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La Genética contradice a los racistas

Nuestro objetivo fundamental es mantener nuestra propia existencia sin dañar las vidas ajenas.

13 de junio, 2024

La arqueología es una ciencia formidable que contribuye a la revelación de muchos secretos, durante mucho tiempo sabiduría y versiones inconclusas predominaron porque no existía el conocimiento ni la manera de establecer teorías y conclusiones más formales. La biología molecular, la electrónica, los sistemas digitales, la fotografía y otras tecnologías modernas han contribuido a establecer conclusiones sólidas basadas en datos reales, completar teorías inconclusas y validar o rectificar conceptos que permanecieron inciertos o secretos durante mucho tiempo.

El hecho de que la arqueología moderna nos resuelva muchas dudas o nos aclare muchas situaciones inconclusas es algo fascinante porque nos proporciona una visión más clara de nuestro pasado que tal vez nos permita analizar y diseñar un mejor futuro. Muchos temas han sido aclarados y resueltos parcialmente; otros han servido de estímulo para seguir promoviendo el estudio de nuestra historia o bien para situar ciertos conceptos que algunos políticos y otros trastornados militares usaron para satisfacer sus intereses y su afán de poder. Quizá uno de los ejemplos más ilustrativos y oportunos sea el concepto del racismo, que data de tiempos prehistóricos y que siempre ha traído consecuencias abominables para las poblaciones que han resultado involucradas.

LOS NEARDENTALES

Esta larga historia empezó en 1856 cuando unos investigadores alemanes descubrieron una serie de osamentas humanas en una cueva cercana a Dusseldorf. De inmediato notaron que los restos, aunque humanos poseían ciertas características (mayor capacidad craneana, tórax corto con huesos gruesos, ideales para el trabajo físico, etc) que destacan a simple vista. Como ninguno de ellos tenía la experiencia para el análisis de tan extraño hallazgo, buscaron la forma de encontrar un anatomista que resolviera la situación. Finalmente, las osamentas fueron a parar con el Dr. William King, anatomista británico quien los describió y, caracterizó como Homo neardenthalensis en 1863. Posteriormente, análisis y pruebas con carbono activado revelaron que estos restos aparecieron hace 600 000 años en Europa y el noroeste asiático, que se asociaron en pequeños grupos, que llevaron una vida errante en su búsqueda por mejores climas y fuentes alimenticias más abundantes.¹

Los diversos grupos de neandertales se encontraban ocasionalmente, tenían convivencias sexuales y también compartieron sus conocimientos y experiencias de la vida diaria, actividades como: la fabricación y el uso de herramientas, el uso y manejo del fuego para cocinar, templar sus armas y defenderse de los animales, intuían un primitivo lenguaje que les permitía una dificultosa comunicación hablada, etc. Muchos de estos detalles han sido el resultado de laboriosos estudios realizados por expertos genetistas, filólogos, forenses, gerontólogos, etc; que desde hace muchos años se han dedicado a estos temas; nada ha quedado al azar.² Es oportuno resaltar que todas estas investigaciones tuvieron un momento culminante cuando Svante Pääbo, investigador sueco obtuvo el Premio Nobel en Fisiología y Medicina en el 2022 por sus brillantes e inobjetables trabajos acerca de la evolución genética de varios homínidos prehistóricos. Demostró y comparó los genomas de los Homo sapiens y los nearderthalensis y validó muchos datos inciertos; una de sus conclusiones más significativas fue el hecho de que ambas genealogías cohabitaron y convivieron durante 140 000 años, lo cual demuestra un proceso evolutivo diferente el cual produjo recombinantes nuevos que subsisten a la fecha. Los análisis actuales de los DNA de los europeos y de algunos asiáticos revelan que el 1.5 y el 2.1% provienen de los H. neardenthalensis, lo cual puede interpretarse como una extensa recombinación genética que también originó muchas otras genealogías que no subsistieron.³

Los análisis de los periodos transcurridos también revelaron que los neardenthalensis desaparecieron en forma misteriosa hace 40 000 años,las osamentas que se han encontrado en varios países asiáticos y europeos muestran esqueletos completos sin señales de violencia y sin vestigios de armas o escenas violentas en su derredor. Este es otro misterio que aún no se aclara plenamente.

