Ni pa’ dónde correr

En todo lo que hagas en la vida hay que hacerlo positivo, buscando siempre que lo que hagas sea verdadero y provoque un cambio. Por eso, en el contexto de mi trabajo, es muy difícil ser positivo, porque la información que nos llega constantemente opaca cualquier obra buena que realice el presidente Andrés Manuel López Obrador.

    Así, en este fin de sexenio, en el año de Hidalgo, vemos cómo los nuevos ricos se fortalecen y algunos son ejecutados en sus negocios. Vemos también cómo se repite la violencia y el asesinato sin sentido con premeditación, alevosía y muchísima ventaja que proporciona un AK47 y un AR15 ante alguien desarmado que reclama que le paguen el golpe de su automóvil.

    ¿Qué puedes hacer? No tienes con qué defenderte, tienes muchísimo que perder, solamente te queda huir o quedarte aguantando con impotencia algún daño u ofensa que te hagan.

    Vivir entre narcotraficantes es vivir con el diablo que te observa impunemente, y si bien te va Dios te hará insignificante para que no te molesten. Te cubrirá con un manto brillante que le dará confianza de no representar una amenaza para ellos.

     Así, pues, como testigo silencioso, tú puedes identificar las camionetas de los mafiosos y darte cuenta de lo que hacen. Como una escena donde una camioneta en un cruce la ciudad, bajó la ventana superpolarizada y se asoma un joven dándole 1000 pesos a un anciano que no recibe Bienestar y que por eso pide diariamente en las calles.

    Los “sabiondos” dirán y ¿tú como sabes?, es cosa de ser observador y cruzar información, así de simple.

    Esa es la dualidad de la vida. El bien y el mal se cruzan en líneas fronterizas invisibles donde el destino de cada uno es leído instantáneamente y juzgado.

    Tal vez, ese acto de caridad del mafioso solo sea un acto de redención, como un acto de redención sea el acto de la entrega de los capos Mayo Zambada y el hijo de Joaquín Guzmán.

    Estas entregas revelan que el Mayo Zambada fue traicionado por quien lo protegía desde el gobierno, y que con las recientes detenciones en el círculo de los “Chapitos” y del propio Mayo por parte del gobierno, fue el detonante para que se fuera a entregar a donde es más valioso: a los Estados Unidos de América. Si se hubiera sido detenido en México, la información con la que cuenta elevaba el peligro de morir en algún operativo para su detección. En cambio, en los Estados Unidos se podría negociar un mejor trato a cambio de información.

    La información que lleve el Mayo Zambada, junto con la de García Luna, creará una pinza con la que pueda negociar los Estados Unidos a su favor. El Mayo, dicen los expertos, tiene información de líderes mundiales, y de muchos individuos que se pensaban intocables.

    Estas entregas solamente debilitan al cártel del Chapo Guzmán y favorecen a las 4 letras de Don Mencho.

    Mientras tanto, la gente de a pie, del pueblo bueno y del pueblo contrario, vivimos con el temor de que la violencia se generalice aún más en las zonas urbanas y que así no haya ni para dónde correr.

    Y tú… ¿hacia dónde vas a correr?