Entrevista a director Carlos Bolado. Parte dos

¿Qué películas has dirigido? Laura (1986). Acariciándome frente al espejo (1986). Sentido contrario (1988). Golkobi (1990). Ritos (1993). Viejos (1994). Bajo California: el límite del… ¿Qué películas has dirigido? Laura (1986). Acariciándome frente al espejo (1986). Sentido contrario (1988). Golkobi (1990)....

15 de enero, 2016

RHT

¿Qué películas has dirigido? Laura (1986). Acariciándome frente al espejo (1986). Sentido contrario (1988). Golkobi (1990). Ritos (1993). Viejos (1994). Bajo California: el límite del…

¿Qué películas has dirigido?

Laura (1986). Acariciándome frente al espejo (1986). Sentido contrario (1988). Golkobi (1990). Ritos (1993). Viejos (1994). Bajo California: el límite del tiempo (1998).

Promises (Promesas) (2001). Solo Dios sabe (2006). River of Renewal (2008). Colosio, el asesinato (2012). Tlatelolco , verano del 68. (2012). Olvidados (2014).

¿Qué aprendiste del “Movimiento del 68” que no sabías cuando hiciste la Película Tlatelolco, verano del 68?

Del “Movimiento del 68” aprendí dos cosas fundamentales:

Si no hubiera habido Olimpiadas no habría habido represión y eso causó ese choque de intereses, y con el involucramiento de la CIA se enturbiaron las cosas aun más.

Parte de mi responsabilidad cuando me ofrecieron hacer esta película, era saber todo sobre el tema. Yo tenía una idea vaga sobre el “Movimiento del 68”, había leído el libro de Poniatowska, había hecho el documental El grito en mi escuela, pero cuando llegue al set yo ya había leído todos los libros, que es algo que a mí se me hace muy importante, tú como director tienes que llegar sabiendo más que todos, entendiendo todo, que no tengas ninguna duda, tú antes de hacer la película tienes que saberlo todo.

Lo que yo ya hago es trabajar con historiadoras, para no tener que investigar yo todo solo.

Para Tlatelolco verano del 68 investigue año y medio, y para Bajo California leí otro montón de libros e igual para hacer Colosio, el asesinato.

¿Por qué recomiendas tu película Tlatelolco verano del 68?

Es una buena introducción para poder entender el movimiento estudiantil, siento que eso ha faltado en las otras películas, no se cuenta como fue surgiendo, es mas allá de la pura matanza, fue un movimiento que avanzó, incorporando gentes como los personajes de la película y cuentan también que fue algo divertido y entretenido porque había amor.

De repente hay gente que ha criticado el porqué puse una historia de amor, y yo me río un poco porque eso fue lo que sucedió, este movimiento era muy entretenido y divertido. Todo mundo tuvo sus amores y me lo contaron, fue súper lúdico, juguetón, era el año 68 “Haz el amor y no la guerra”, ya habían inventado la píldora anticonceptiva, todo eso yo lo quería poner, y el 2 de octubre la matanza, pero me contaron que eso no fue todo, eso fue solo un día, que les fue de la chingada, pero todos los demás días fueron increíbles, sentían que iban a tomar el poder y que el mundo era de ellos, que iban a cambiar el país, se sentían empoderados.

¿Te gusta el libro de Elena Poniatowska sobre el 68?

Sí me gusta como está construido, al calor de las circunstancias, tiene mucho valor pero le falta información.

¿Qué te costó más trabajo Tlatelolco verano del 68 o Colosio, el asesinato?

En Tlatelolco verano del 68 tuve menos libertad y aparte tuve que hacer una serie, fue muy ambicioso, fue un reto de “Yo puedo por sobre todas las cosas”, me costó sangre, sudor y lagrimas. Fue muy complicado, estaba planeada para más días, me falló la producción, me sentí muy solo, me faltaron extras, llovió, tuve que filmar 18 horas continuas.

En Colosio, el asesinato me sentí con más libertad, yo tomaba las decisiones.

¿Cómo reaccionó la clase política con Colosio, el asesinato y Tlatelolco verano del 68?

Con Colosio, el asesinato más porque estaban cerca las elecciones. Se convirtió más que en una película de entretenimiento y ficción, como en una película que todos querían ver, se comentaba, estaba en la mesa de los mexicanos.

Yo lo que necesito con mis películas es que me pongan a la gente en las salas, con Colosio, el asesinato por el tema la gente entró, con Tlatelolco verano del 68 faltó publicidad, una vez en la sala la película funciona y la gente la recomienda.

A veces esto pasa con muchas películas mexicanas, a menos que las lance una trasnacional, pero si no, es muy complicado competir.

¿Algunos valores que quieras trasmitir en tus películas?

Quizá la duda, el cuestionarse, el despertar curiosidad.

¿Cómo te sentiste cuando te nominaron al Oscar en el 2001 por la película documental Promises?

Las malas noticias y las buenas noticias llegan pronto, yo estaba viviendo en San Francisco, me llamaron por teléfono que habían visto la lista publicada y rente una casa en Hollywood hills, nos fuimos para ir a la Ceremonia del Oscar.

Vivir en el oriente fue genial, fue un proceso de 6 años, lo máximo que estuvimos fueron 4 meses seguidos una vez, pero ya vivir allá es difícil, un choque de culturas muy fuerte

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