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100 días

A pesar de los retos, Claudia Sheinbaum ha logrado consolidar su liderazgo en estos primeros 100 días.

13 de enero, 2025

El pasado 1 de octubre de 2024, Claudia Sheinbaum Pardo asumió la presidencia de México, marcando un hito en la historia del país como la primera mujer en ocupar el cargo. Sus primeros 100 días han sido un período de intensa actividad política y administrativa, en el que se han puesto en marcha varias de sus promesas de campaña, pero también han surgido desafíos que ponen a prueba su liderazgo. Así, a partir de ahora los desafíos serán muy grandes para ella porque la entrada de Donald Trump a la Presidencia de los Estados Unidos pondrá una presión adicional a la realidad del país que afectará su administración en todos los ámbitos.

Desde el inicio de su mandato, Sheinbaum ha enfatizado la continuidad de la Cuarta Transformación, el proyecto político iniciado por su predecesor Andrés Manuel López Obrador. Entre las primeras medidas destacó el fortalecimiento de programas sociales como “Jóvenes Construyendo el Futuro” y “Sembrando Vida”, buscando ampliar su alcance para combatir la desigualdad y fomentar el desarrollo en comunidades marginadas. En este sentido se puede ver por todo el país, el trabajo incansable de las células llamadas “servidores de la nación” levantando el censo de un programa de salud que se implementara en las casas de las personas con discapacidad y ancianos.

En materia económica, la presidenta ha promovido una política de austeridad, acompañada de un plan de inversión pública en infraestructura para impulsar el empleo y la conectividad. El proyecto estrella de estos primeros días ha sido la consolidación del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, una iniciativa clave para detonar el desarrollo en el sureste del país. Sin embargo, los analistas han señalado que los desafíos presupuestales y los retrasos en algunas obras pueden limitar los resultados en el corto plazo. Sin embargo, en el terreno la realidad golpea a estos analistas, ya que se están haciendo las obras, estando en estos momentos dándose inicio a las negociaciones para implementar a lo largo de la costa chiapaneca, por donde pasa la línea K del Tren Interoceánico empresas de alta tecnología para la generación de energía limpia.

La estrategia de gobierno ha sido primero concretar las cosas y luego anunciarlas, no les gusta alardear, sino dar a conocer los hechos concretos que serán anunciados cuando ya se encuentren sobre el terreno, no antes porque esto genera falsas expectativas y sobre todo sería copiar una práctica de los viejos gobernantes que inauguraban simbólicamente y es fecha que no se hacen los proyectos.

Esta táctica de silencio debería de ser corregida por este gobierno, porque los ciudadanos estamos viendo cómo poco a poco, de manera sistemática que la línea K del Tren Interoceánico y Puerto Chiapas están creciendo, pudiendo constatarse de manera física el crecimiento semanal de las obras, lo que apoya el dicho de “Roma no se hizo en un día”. Así “pian pianito” se están construyendo la infraestructura que servirá para acoger a las empresas que ya están en el terreno, buscando la mejor ubicación para sus empresas que traerán alta tecnología y que dará trabajo a miles de jóvenes chiapanecos, que están en estas ramas de la ingeniería y que desgraciadamente han sido forzados a emigrar por la falta de oportunidades de trabajo.

El tema de la seguridad, una de las mayores preocupaciones de los mexicanos, ha ocupado un lugar central en su agenda. Sheinbaum ha anunciado una estrategia integral basada en la prevención del delito, el fortalecimiento de las policías locales y la colaboración con las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública. Aunque las cifras de incidencia delictiva han mostrado ligeras mejorías en algunos estados, los críticos advierten que persisten focos de violencia, especialmente en zonas controladas por el crimen organizado. Siendo la punta de lanza las operaciones policiacas en los estados de Chiapas con la Fuerza Pakal y la Cero Impunidad y en el Estado de México con el Operativo Enjambre. Los resultados se ven en Chiapas, Donde Eduardo Ramírez se tomó muy en serio las órdenes de la Presidenta Claudia Sheinbaum de combatir la delincuencia y los índices de inseguridad.

Así, a pesar de los retos, Claudia Sheinbaum ha logrado consolidar su liderazgo en estos primeros 100 días. Su capacidad para abordar las problemáticas estructurales del país y mantener el apoyo ciudadano será crucial en los próximos meses. México se encuentra en una etapa de transición histórica, y el rumbo que tome bajo su liderazgo definirá el legado de su administración y el futuro de la nación.

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