Regreso al Semáforo Naranja en Ciudad Juárez
Se veía venir. La actividad en las calles se notaba como antes de la
pandemia. Aun y cuando las escuelas públicas no estuvieran trabajando, se notaba
un incremento en la actividad cotidiana. Las plazas comerciales y los llamados
tianguis en varias ciudades se desarrollaron con toda normalidad “pre-pandémica”.Y se ha notado una cosa: la falta de uso masivo de cubrebocas y el mal uso de las
mismas (se cubre la boca, pero no la nariz).
El comentario y los reportes pandémicos que a diario se presentan habían
sido desalentadores, lo que sin duda refleja la ligereza con la que se observaba a la
gente en las calles. El riesgo de regresar al semáforo naranja, que es de alto riesgo,
estuvo siempre latente y se incrementaba debido a la ligereza de parte de las
personas para seguir con los protocolos anticovid.
Pues sucedió. En algunos estados se ha regresado al color naranja y ahora
estamos con un incremento en el número de los casos tanto de infectados, como de
83 781 en el país. Seguro que los comerciantes, las empresas, las iglesias, los cines,
los gimnasios y todos aquellos negocios donde se recibe a muchas personas para
atenderlas al mismo tiempo y que apenas habían reiniciado actividades, están
angustiadas por el nuevo cierre.
Son casi ocho meses los que tenemos guardando un encierro para evitar
regresar al color rojo en el semáforo (el que teníamos en abril). Nadie quiere eso;
sin embargo, el riesgo es alto de que esto suceda.
En Ciudad Juárez se reportó un incremento de infectados en las oficinas del
municipio. Eso debe de haber sido la puntilla para regresar al color naranja. Pero
no solo ahí se incrementaron los casos. Las plantas maquiladoras que llevan un
monitoreo diario empezaron a detectar un incremento en casos sospechosos, tanto
en empleados como en los contactos que éstos llegaban a tener con familiares y
amigos.
En resumen, hemos retrocedido. Eso de ninguna forma es bueno.
Tardaremos más tiempo en que todo regrese a una normalidad como la que ya se tiene en el estado de Campeche, único estado en la República con color verde en el
semáforo epidemiológico.
Estos estados actualmente tienen color naranja:
1. Aguascalientes
2. Chihuahua
3. Coahuila de Zaragoza
4. Colima
5. Ciudad de México
6. Durango
7. Estado de México
8. Guerrero
9. Hidalgo
10. Jalisco
11. Nayarit
12. Nuevo León
13. Oaxaca
14. Querétaro
15. Sinaloa
16. Yucatán
17. Zacatecas
Las autoridades de los tres niveles llaman a la población a llevar los
protocolos básicos y mínimos que se requieren para controlar los brotes: lavarse las
manos frecuentemente, guardar sana distancia y, lo más importante, usar cubre
bocas.
A propósito del uso de las mascarillas. Me permito transcribir una parte del
reporte de la revista: New England Journal of Medicine del 4 de septiembre 2020:
¿Nos estamos haciendo inmunes al coronavirus gracias al uso de
mascarillas?
El uso de mascarillas podría estar creando inmunidad a la COVID-19 de manera
indirecta. También podrían favorecer el contagio de un menor número de
personas, así como la aparición de síntomas más leves tras el contagio. Esta
semana, la revista New England Journal of Medicine publicaba estas interesantes
conclusiones.
La afirmación es sorprendente, pero la explicación es totalmente lógica. El SARS-
CoV-2, el virus que provoca la COVID-19, tiene la capacidad de causar
innumerables manifestaciones clínicas, que van desde la ausencia total de
síntomas, hasta neumonía, síndrome de dificultad respiratoria aguda y muerte.
Los datos virológicos, epidemiológicos y ecológicos han demostrado que el uso de
la mascarilla protege de la infección. Pero, además, en el caso de que esta se
produzca, hace que los síntomas de la enfermedad resulten más leves. Esto es así
porque uno de los factores que condiciona la gravedad de la enfermedad es la
carga vírica recibida. Es decir, la cantidad de partículas víricas que producen el
primer contagio.
Así pues, como el inóculo vírico es importante para determinar la gravedad de la
infección por SARS-CoV-2, las mascarillas, al actuar como un filtro que reduce la
carga vírica que llega a las vías respiratorias, atenuarían el impacto clínico
posterior de la enfermedad, en caso de contagio.
Amigos y amigas, yo no soy científico como el doctor Hugo López-Gatell,
quien en nuestro país ha sido la cara oficial del combate al coronavirus. No lo ha
hecho bien. Ha sido muy ligero para recomendar el uso del cubrebocas.
Lo que sin duda sentó un contra ejemplo al igual que el presidente de la
República. Soy periodista y creo que tengo un gran sentido común, por lo que sé
que sirven. El uso del cubrebocas para mí no es nuevo. Por motivo de mi actividad
lo uso desde hace años cuando viajo. Eso ha evitado que me contagie de la gripa o
la tos que porta quien me toque por acompañante en un vuelo o un trayecto
carretero.
Sé, por experiencia, de su efectividad, pero sé también que la gente no lo
quiere usar o que no sabe usarlo y también sé que ahora ya depende de nosotros
que esto se componga.
La autoridad nos pide disciplina y responsabilidad. Lo mismo que el sentido
común. Todos tenemos que cooperar. Hacer nuestra parte. Por desgracia las
personas hacemos todo lo contrario, hasta que nos pasa una desgracia. Entonces
nos lamentamos. ¿Querrá la gente de estos estados disciplinarse? ¿Aceptarán los
López enviar una mejor señal y un buen ejemplo? ¿Regresaremos pronto a la
normalidad? Ahí el Meollo del Asunto.
La crisis del tráfico de armas en México
Opera en dos niveles, para fortalecer a los grupo delictivos y también para las personas que necesitan de un...
septiembre 5, 2018AMLO ya comenzó a gobernar
Desde el 1ro de septiembre el Presidente Electo ha comenzado a gobernar en México. ¿Y por qué? Porque las...
septiembre 3, 2018La corrupción pone en peligro al nuevo aeropuerto
Una cosa es la necesidad de un nuevo aeropuerto y otra cosa es la corrupción que existe en la...
agosto 24, 2018¿AMLO concluirá las negociaciones del TLC?
El TLC es mucho más que la industria automotriz; para México simboliza más del 30% de las exportaciones. Es...
agosto 17, 2018