Un infectado más: el turismo

A pesar de que la pandemia del COVID-19 es una crisis de salud pública, está afectando a diversos sectores de la economía. El turismo es...

7 de abril, 2020

A pesar de que la pandemia del COVID-19 es una crisis de salud pública, está afectando a diversos sectores de la economía. El turismo es uno de estos sectores, el cual, se ha visto perjudicado y para el cual habrá que diseñar una estrategia de reactivación una vez que se haya superado la crisis sanitaria. 

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos​ (OCDE) realizó un análisis sobre la situación actual y durante los próximos meses de este sector alrededor del mundo. El estudio revela que durante todo el primer semestre del año, el sector va a continuar con ingresos muy bajos, asimismo detalla que la recuperación tardará varios meses. El turismo es clave para algunos países, muestra de ello es que contribuye directamente con el 4.4 % del Producto Interno Bruto (PIB). Para el caso de  México, la OCDE estima que representa casi el 9% del PIB. En España, dicha cifra es alrededor del 12%, en Portugal 8% y Francia 7%.

El turismo y su afectación por la pandemia

Con el contagio masivo y global del COVID-19, el turismo a nivel internacional ha venido a la baja, sin bien fue un movimiento paulatino, actualmente dicho sector está prácticamente detenido, afectando a muchas industrias relacionadas. Datos de la OCDE reflejan que alrededor de 50 millones de empleos a nivel global están en riesgo.

El documento muestra los impactos en algunas vertientes del sector, por ejemplo la transportación aérea. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés), estima que este año se presentarán pérdidas económicas por 252 000 millones de dólares. Air France anunció a mediados de marzo que el 80 % de sus trabajadores estarán en desempleo parcial. Algunas aerolíneas como British Airways, e EasyJet anunciaron la cancelación de muchos vuelos y la decisión de dejar a su flotilla en tierra. Emirates Airline suspendió temporalmente sus vuelos de pasajeros.

Adicional a la operación del servicio aéreo, muchos gobiernos han tomado decisiones como el cierre de sus fronteras a vuelos internacionales, otros han reforzado las medidas para el ingreso a su país, y otros países han impuesto cuarentena obligatoria a los pasajeros recién llegados del extranjero.

Otro sector afectado es el de los cruceros, ya que diversas empresas han tenido la dificultad de desembarcar a sus tripulantes y pasajeros, por lo que la mayoría de estas empresas han anunciado una suspensión temporal en  todos sus servicios. 

Por su parte, el sector hotelero ha tenido una fuerte caída de ingresos derivado del cierre de hoteles, la baja ocupación y hasta la suspensión de reservaciones. Los restaurantes han visto afectados sus operaciones, en algunos casos solo se compone de servicio para llevar. Estados Unidos estima que en los próximos tres meses las ventas en este sector, tendrán una disminución de 252 000 millones de dólares.

El turismo por negocios también ha sido afectado. Se han cancelado reservaciones y han sido aplazadas o canceladas exhibiciones alrededor del mundo. De igual manera empresas encargadas de la diversión y esparcimiento han sido afectadas. El sector cultural no se ha salvado, con el cierre de museos, circos y teatros. Muchos eventos han sido pospuestos hasta nuevo aviso, por ejemplo, torneos deportivos importantes como el Master´s de golf, la UEFA Champions League, torneos de tenis y el último en anunciarse la cancelación de los Juegos Olímpicos de Tokio, dejando pérdidas millonarias por cancelación de hospedaje y transportación así como por el pago de derechos televisivos.

Será importante que el gobierno federal de manera coordinada tanto con el sector empresarial como con los gobiernos subnacionales, diseñen una estrategia que permita sanar las finanzas de las empresas ya que en México existen muchas familias que dependen del sector turístico y no necesariamente de manera formal. Las vacaciones de Semana Santa no serán este año lo mismo sin turistas y con el tema del COVID-19 como principal actor.

En el mundo hay una serie de acciones que se están llevando a cabo para ayudar a este sector. En varios países como Grecia o Irlanda, ya se han instalado Grupos de Trabajo o Comités especiales que tienen la encomienda de diseñar acciones de apoyo. Francia, por ejemplo, modificó las políticas de cancelación, de manera que se otorgue un crédito equivalente al servicio cancelado para usarse a futuro  y así evitar la salida de capital de tajo para las empresas. En el agregado, las medidas propuestas deben garantizar que están protegiendo a: 1) los turistas; 2) trabajadores de la industria turística; 3) apoyando la sobrevivencia de las empresas; 4) y promoviendo la recuperación del sector.

 

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