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¿Qué debe hacer México con las caravanas migrantes?

Las imágenes de la Guardia Nacional impidiendo el paso de la caravana migrante en la frontera con Guatemala, han acaparado tanto los encabezados de la...

24 de enero, 2020

Leonardo González Luna

Las imágenes de la Guardia Nacional impidiendo el paso de la caravana migrante en la frontera con Guatemala, han acaparado tanto los encabezados de la prensa como a la opinión pública, ante lo que no es difícil percibir la generalizada indignación ante la respuesta del gobierno mexicano. Pero si México dejará pasar la caravana migrante como lo hizo hace un año, casi de inmediato veríamos una reacción del presidente de Estados Unidos, quien no dudaría ni un segundo en volver a amenazar a nuestro país con la imposición de aranceles, o utilizar el tema en su campaña de reelección y amenizarnos con algo aún peor.

Ante esta situación el gobierno mexicano se encuentra en una encrucijada en la cual no hay un escenario del que salga bien librado, pues si deja pasar a los migrantes se arriesga a ser sancionado por Estados Unidos y si detiene el paso de la caravana se expone a quedar como represor con escenas como las que hemos visto en la última semana.

¿Entonces cuál es la mejor opción para México como país?

El pasado mes de junio se discutió más que suficiente sobre los efectos en la economía mexicana, de una posible imposición de aranceles a nuestras exportaciones hacia Estados Unidos, simplemente nuestra economía está tan integrada con Norteamérica después de 25 años de libre comercio, que en vez de enumerar los sectores de la economía que se verían afectados, sería más fácil enumerar aquellos que no se afectarían y para terminar rápido, el número de empleos que estarían en riesgo son demasiados como para siquiera considerar el correr el riesgo de caer en un escenario como este.

Como lo plantee en la pregunta anterior, el gobierno debe tomar la mejor opción para México y nuestros intereses, incluso ya lo hicieron, desde el momento en que arribó la caravana migrante al puente fronterizo en el río Suchiate, las autoridades mexicanas les ofrecieron a los migrantes un acceso ordenado y regulado, en los términos de las capacidades del Instituto Nacional de Migración y de las leyes internas de nuestro país

Pero esta propuesta no fue aceptada por los migrantes que componen la caravana, ya que ellos quieren un paso rápido y en sus propios términos por la frontera mexicana. Ante estos hechos no debemos olvidar que, aunque no lo parezca México es un país de leyes, las cuales estamos obligados a cumplir todos los que nos encontremos dentro de este territorio. Estas leyes amparan a los migrantes de que se les respeten sus derechos humanos, pero no les da derecho a exigir ni imponer condiciones en la manera en que se les debe dar acceso a nuestro país, mucho menos de forma violenta como ya lo hemos visto.

Es derecho de los migrantes el solicitar asilo o acceso a nuestro país, pero también es su obligación el respetar los términos ante los cuales las autoridades mexicanas regulen dicho acceso, como a su vez es obligación de las autoridades mexicanas el respetar en todo momento los derechos humanos de los migrantes,

No cabe duda que la opción que menos perjudica al país, será el contener la caravana migrante y las demás caravanas que llegan a nuestra frontera en el futuro, pero dicha contención debe ser de forma ordenada. Es momento de que el gobierno mexicano implemente una estrategia de migración que vaya más allá de desplegar agentes de la guardia nacional, se necesita infraestructura en la frontera sur que permita procesar el acceso de personas y mercancías a nuestro país, al mismo tiempo que garantice la seguridad tanto de los extranjeros como de las autoridades mexicanas que regulan el acceso, precisamente para impedir que escenas tan bochornosas como las que vimos esta semana se repitan.

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