AMLO: la necesidad como maestra ¿o la maestra como necesidad?

Realmente nadie sabe si Alfredo del Mazo está arriba en las encuestas o es Delfina Gómez quien encabeza las preferencias.

17 de mayo, 2017

Jaime Guerrero Vázquez

Realmente nadie sabe si Alfredo del Mazo está arriba en las encuestas o es Delfina Gómez quien encabeza las preferencias. Tampoco es claro si la candidata fue fatal en los debates o si del Mazo no despierta ninguna emoción ni simpatía. Todo es especulación sobre la base de filias y fobias. Las encuestas, que no se han distinguido precisamente por ser medianamente precisas, dan la ventaja a uno u otra.

Ante esta incertidumbre, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha comenzado a dudar no sólo del triunfo de su candidata en el Estado de México sino del suyo propio en el 2018. Siempre estuvo claro que con sus propias fuerzas no le alcanzaba, pero ahora parece que también para él está siendo nítido. Por eso el llamado al PRD, PT y MC para que claudiquen y se sumen a las candidaturas de MORENA. Esta especie de alianza subyugante le permitiría arroparse para lograr el gran triunfo. Pero el llamado va más allá de los partidos que se autodenominan de izquierda, el líder tabasqueño está dispuesto a recoger toda la pedacería política que se pueda, provenga de donde provenga.

Es en este contexto que debe entenderse la verosimilitud de la supuesta alianza de facto entre la presidiaria Elba Esther Gordillo y AMLO. ¿Qué dirán los artistas e intelectuales progresistas que apoyan a López de estar sentados en el mismo salón que la maestra?, ¿qué dirán los que detestan al PRI de estar en la misma clase que una de las principales inventoras y beneficiarias del priismo?, ¿qué dirán los maestros de la CNTE de estar en el mismo grado que una de sus principales adversarias? Probablemente nada, la política hace extraños compañeros de cama y siempre tendrán la opción de decir que es peor cualquier otra opción. Sobre el particular, la publicación digital SDP preguntó a comunicadores y analistas si esta alianza beneficiaba o perjudicaba a Delfina y a Andrés Manuel. La mayoría contestó que lo perjudicaba.

Pecan de inocentes quienes piensen que tal alianza perjudica las aspiraciones de AMLO. Probablemente el círculo rojo, o al menos buena parte de él, lo criticará, pero para sorpresa de ese círculo, sus opiniones no reflejan las de los fieles del tabasqueño y ni siquiera de los potenciales votantes antipri, a los que no importará esto con tal de sacar al PRI del Estado de México y de la Presidencia de la República. En realidad, la ética de los votantes es por lo general igual a la de los políticos a los que tanto se detesta.

Por otro lado, con todo y la opinión del círculo rojo la supuesta o real alianza entre AMLO y la maestra Gordillo fue un éxito mediático y político del líder de MORENA. De entrada, sacó del panorama los escándalos de corrupción de Delfina. Ya pocos se preguntan sobre eso, ahora el tema es la capacidad de López de sumar a personajes y grupos provengan de donde provengan. El “haiga sido como haiga sido” calderonista apropiado por AMLO y su grupo. Con esto, cabe preguntarse si la veta que significaba sacar los trapitos sucios de la candidata Gómez ya se agotó, ahora PAN, PRD y PRI deberán preguntarse cómo darle nuevamente la vuelta a esta nota de la alianza Gordillo-López.

¿Podrán hacerlo a tiempo?

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