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Taibo II y su Nuevo Libro… ¿Y Andrés Manuel?

"La política es quizá la única profesión para la que no se considera necesaria ninguna preparación". Robert Louis Stevenson Al leer “ Patria ", el...

26 de julio, 2017

Enrique Rodríguez-Cano Ruiz

“La política es quizá la única profesión para la que no se considera necesaria ninguna preparación”. Robert Louis Stevenson

Al leer “Patria“, el nuevo libro de Paco Ignacio Taibo II quedo admirado y admirándolo. La investigación, su prosa y descripción que hace Paco Ignacio es espléndida —como en otros de sus libros que he leído: “Pancho Villa”, el de “Los Tigres de la Malasia”, la biografía del “Che” y tantos otros.

Así, el contenido de “Patria” es historia pura y nos cuenta el turbulento período que vivió nuestro país de 1854 a 1867. La crónica que encontré relata:

“En tan sólo 15 años México se vio sacudido por la Revolución de Ayutla, que acabaría con la dictadura de Santa Anna; la batalla por la Constitución de 1857, el golpe militar y la Guerra de Reforma; la intervención anglo-franco-española, la agresión militar francesa y la guerra de guerrillas contra el imperio de Maximiliano”.

Y nos cuenta el autor que después de una investigación minuciosa y que le tomó muchos años, encontró cómo fueron hombres de la talla de Melchor Ocampo, Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez, Vicente Riva Palacio y muchos otros, a lo largo de sus vidas. Quienes eran y cómo vivían. Sostiene que “No hubo uno solo de los 50 personajes más importantes de ese período que se les acusara de corrupción”.

Así, el historiador nos invita a conocer ese lapso de la historia de México, con diálogos que recrea, que bien hubieran podido darse entre los personajes que aparecen. Divertido e ilustrativo: nos regala un nuevo libro de texto de historia de México.

Es interesante como Taibo describe a don Benito: “Juárez bien, contradictorio, con una veta autoritaria fuerte. Sin embargo, gentil, humilde hasta decir basta, diferente del Juárez rígido que nos retratan, tremendo bailarín, de una honestidad a prueba de fuego, sobre todo con una clara autoconciencia de que hay, por encima de todo, una especie de sagrado deber de defender la libertad, la Constitución, contra lo que sea”. En fin, vale la pena leerlos.

En alguna entrevista relata que el mismo Benito Juárez viajaba sin escolta, lo cual no me sorprende pues mi tío Enrique en tiempos de Adolfo Ruiz Cortines (1954) —y que era el segundo de abordo—solo necesitaba un chofer,es decir, no hace mucho este país era muy distinto. Ahora, como dice Paco Ignacio, los guaruras y carga portafolios son incontables que sirven a cualquier funcionario.

Y así, para entender mejor “Patria” podemos leer la excelente entrevista de “Jornada” hecha por Mónica Mateos en su columna, al inquieto activista que asegura que así devuelve la “historia robada a México”.

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Así, entrando al corazón de esta nota, la pregunta que surge de inmediato es quién nos pudiera gobernar de forma similar a los 15 años contados por Taibo II. ¿Con Andrés Manuel López Obrador y sus amigos? —que pésele a quien le pese— sigue al frente en las encuestas (ahora en “Reforma”).

Vuelvo a preguntarme: ¿Tiene Andrés Manuel—entre sus futuros colaboradores—hombres de la talla cómo los que describe el nacido en Gijón, España, pero es más mexicano que el mismo mole?

El equipo inicial de AMLO —quién también se auto describe como “de una honestidad a prueba de fuego”— será coordinado por el multimillonario Alfonso Romo Garza —amante de los caballos de salto—; actuarán como responsables de Política y Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, que ahora anuncia que quiere ser Jefe del Gobierno de la ciudad capital; de Economía y Desarrollo, Adrián Rodríguez, que sepa quién sea; de Educación y Cultura, Laura Esquivel —imagino es la escritora autora de “Como Agua para Chocolate”—; y de Desarrollo Social, Esteban Moctezuma Barragán, al cual le pedimos interviniera en el rescate de la Industria Hípica cuando fue secretario de Gobernación y por supuesto, ni siquiera nos respondió.

Y también están en el frente de batalla, dispuestos a dar su vida por la Patria —poco a poco se le han ido pegando a MORENA “prominentes” miembros de la izquierda mexicana— senadores y diputados como Miguel Barbosa, Ana Gabriela Guevara, Layda Sansores, Martha Palafox, David Monreal y otros muchos. Yeidckol Polevnsky Gurwitz, Ricardo Monreal, Martí Batres y ahora, dicen, hasta el creador de los “Amigos de Fox”, Lino Korrodi. ¡Todos buscando una posición! ¿O será que realmente quieren que la población —sus gobernados— vivan mejor?

Y también por allí se coló Manuel Bartlett, al que se cayó el sistema en la polémica elección de Carlos Salinas y quien —me contaron— se podía empujar una botella de coñac él solo, en una tarde, en la casa de mi pariente lejano, o pudo darle el encargo a su cuñado (de ese entonces) para construir un hipódromo en Monterrey, que por cierto nunca se construyó. ¿Será este hombre de la misma estatura de Melchor Ocampo, de quién Taibo al conocer su forma en que gobernó y vivió, cayó cautivado y convencido que fue un patriota?

Así pues, ¿podrán estos colaboradores de Andrés Manuel aspirar a que algún día, alguna calle, colonia o pueblo lleven con orgullo su nombre como reconocimiento por un trabajo bien ejecutado, como todos los “rojos” que acompañaron a Juárez en el segundo tercio del siglo XIX?

El libro pues, es también un llamado de lo que pudiéramos aspirar a tener en el sexenio que viene. Hombres y ahora también mujeres comprometidos para forjar una nación. Tal vez el espíritu de algunos de los “rojos” quieran penetrar en algunos de los próximos gobernantes de este país. ¡Nos urge!

Insisto lo que he dicho en mis artículos anteriores, sólo con un grupo de mexicanos surgido de la sociedad civil este país se puede componer.

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