“A la gente la empobrecen, para que luego voten por quienes la hundieron en la pobreza”.
Papa Francisco
Nada nuevo
En el segundo informe de gobierno: más pan con lo mismo. Al parecer se agota el discurso presidencial ante la falta de buenos resultados en una gran parte de su administración e incluso en sus proyectos estrella: el tren maya, el aeropuerto de Santa Lucía, el programa sembrando vida, etc. Hay dudas y falta de transparencia. En la pandemia, se optó por la inmunidad de rebaño que significa que se muera el que se tenga que morir, gastando lo menos posible y a seguirle.
De nuevo el Ejecutivo habla con inexactitudes, verdades a medias o mentiras enteras, solo por poner un ejemplo: se ufana de ser el segundo mejor presidente del mundo; nada más falso a los ojos del mundo. Cada año el sitio The Hotests Heads of State (http://hottestheadsofstate.com/list/) hace una encuesta en los principales países del mundo, calificando a sus gobernantes por su popularidad, logros, personalidad y prestigio internacional. Así va el ranking de este año:
1.- Pedro Sánchez de España. 2.- Justin Trudeau de Canadá. 3.- Jinme Khesar Namgyel, Bután
4.- Jacinda Arden, Nueva Zelandia. 5.- Emanuel Macron, Francia, 6.- Vladimir Putin, Rusia
7.- Kolinda Graber, Croacia. 8.- Angela Merkel, Alemania 9.- Zuzana Caputova, Eslovakia
10.- Moon Jan In, Corea del Sur.
Esos son los primeros 10 sitios. En el lugar 87 aparece Andrés Manuel López Obrador.
¿Por qué si hay comprobaciones y datos de las mentiras oficiales, el presidente continúa siendo popular? La explicación está en una compleja red de intereses económicos y políticos para el poderoso y en un hábil manejo de la conversación pública, por parte del presidente, para el pueblo bueno, en la que propios y extraños caemos una y otra vez y utilizamos hasta su misma terminología, sus metáforas, sus palabras, sus argumentos y cada vez que lo hacemos, él gana.
Hasta el momento, no existe nadie, persona u organización que haya sido capaz de desarrollar un lenguaje opositor constante y, mucho menos, eficiente. La batalla conceptual se desarrolla de manera intensa, aunque intrascendente en las redes sociales, en las que todos reímos de los memes infinitos y de las frases y formas de protesta de una excelsa creatividad popular. Esas son nuestras pequeñas revanchas al atropello oficial en prácticamente todo, es la protesta popular.
Dejemos de repetir que la oposición no existe; sí existe, quizá no como los grandes analistas están acostumbrados a verla.
Estamos ante un nuevo postulado:
La oposición vive sin grandes mítines, discreta, pero efectiva. Está en la plática familiar y con amigos, en lo cotidiano, en los artículos y columnas de miles de escritores, filósofos y periodistas. La oposición se presenta a veces obvia y otras, discreta. Existe en las voces de los desamparados, de los abandonados, en aquellos que perdieron el privilegio de tener algo de paz en sus vidas, que perdieron el privilegio de tener un empleo. La oposición está en la desesperación de miles de padres que ven cómo sus hijos se consumen por el cáncer ante la indiferencia oficial, la podemos encontrar en las reacciones fuera de proporción de los bots, especialmente después de un error gubernamental. La oposición crece en el alma de miles de doctores, enfermeras y personal de salud que fue abandonado a su suerte, en el miedo de un futuro incierto. Se deja sentir en los miles de millones de dólares de inversiones que han salido del país y en la prácticamente nula llegada de nuevas inversiones productivas. La oposición está en aquellos que tenían un trabajo seguro en el aeropuerto de Texcoco o en la cervecera cerrada por capricho en Mexicali. Está en la decisión de gastar miles de millones para juzgar a expresidentes y no invertir casi nada en llevar agua potable a las comunidades; en los bancos que batallan para recobrar la cartera vencida, de las ya casi 70 mil familias en luto, impotentes, fragmentadas, agobiadas por la enfermedad y la muerte; está en ese empresario que tuvo que cerrar por falta de apoyos, o en aquel que tuvo que pagar mordida para agilizar un trámite cuando le juraron que ya no había corrupción. La oposición se fortalece en aquél que creyó y hoy está desengañado; se nutre de la mentira, de la falta de respeto y groserías de Fernández Noroña y de un congreso servil y veleta, del silencio repentino de Lozoya y del mutis de Pío; y crece con la soberbia de un gobierno ausente de los verdaderos problemas de los mexicanos confusos, divididos, violentados y confundidos. La oposición es un monstruo de millones de cabezas alimentada por la mentira.
Más temprano que tarde, alguien capitalizará todo este descontento, igual que los hicieron quienes hoy gobiernan, la historia es cíclica, hasta que alguien se atreve a cambiarla. Es un secreto a voces que cada vez se escucharan más fuerte: la 4t solamente ha sido un almacén de promesas y de excusas.
¿Por qué somos supersticiosos?
Autor: Pedro Raúl Montoro Martínez Profesor Titular del Departamento de Psicología Básica I, UNED, Madrid, Según he escuchado alguna...
septiembre 13, 2024Ni con el voto 86
Los foros de consulta popular y los parlamentos abiertos fueron una simulación.
septiembre 13, 2024Igualdad de derechos
Alcanzar la justicia plena para el individuo común no resulta sencillo.
septiembre 13, 2024Nuestro muy triste 11 de septiembre
Con este hecho, se cancelará en la práctica la división de poderes en nuestra república, restableciéndose un régimen autoritario,...
septiembre 12, 2024