Mi mente es un caleidoscopio de palabras y se fractura embriagada por la pluma de Vicente Huidobro. Si he de escoger uno de sus poemas será aquél que me ha hablado de la esencia del poema y de la soberanía del poeta quien con su fino estilo navega en una balsa diminuta por inmensos mares que se vuelven ínfimos cuando con su palabra convierte la balsa en gigantesca almadía.
Es ese poema el que me invitó a batir temores, a vibrar, a admirar y con osadía a romper esquemas, porque el alma nos habla y el poeta da vida a la palabra. Huidobro nos provoca a explorar y a explotar el sentimiento contenido a través del verso. ¡Qué vibre el ser!, que sea nuestra voz la más digna para hacer vivir la poesía a pesar del tiempo, a pesar de otros géneros y de todo lo que esté por venir.
El poeta es el que solitario surca un universo de posibilidades para llegar a abastecerse de placer, de belleza y de dolor. En su “Arte Poética”, Huidobro nos sumerge en su mundo, en la teoría estética huidobriana que incita a la creación de la poesía como esa producción única cuyo fin es llegar “al alma del oyente”. Detrás de cada verso vuela la imaginación del poeta. No hay descanso en la cabeza de quien crea con la belleza de la palabra y transporta a otros miles de “mundos nuevos”.
En la poesía, las palabras adecuadas en el lugar adecuado fecundan la esencia del poema ante los ojos del lector adecuado, así, el adjetivo tiene un encargo, el de dar vida y sustancia a la creación; y el encargo del poeta es moldear realidades para expresarlas con absoluta pasión. Huidobro en su “Arte Poética” fluye con estrategias fónicas y entre figuras literarias, lo hace con la sensatez del maestro, del creador, de la nobleza de ese “pequeño dios”.
Vicente Huidobro
Arte Poética
Que el verso sea como una llave
que abra mil puertas.
Una hoja cae; algo pasa volando;
cuanto miren los ojos creado sea,
y el alma del oyente quede temblando.
Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra;
el adjetivo, cuando no da vida, mata.
Estamos en el ciclo de los nervios.
El músculo cuelga,
como recuerdo, en los museos;
mas no por eso tenemos menos fuerza:
el vigor verdadero
reside en la cabeza.
Por qué cantáis la rosa, ¡oh Poetas!
Hacedla florecer en el poema;
sólo para nosotros
viven todas las cosas bajo el Sol.
El Poeta es un pequeño Dios.
Me toca hablarle al poeta como una reconciliación con mi posibilidad creadora. Alguna vez me dijeron que Huidobro como “creador rebelde tuerce y zarandea la palabra para transformar su poesía en una manifestación pura”, he de darle la razón y así crear un mundo propio y sentirme, en él, un dios.
Creación para el poeta santiaguino
Lo dice tu alma que sin mirar mira,
tus manos que rasgan lo bello de la vida
creas y es tu poesía la que abre mil puertas
y con ella, poeta, dejas el alma temblando.
Lo dicen tus poemas, que sin hablar hablan,
tu palabra vive en el tiempo, liviana y sagrada
lo dicen tus labios tal como almuédanos en mundos nuevos.
Revelas que el juego de palabras enriquece al verso,
así como hablar de la rosa
sin necesidad de describirla en el universo.
Seguir tus pasos poeta santiaguino y
buscar la labor propia en la lozana cabeza.
La creación bella ha de rebosar con elocuencia
en ese prado que bañado de sol dejas ver con tu grandeza.
Poeta de la creación, he de intentar ser, entonces, un pequeño dios.
Te puede interesar:
El discurso de Claudia Sheinbaum en el Zócalo de la CDMX
Señor, el demonio va ganando
Sentimos el estremecimiento, el estallido repentino junto con la vista a negros y el tan famoso túnel lleno de...
noviembre 6, 2024La vida después de la muerte: a propósito del Día de Muertos
¿Qué pasa después de la muerte y por qué es importante meditar sobre ello?
noviembre 1, 2024CARTAS A TORA 368
Cocatú es un extraterrestre que llega a la Tierra y toma la forma de un gato para estudiar la...
noviembre 1, 2024LA REALIDAD SOCIAL EN TRES CUENTOS DE LEOPOLDO ALAS “CLARÍN”,
A lo largo de la historia de la literatura, los cuentos han servido como un espejo de la condición...
octubre 31, 2024