Tantas fueron las veces que se les comparó a Andrés Manuel López Obrador y a Donald Trump que parece el mandatario estadounidense acabó por creérsela y ha comenzado a llamar a nuestro próximo presidente “Juan Trump.”
De acuerdo con fuentes cercanas el apodo surgió porque el mandatario estadounidense dice que “se identifica con él” y que ve reflejada en nuestro próximo presidente “parte de su misma rebeldía” y creo que algo hay de cierto.
Tanto Trump como López Obrador han demostrado ser personajes “antisistema”, con fuertes tendencias nacionalistas, que aman el culto a su personalidad y que son devotos de las “benditas redes sociales.” Por lo que habrá que ver si estas mismas similitudes mantendrán una “luna de miel alargada” o crearan una guerra con un tweet. Sobretodo en temas relacionados con migración, comercio y la seguridad.
En lo que respecta a migración los puntos sobre los que habrá que estar pendientes serán las posturas que ambos adopten sobre el muro y la política de tolerancia cero del presiente Trump. Me parece que en el tema del muro las similitudes que comparten podrían ser peligrosas porque mientras uno tiene su America First el otro tiene su propia versión de Mexico First, ha criticado fuertemente las intenciones de Trump e incluso escribió un libro llamado “Oye Trump” sobre el tema.
Por el otro lado, en cuestiones relacionadas con la política de cero tolerancia y la separación de familias AMLO ha subrayado la necesidad de proteger los derechos humanos y de promover el desarrollo de América central para detener las olas migratorias. Además de haber declarado en uno de los debates presidenciales que en caso de ganar su administración no le iba a seguir haciendo el trabajo sucio a los estadounidenses deteniendo migrantes. A la vez que Trump ha puesto tweets en varias ocasiones diciendo que México no hace nada. No obstante, la semana pasa mantuvieron una conversación telefónica en la que, según las declaraciones de AMLO, hablaron de impulsar el desarrollo en México para reducir la migración hacia EE.UU.
En el tema del comercio estas similitudes podrían ser buenas. El tema de la renegociación del TLCAN ha generado cierta tensión en la relación bilateral además de que el mes pasado Trump le impuso aranceles al acero y al aluminio mexicano. Ante esto López Obrador, después de la presión ejercida por los empresarios, se ha mostrado más abierto a la renegociación y parece que con su propuesta de subir el salario mínimo podría tener un tema en común con Trump para la renegociación.
Finalmente en el tema de seguridad fronteriza ambos países siempre han compartido información y de no encontrar en tema en común las similitudes de los protagonistas podrían chocar, especialmente en todo lo que tenga que ver con las drogas. Ya que mientras Trump se queja de los “bad hombres”, AMLO se queja de toda la violencia que el tema ha generado en nuestro país y ha mencionado que prefiere la paz antes que cualquier otra cosa.
El destino de esta relación aun está por escribirse. Esperemos a ambos no les estorbe lo “Trump” y que las similitudes puedan a ayudar a la construcción de un terreno de cooperación en lugar de uno de confrontación.
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