Existen varias teorías que sostienen que los H. sapiens, siendo individuos más instruidos y con mejores armas aniquilaron a los H. nearderthalensis; otras teorías proponen que quizá algún microorganismo, tal vez un virus infectó a los grupos de neardenthalensis sin protección inmunológica y los desapareció. Esto explicaría que algunos sobrevivientes, productos de recombinaciones genéticas habían adquirido la inmunidad lo cual les permitió persistir y continuar con la distribución de los genomas responsables de la resistencia. Esta fue una hipótesis formulada por el Dr. Pääbo; que sostiene que no hubo tal desaparición sino una dilución evolutiva donde solo los mejor dotados sobrevivieron. Tal vez tenga razón… habrá que esperar.

LOS YAMNAYA

El 24-27 de abril se celebró la Conference on The Transformation of Europe in the Third Millenium, en Budapest; el tema central fue: The Yamnaya Impact in Prehistoric Europe. Los asistentes fueron eminentes especialistas que discutieron acerca de un nuevo grupo de humanoides fósiles que se establecieron cerca del río Dnieper en Ucrania, hace 5000 años y vivieron en forma errante explotando y aprovechando los recursos naturales que encontraban a su paso en Europa y Asia.

Se tienen evidencias de que los Yamnaya fueron descendientes de otros humanoides más evolucionados que habitaron en el Cáucaso y la estepa Siberiana, es decir fueron una mezcla de otras mezclas. Al parecer, el gran grupo se fraccionó en dos y unos se dirigieron hacia Europa y los otros a Asia. Sus osamentas no presentan marcadores de H. neardenthalensis, quizá será porque éstos estaban desaparecidos. Los Yamnaya fueron homínidos muy evolucionados, con una estructura y apariencia eminentemente europea, se supone que estuvieron en contacto con animales, tal vez domésticos y que éstos les confirieron cierta inmunidad contra algunas enfermedades. En virtud de sus características, se les considera recombinantes evolucionados porque habían desarrollado una serie de actividades y métodos que habían aprendido de otras culturas prehistóricas; inclusive, los filólogos han concluido que hablaban un dialecto primitivo que supuestamente fue la raíz de la mayoría de los idiomas europeos actuales, por su similitud y su fonética. Siempre fueron en busca de mejores condiciones de vida y de acuerdo con las evidencias, llegaron a establecerse en las islas británicas. Inclusive, algunos individuos masculinos actuales presentan marcadores genéticos provenientes del cromosoma Y de los Yamnaya originales.

Otro detalle evolutivo de este grupo se manifiesta con el hecho de que los individuos más primitivos eran intolerantes a la asimilación de la lactosa. Generaciones más recientes muestran una asimilación total del disacárido. Este detalle sugiere la posibilidad de que la leche animal se haya agriado (por acción natural de las bacterias de la atmosfera) y que después, los individuos adquirieron los genes bacterianos (de la asimilación de la lactosa) al beber esa leche; transformándose ellos mismos en asimiladores de la lactosa.

Existen otros muchos detalles que como este se han presentado en el transcurso del tiempo, promoviendo procesos evolutivos que funcionan en favor o contra la salud del hombre y las demás creaturas vivas que cohabitamos este planeta.⁴

Nadie está a salvo de la evolución genética, nos corresponde inducir y fomentar prácticas y métodos positivos para el bienestar y salud. Nuestro objetivo fundamental es mantener nuestra propia existencia sin dañar las vidas ajenas.

REFERENCIAS.

Anónimo. The Era of Neanderthal. THE WEEK. October 27 of 2023.
Sam Walters, Sara Novack, Matt Hrodey, Sean Mowbray and Donna Sarker. Everything Worth Knowing About Neanderthals. Discover. May/June. 2024.
Antonio G. Trejo., Svante Pääbo, Premio Nobel de Fisiología y Medicina. 2022. Ruiz Healy Times. Noviembre 10, 2022.
Anónimo., Found: the birthplace of the Yamnaya. The Economist. May 11, 2024.

Antonio G. Trejo. Correo electrónico: [email protected]

Junio 12, 2024,