei a lo largo de los meses que duraron las apuestas y transacciones; ¿qué tanto sabía el astro de lo que hacía su intérprete y confidente? ¿Por qué la precipitación de emitir un comunicado que contradice la versión de Mizhuara, efectuada pocas horas antes? Al darse cuenta de la situación, ¿por qué Ohtani no contactó a las autoridades? ¿por qué no permitir preguntas durante el comunicado?
Si bien es cierto que sólo evidencia clara e irrefutable podría permitir conocer la verdad y hablar de ésta con certeza, entre lo que se ha dicho y cómo se ha manejado, el asunto resulta bastante opaco por decir lo menos.
Cuestionado sobre el escándalo Ohtani/Ippei, Rose, ahora con 82 años y quien ha apelado su sanción en numerosas ocasiones durante los últimos treinta años, mencionó, mitad en broma y mitad en serio:
“Me hubiera gustado tener un intérprete. Ahora estaría libre de problemas”.
Resultados
Por otro lado, los Marlins, con 9 derrotas y 1 victoria, tienen el peor arranque en la MLB desde que Atlanta y Minnesota empezaron con 0-9 en el 2016. Además, son el primer equipo en la historia en abrir con dicho récord de derrotas después de llegar a playoffs el año anterior.
Cleveland (7-2) logró aventajar a Los Tigers (6 victorias y 3 derrotas) para colocarse al frente de la este de la Americana, mientras que los multimillonarios Mets, como de costumbre, llevan una marca de 3-6.
Los Rockies también han sido vapuleados en este inicio de campaña con una marca de 2 ganados y 8 perdidos*.
Los bombarderos, que perdieron el invicto con los DBacks de Gallen, marchan 8-2 y contaron el viernes pasado, durante su presentación en el Yankee Stadium, con una brillante actuación de Marcus Stroman, mismo que completó 6 entradas y permitió 3 hits sin recibir carrrera; sin embargo, la ofensiva no estuvo a la altura y los del Bronx terminaron cayendo ante los Blue Jays por 3 carreras a 0.
Boston llegó a 7 victorias por 3 descalabros, Pittsburgh se colocó 8-2, los Braves 6-2 y los Astros continúan con el mal inicio al sumar 3 victorias por 7 derrotas.
F1
El sábado 6 de abril se celebró el GP de Japón y Red Bull, tras el desastroso fin de semana pasado, volvió a retomar el camino del triunfo e hizo el 1-2 con Verstappen y Checo, mientras que el “Smooth Operator” Carlos Sáinz (que aún no encuentra equipo de cara a la siguiente temporada) y Charles Leclerc terminaron en las posiciones 3 y 4 respectivamente.
Carrera entretenida, de mucho despliegue estratégico, que vio una bandera roja poco después de la arrancada con el toque entre Ricciardo y Albon.
Por cierto, para la prensa y medios que colocaban al piloto australiano en el asiento del mexicano, esta temporada se ha encargado de desmentir cualquier posible rumor: Daniel no ha tenido los resultados que se esperaban y luce más probable su salida del segundo equipo de Red Bull Racing que su llegada como coequipero de Super Max. Entre los mejores del resto se situaron Lando en la posición 5, el eterno Alonso sacando lo más posible del Aston Martin en el sexto puesto y Piastri que logró colarse al octavo lugar, obteniendo valiosos puntos para McLaren. Albricias para Yuki Tsunoda que consiguió meterse al top ten en casa.
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