Reporte 79: ¿Qué controla nuestra “normalidad”?

Imagine usted una escena de película en la que una persona realiza el pago de un producto o servicio y el vendedor o vendedora le...

13 de agosto, 2019

Imagine usted una escena de película en la que una persona realiza el pago de un producto o servicio y el vendedor o vendedora le comenta: “la operación no puede ser completada por error en el sistema” la persona en cuestión no cuenta con dinero en efectivo, lo que sigue lo puede relatar algún habitante de la Ciudad de México que el fin de semana pasado haya pasado por una situación similar, cuando un “incidente operativo registrado el sábado pasado en Promoción y Operación (Prosa), afectó operaciones con tarjetas bancarias” lo que significó que no pudieran realizarse pagos y/o retiros de efectivo.

Prosa es una de las empresas mexicanas más importantes en el país, realiza unas 3 mil 600 millones de operaciones al año, pero en diversos mensajes recibidos para esta columna de participantes del sector financiero se dicen alarmados porque “van en declive peligroso”, lo que nos pone en riesgo a todos de no tener en algún momento acceso a nuestro dinero por algunas horas debido a un mal plan de contingencia, ya que aseguran no fue ataque cibernético aunque todo parezca muy sospechoso. (Fuente: https://www.elfinanciero.com.mx/opinion/jeanette-leyva/la-caida-de-prosa) Sólo para precisar, Prosa es una empresa “enfocada a los medios de pago que integra soluciones tecnológicas compartidas para contribuir a un mundo más simple. Además de ser el procesador de transacciones electrónicas más grande de América Latina y uno de los diez más importantes del mundo” en resumen, manejan el dinero de la fuerza productiva y por un “incidente” sus usuarios tuvieron problemas a la hora de realizar sus actividades cotidianas porque el combate al uso de efectivo ha colocado a los medios electrónicos de pago como la opción primera a la hora de realizar transacciones comerciales. La tecnología no es mala, el problema es cuando no funciona y detiene la “normalidad” a la que estamos acostumbrados actualmente y en la que es posible resolver todo con tan sólo un click (siempre y cuando, no falle).

Los incidentes, errores o fallas nos ayudan a profundizar en situaciones cotidianas que realizamos cada día en “piloto automático” porque las hemos adoptado como nuestra forma de existencia y asumimos que nunca habrá problema con ellas, recordemos el caso de las comunicaciones en el sismo del 2017 cuando sólo fue posible comunicarse a través del Whatsapp pero lo mismo ocurre con los servicios telefónicos, el suministro de agua y otros servicios pero lo que no está justificado es no medir el impacto de dichas fallas o cortes y conformarse con un “comunicado oficial” que explique a medias las causas y pretenda seguir adelante como si nada hubiera ocurrido.

Por otro lado, si contar con tarjetas de crédito ya implica cierto riesgo por el asunto de las clonaciones y fraudes electrónicos, portar efectivo equivale a ponerse en el blanco de la delincuencia y ahí se encuentra el principal problema: la seguridad o la falta de la misma porque en la actualidad, no existe nada seguro o permanente y el nivel de riesgo en casi la totalidad de las actividades que realizamos es cada vez más alto pero además, lo cierto es que el dinero no es la forma más asertiva de relacionarnos porque en algún momento dejamos de controlar el acceso al mismo si ocupamos únicamente medios electrónicos y ese es el meollo del asunto: ¿Qué formas de interacción con el mundo tenemos? ¿Actuamos en piloto automático o todavía conservamos la capacidad de prevenir, de solucionar y de mantenernos en alerta ante cualquier tipo de contingencia? ¿Estamos perdiendo el sentido de humanidad y nos parecemos cada vez más a robots? ¿Dejamos el control en algo ajeno a nosotros aunque se trate de cuestiones personales como lo es el ingreso que generamos a cambio de nuestro trabajo?

Por todo lo anterior, la pregunta sería ¿qué o quiénes controlan nuestra “normalidad”?

¡Se los dejo de tarea!

Comentarios






Más de categoría

Gracias COVID-19 (Parte 3)

“Hay lugares desolados sin gente caminando por las calles, hay hogares felices y otros que han aumentado el infierno...

abril 14, 2020

Gracias COVID-19 (Parte II)

“Estamos frente a una situación grave a nivel mundial que no nos había tocado vivir en muchas generaciones pero...

marzo 31, 2020

Gracias COVID-19 (Parte 1)

Y fue así que el ambiente cambió de tonos rojos y morados por el alto índice de violencia y...

marzo 24, 2020

Classic Blue: Calma, confianza y conexión

Así se define el “color del año” que como ya es costumbre desde hace 20 años, anuncia el instituto...

enero 7, 2020