México en caída libre: La triste realidad del Estado de Derecho

29 de octubre, 2024

Eduardo Ruiz-Healy

El Índice de Estado de Derecho 2024 del World Justice Project (WJP), difundido la semana pasada, muestra la desastrosa realidad mexicana. De 142 países evaluados, México se ubica en el puesto 118, con una puntuación global de 0.41 en una escala del 0.00 al 1.0. Esta posición no solo es alarmante por sí misma, sino que además representa una caída del 0.6% respecto al año anterior y un desplome del 8.6% en los últimos 5 años.

¿Qué revela esto sobre el México de hoy? Solo una cosa: el país está en caída libre en términos de Estado de Derecho. Afirmar esto no debería interpretarse como una exageración o un ataque político. Son datos duros que reflejan una realidad que muchos mexicanos viven día a día. Datos elaborados por el Proyecto de Justicia Mundial® (WJP), una organización internacional independiente y multidisciplinaria que trabaja para crear conocimiento, generar conciencia y estimular la acción para promover el Estado de Derecho en todo el mundo.

Algunos puntos específicos merecen atención:

En “Ausencia de Corrupción”, México ocupa el lugar 135 de 142, algo que no debería sorprender a nadie, por más que el expresidente Andrés Manuel López Obrador jurara y perjurara que “se acabó la corrupción”. El hecho es que la corrupción sigue siendo el pan de cada día en el país, a pesar de los discursos de los morenistas que insisten en lo contrario.

En “Orden y Seguridad”, el país queda en el lugar 133. Esto, en un territorio donde la violencia del crimen organizado parece no tener fin y donde regiones enteras viven bajo el yugo del narco.

Quizás lo más preocupante sea la posición en “Justicia Penal”: el lugar 130. Esto habla de lo que ya es conocido por todos: un sistema de justicia conformado por fuerzas policiacas, ministerios públicos y juzgadores ineptos, ineficiente y corrupto, que no castiga a los criminales ni protege a las víctimas. ¿La reforma del Poder Judicial ayudará a mejorar la situación? Solo el tiempo lo dirá.

Lo único positivo en este sombrío panorama es la posición en “Gobierno Abierto”, donde ocupa el lugar 47. Al menos en transparencia y acceso a la información la situación no parece tan mala, aunque la segura desaparición del INAI probablemente causará que en este rubro también el país califique cada vez peor. Un cínico diría que de poco sirve tener acceso a la información si esta revela un sistema podrido hasta la médula.

¿Qué indica todo esto? Que el famoso “cambio” prometido por la 4T no solo no ha llegado en términos de Estado de Derecho, sino que retrocedió de manera alarmante. ¿Cuánto más puede caer México antes de tocar fondo?

Es momento de exigir un verdadero compromiso con el fortalecimiento del Estado de Derecho y no aceptar más discursos vacíos, justificaciones o culpas hacia los neoliberales que se fueron en 2018. El país necesita acciones concretas que combatan la corrupción, reduzcan la impunidad y garanticen la seguridad de todos. De lo contrario, en el próximo índice del WJP, México podría estar compitiendo por los últimos lugares con países como Venezuela, Afganistán y Camboya. Y eso sería una nueva vergüenza nacional que ningún mexicano debería estar dispuesto a aceptar.

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