Durante las campañas políticas a los candidatos les da por afirmar cosas que no siempre son ciertas, al igual que prometer y prometer. Pero cuando ganan nada cumplen. En el caso de Claudia Sheinbaum, quien será la candidata de Morena y sus partidos lacayos a la presidencia de México este 2024, aún no inicia la campaña oficial y se la ha pasado mintiendo y pretendiendo hacerle creer a la ciudadanía que con López todo ha estado muy bien. Pero, las mentiras, caen por su propio peso.
LA EDUCACIÓN PÚBLICA DEL PAÍS ES LA MEJOR
En ese tenor, Claudia Sheinbaum, durante una reunión con integrantes del magisterio, en San Lucas Tunco, Estado de México, el pasado 7 de enero del 2024, aseguró que, contrario a lo que se promovió en otras épocas, la educación pública es mejor, por encima de la privada. “Minimizaron al Magisterio Nacional, se acabó ese periodo del neoliberalismo en donde todo lo público parecía que lo querían desaparecer, valoraron la educación particular como si fuera mejor que la educación pública, es falso, la educación pública es la mejor de todas las educaciones en nuestro país gracias a los maestros y maestras de México”.
De igual manera aseguró, que la Cuarta Transformación defiende, como ningún otro modelo, a la educación pública, contrario a lo que sucedía en el periodo neoliberal. Quedando demostrado que los estudiantes, los profesores y profesoras de México son una prioridad para su movimiento, con programas como la beca para jóvenes que estudian en preparatoria y particularmente con la basificación de más de un millón de maestros y maestras.
Destacando que por ello López recuperó algo fundamental que es el reconocimiento a los maestros de nuestro país, ese reconocimiento que fue echar para atrás la reforma educativa y recuperar el valor del Magisterio Nacional en toda su magnitud’.
Y por ello, es vital trabajar en unidad, con las maestras y maestros, no sólo para atender las necesidades que aún quedan pendientes en el sector educativo, sino que también para garantizar la continuidad del movimiento de la 4T, que tiene como meta apoyar a la educación pública. El mejor legado que le podemos dejar a nuestros hijos y nuestras hijas, es decir: formamos parte del segundo piso de la Cuarta Transformación de la vida Pública de México.
LOS OTROS DATOS, LA CRUDA REALIDAD DE LA EDUCACIÓN
Pero al igual que siempre afirma su patrón López, “hay otros datos” respecto a la cruda realidad de la educación en México que en 5 años ha tenido un enorme retroceso.
En el Plan de estudio de la educación básica 2022 de la 4T, incluye en la Parte I. Marco curricular del plan de estudios, en el apartado 5. Elementos centrales de la política curricular de la educación básica.
5.1 Derecho humano a la educación:
“Implica también que niñas, niños y adolescentes puedan iniciar, continuar y concluir procesos formativos de la educación básica, en los que desarrollen aprendizajes significativos para su vida y que gocen de buen trato con una vida escolar libre de violencia. Asimismo, implica brindar una educación democrática, crítica y emancipadora que les impulse a aprender de otras y otros”
Pero lo que en esta administración denominan “transformación de la enseñanza”, en realidad no cuenta con ningún sustento viable, son ideas poco claras, confusas, que no han logrado concretarse debido a que carecen de un orden lógico, coherente y sin una metodología.
Apostando todo el proceso educativo a “proyectos”, y NO a contenidos académicos, por lo que las “asignaturas” como se conocían, se han debilitado curricular y didácticamente. Con su Plan de estudios sin fortaleza pedagógica y carencia de programas académicos, porque sus Programas Sintéticos quedaron reducidos a una lista de contenidos que deben cubrirse durante un ciclo escolar, y los llamados PDA (procesos de desarrollo de aprendizaje) intentan sustituir a los aprendizajes esperados. Un libro para el Docente llamado “Un libro sin recetas” para la maestra y el maestro, cuya estructura es más de querer adoctrinar, que dar un soporte real al trabajo docente.
Y qué decir de sus Libros de Texto Gratuitos, faltos de estructura, intentando trabajar bajo una metodología por proyectos erróneamente planteada, en donde aparentemente los estudiantes aplicarán lo aprendido, y la pregunta que surge es ¿qué están aprendiendo?
