Titulaciones con sabor a libertad

“Los ejemplos corrigen mucho mejor que las reprimendas”, Voltaire

16 de mayo, 2017

“Los ejemplos corrigen mucho mejor que las reprimendas”
Voltaire

Un brillo de esperanza inundó las lúgubres instalaciones del Reclusorio Femenil de Santa Martha Acatitla cuando el pasado 5 de mayo, Mónica Ponce de León Treviño, reclusa en el centro de readaptación social, logró titularse como licenciada en Actuaría al aprobar su examen profesional realizado en las instalaciones de dicha penitenciaria femenil, donde sinodales de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se presentaron para realizar la evaluación.

La “Maestra Mónica”, como es conocida por las reclusas que son sus alumnas, logró sobreponerse a las difíciles condiciones que se viven en un Centro de Readaptación donde el común denominador es el perfeccionamiento de las múltiples variantes del delito, caída o recaída en adicciones a diversas drogas, pero sobre todo un escaso sentido de servicio y solidaridad con las internas. El ejemplo de la ahora licenciada por la Facultad de Ciencias, colabora de manera real al esfuerzo que realizan sus compañeras internas por mejorar sus vidas, mediante el aprendizaje de oficios y la conclusión de estudios académicos de diversos niveles.

Luego de 18 meses de asesoría con su tutora Yuri Salazar, mediante la educación a distancia, la estudiante Ponce de León, finalizó con éxito su tesis titulada “La Ciencia Actuaria en el Mercado Laboral Mexicano” con la que obtuvo su grado académico de licenciatura gracias al programa Proyecto UNAM que ya suma 12 alumnos de la Máxima Casa de Estudios, que pueden titularse a pesar de estar recluidos en Centros Penitenciarios o enfrentando procesos judiciales. Mónica Ponce destacó que logró esbozar las características de un método de enseñanza para personas privadas de su libertad, el cual desarrolló a partir de su experiencia como docente en la cárcel.

La Actuaria Ponce de León es el ejemplo perfecto de la superación personal, a pesar de las difíciles circunstancias de estar presa en un centro femenil carcelario, su historia de vida es permeable a la población recluida, que ven una enorme cercanía con la apreciada profesora, quien logró titularse en las mismas instalaciones del Penal de Santa Martha, al realizar su examen profesional en el Centro de Desarrollo Infantil “Amalia Solórzano de Cárdenas” (destinado al cuidado de los hijos de las reclusas, hasta los 5 años 11 meses).

A través del boletín informativo de la Dirección General de Comunicación Social (DGCS) de la UNAM, con fecha del pasado 8 de mayo del 2017, se registró la destacada concurrencia al examen profesional de la maestra Mónica y cómo se acondicionó el salón preescolar, dedicado originalmente para los hijos de las internas, en un auditorio universitario con los tradicionales colores auriazules. Se destaca el testimonio de cercanía de la reclusa Roxana Arredón quien expresó: “Vine porque se titula una de nosotras. Esto no solamente es un alto a la rutina, sino también un motivo para celebrar”, añadió la amiga y alumna de la profesora Mónica: “Se trata de una ocasión muy especial: quien se recibe hoy no sólo es nuestra profesora, es nuestra amiga”.

Se cita en otro boletín informativo de DGCS del pasado 22 de septiembre de 2009 que Mauricio Daniel Sánchez Amezcua obtuvo el grado de biólogo en el interior del Reclusorio Varonil Oriente, en otro gran ejemplo de superación similar al de la Actuaria Ponce de León; en 2009 se tenía un registro de 300 reos con matrícula de licenciatura de la UNAM que podrían beneficiarse de programas de apoyo para la conclusión de sus estudios universitarios.

En los difíciles tiempos de la impartición de justicia inequitativa, los escándalos por fugas de reos de alta peligrosidad, la filtración de videos con fiestas al interior de los Centros de Readaptación Social, y las paupérrimas condiciones en los que sobrevive el sistema carcelario en el país, noticias como la titulación de la maestra Mónica son un bálsamo ante la vorágine de corruptelas e injusticias de la vida penitenciaria del país.

Ponce de León comentó al finalizar su examen profesional, que su tesis estaba dedicada a las madres en reclusión a quienes les han sido arrebatados sus hijos. Cientos de internas de Santa Martha han pasado por los cursos de la profesora Mónica, una de ellas es la reclusa Leslie Arellanes, quien tomó historia del cine y acudió como oyente al examen profesional, aseguró sentirse emocionada y motivada para concluir sus estudios al interior del Penal de Santa Martha Acatitla. Historias de vida como la de Mónica Ponce de León son ejemplos destacados de los que el país debe nutrirse y reproducirse, para combatir las grandes desventuras que se viven en el acontecer diario dentro de los mal llamados Centros de Readaptación Social.

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