EDUARDO TAMBIÉN ESTÁ EN:

¡Viva la comida!

Que la comida sea tu alimento y el alimento tu medicina Hipócrates (Médico griego) Bien sabido es que los excesos son nocivos para la salud...

1 de marzo, 2016

Elizabeth Cruz Ramírez

Que la comida sea tu alimento y el alimento tu medicina
Hipócrates (Médico griego)

Bien sabido es que los excesos son nocivos para la salud pero México es un país con una historia gastronómica rica y variada que hace imposible decirle no a la comida o al menos yo no me imagino la vida sin pozole, quesadillas, mole poblano, cochinita pibil, cabrito, carnitas, tlacoyos, tamales, mariscos o cualquiera de los platillos típicos que cada región ofrece aunque se diga, se comente o se rumore que son causantes de obesidad y/o diabetes por el exceso de grasa que contienen o el alto nivel de carbohidratos, sal y azúcares que aportan al organismo.

Según un estudio realizado por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) el 32.8% de la población en México es obesa lo cual nos coloca por encima de Estados Unidos con un porcentaje del 31.8%, dicho estudio también revela que el 70% de los mexicanos padece sobrepeso e incluso la tercera parte de los jóvenes también sufre de obesidad. Las cifras son alarmantes ya que se estima que para 2017 el costo total en el rubro de salud se incrementará a cerca de $160 mil millones de pesos si no se aplican acciones de prevención y promoción de la salud (según datos del sitio: http://alimentosescolares.insp.mx/ ) De ahí el “interés” de las autoridades por resarcir el daño y por ello, el 16 de mayo de 2014 fueran publicados en el DOF (Diario Oficial de la Federación) los Lineamientos generales para el expendio y distribución de alimentos y bebidas preparados y procesados en las escuelas del Sistema Educativo Nacional (lo pueden consultar aquí http://alimentosescolares.insp.mx/docs/AcuerdoLineamientosAlimentosYBebidasEnEscuelas.pdf ) mismos que son aplicables tanto a escuelas públicas como privadas del Sistema Educativo Nacional en sus niveles de educación básica, media superior y superior en un intento por ofrecer una alimentación sana a los escolares retirando del alcance todo aquello considerado “comida chatarra” lo cual resulta una contradicción ante la proliferación de las tiendas de conveniencia que hasta en las carreteras más lejanas podemos encontrar.

El tema resulta por demás interesante y da lugar al debate; sin embargo, aspiro a sembrar la semilla de la inquietud para observar cómo nos alimentamos y cómo va nuestra salud para empezar un cambio (si es necesario). Empecemos por decir que comida chatarra es sinónimo de comida rápida: hamburguesas, hot dog, frituras, galletas, refrescos, dulces, botanas y todo lo que es producido de forma industrial sin ningún tipo de aporte en la alimentación; sin embargo, los lineamientos en mención van más allá pidiendo incluso un balance en las calorías de cada platillo, evitando el uso de azúcar y sal, picantes, empanizados y capeados entre otras restricciones.

Referirse a bienestar significa nutrirnos con alimentos que suman a nuestro organismo combinados con actividad física y no se trata de consumir únicamente alimentos sanos y naturales (ahora llamados orgánicos) sino de evitar los industrializados y de ejercitarse de acuerdo a las habilidades físicas para no sacrificarse dos horas inútilmente en el gimnasio. Es importante considerar que histórica y genéticamente nuestro organismo se ha ido adaptando al medio ambiente por lo que eliminar alimentos de un día para otro puede tener un efecto contrario al que buscamos y provocarnos incluso, algún tipo de descompensación por lo que es importante modificar poco a poco nuestros hábitos alimenticios y por ello es que los lineamientos aplicados por la SEP tienen una falla de origen: primero es necesario hacer un cambio de cultura alimenticia sino, pregúntese por qué incluso en la dieta de los bebés primero se introduce el Gerber sin detenerse en las verduras, frutas, leche, agua natural, pan, tortillas, leguminosas, carne, pollo, pescado, etc. Si desde la primera infancia la dieta incluye frituras y refresco no debe sorprendernos que en la universidad los estudiantes pidan exactamente lo mismo antes de pensar en una comida con un aporte calórico bajo y libre de grasas, sal, azúcar y acompañada de un delicioso vaso de agua natural, así que seguramente habrá muchos que consideren que su derecho a la alimentación está siendo violentado al no poder elegir libremente lo que han de consumir.

Consuma frutas y verduras y al menos, ocho vasos de agua natural al día pero por favor, no le dé la espalda a nuestra comida típica.

Se los dejo de tarea.

___________________________________________________________

Fuente:

http://www.forbes.com.mx/mexico-el-pais-mas-obeso-del-mundo/

Comentarios