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Garantías para los Periodistas

Es evidente que en los últimos años ha crecido la ola de violencia en México en contra de las personas que trabajan en los medios...

1 de junio, 2017

Angélica Murillo Garza

Es evidente que en los últimos años ha crecido la ola de violencia en México en contra de las personas que trabajan en los medios de comunicación como los periodistas.

Esta problemática creciente causa un gran malestar en todos los ciudadanos que día a día intentamos por medio de las diferentes actividades laborales, educativas, empresariales, etc., construir un mundo mejor, más productivo y competitivo y que, precisamente, el hecho de tener acceso a la información, del acontecer diario nos permite poder establecer una mejor comunicación, conocer, estar informados de todo lo que sucede en México y en el mundo para poder tomar decisiones asertivas en los espacios donde nos desempeñamos.

Por otra parte, si me permiten puntualizar, desde un punto de vista como ciudadana e independientemente del medio de comunicación de preferencia, podemos constatar que los periodistas, conductores, colaboradores, reporteros, es decir, de todas las personas que formamos parte de los medios masivos de comunicación, buscamos por medio de la imagen retratar el acontecer diario y con el uso de la palabra dar forma a la noticia en el momento que sucede, con la finalidad de informar de manera oportuna a los ciudadanos.

Desafortunadamente, los hechos que suceden en algunos casos no son nada agradables con la violencia, corrupción e impunidad lo cual corroe a nuestro país y a sus habitantes. Es una problemática social de los países latinos y México no es la excepción.

El asesinato del periodista refleja la falta de garantías, seguridad, inversión económica, creación de fondos de apoyo, etc. Es un tema y un problema al que no se le ha otorgado la atención que merece, ni mucho menos existe una normativa jurídica que lo contemple y que haga valer la dignidad humana.

El peor enemigo del hombre es él mismo, ya que en lugar de preservar la vida, tiende en ciertos casos a eliminar toda evidencia humana.

¿Cómo formar ciudadanos, personas con una actitud de empatía hacia los demás? Bien, toda esta educación en valores es la que se da en casa antes de que los niños reciban una educación formal. Es decir, cuando un niño crece en un hogar donde sus padres le muestran el afecto, el cariño, el amor, los cuidados, las atenciones que necesita y aprende a verbalizar, a expresar sus sentimientos hacia los miembros de su familia, esa persona que ha sido formada en un ambiente familiar de amor y de respeto, difícilmente de adulto puede llegar a ser un humano nocivo.

Con el hecho de contar o que se edite a lo que le llamaron “Atlas de Riesgo” para conocer los lugares difíciles, es una medida mediática. Urge la creación de garantías en atención a la dignidad humana de los periodistas, así como el derecho a la vida, seguridad, protección, libertad de expresión en un marco normativo y jurídico que lo sustente. No más.

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