De igual manera, en esos mismos mal llamados libros de texto, tienen fallas gramaticales, contenidos erróneos, y lo peor, es que intentan subsanarlo emitiendo “fe de erratas”, olvidando que este material va dirigido a niños.
El tema de las matemáticas “olvidadas”, por más que argumenten que se encuentran inmersas en los contenidos y los PDA, la cruda realidad, es que no se observa por ningún lado el desarrollo del pensamiento abstracto en los estudiantes, considerado como la habilidad para pensar sobre cosas que no son tangibles, visibles o hasta inexistentes.
Por otra parte, se ha delegado a los centros educativos (escuelas oficiales y particulares), la “construcción y diseño de los programas analíticos”, con el supuesto de ejercer una “autonomía curricular”, sustentándolos en una problemática particular de la comunidad escolar de cada centro educativo.
Obviamente, esta responsabilidad se lleva a cabo sin la prometida capacitación al personal directivo y docente, ya que dicha capacitación y actualización se reduce a trabajar una vez al mes, en los Consejos Técnicos Escolares, y la responsabilidad recae en cada grupo de directivos y docentes, sin una guía o regulación que valide el trabajo que se realiza.
Mientras en los sistemas educativos a nivel mundial, se orientan los esfuerzos para desarrollar las habilidades y competencias para un desarrollo individual y profesional, con la visión de que las personas cuenten con elementos para contribuir a mejorar el entorno social y económico de sus países, en México con la 4-T, se escucha el “romántico canto de las sirenas” de que “escuchando y trabajando en comunidad nos llevará a ser mejores personas y más capaces”, cuando lo único que está ocurriendo es colocar a nuestros estudiantes en una enorme desventaja frente a un mundo cada vez más exigente y competitivo.
Y como prueba fiel se tienen los recientes resultados de la prueba PISA, en donde claramente se demostró que los estudiantes mexicanos tienen muy escasas habilidades desarrolladas en lectura, matemáticas y ciencia.
Siendo objetivos, este pseudo modelo educativo, es una muestra clara de mentalidades cuadradas, de personas con pensamiento concreto que no tienen preparación ni mucho menos visión ,como lo demuestra el hecho de que la SEP ha contado con tres secretarios, inútiles todos, sin capacidad, experiencia , para construir programas educativos que atiendan las necesidades reales de las nuevas generaciones, ni mucho menos, diseñar políticas públicas que resuelvan las problemáticas educativas de un profundo rezago académico, así como la importante pérdida de aprendizajes, que si bien se vieron agudizados por la emergencia sanitaria por el Covid-19 y la pandemia, ya no cabe justificarse por dichos eventos.
Por ello y mucho más, Sheinbaum miente al afirmar que la educación pública es la mejor del país, cuando no se compara con la educación privada, y está más que demostrado que en 5 años de nefasta administración de López, el nivel bajó y tuvo un enorme retraso. Sheinbaum representa la continuidad de López si es que gana las elecciones presidenciales, esa continuidad que seguirá conduciendo a nuestros niños y jóvenes, a un atraso mayor.
Basta darle una revisada a su Proyecto de Nación 2024-2030, Segunda Etapa de la Cuarta Transformación, en su punto XII Derecho a la Educación, en el que su supuesto planteamiento sobre la educación en México, solamente es una suma más al rosario de buenas intenciones que han sido los últimos años en educación: fantasía, promesas, demagogia, salpicado todo de una gran dosis de irresponsabilidad e ignorancia, con el sello característico de la Cuarta Transformación, arruinar, desbaratar, desmoronar lo existente, sin contar con un nuevo proyecto realmente viable y fructífero.
Por ello es muy importante informarse, analizar lo que afirma y afirma Sheinbaum respecto a cómo está el país y lo que ella está prometiendo desde ahora sin ser candidata oficial, siendo en su mayoría mentiras. Y creyendo que con programas como la beca para jóvenes que estudian en preparatoria y particularmente con la basificación de más de un millón de maestros y maestras, nuestra educación será mejor. Pobre ilusa.
Como ciudadanos tenemos el poder para decidir si queremos esa negativa continuidad, o imaginando el México que nos merecemos, ejercer nuestro derecho a votar por quien sí lleve al país por el sendero de una mejor educación. Hagámoslo por nuestros niños y jóvenes para que tengan un mejor futuro.
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