Suicidio colectivo

Los días pasan y el año ya está a la mitad de su periodo, nos la hemos pasado sorteando a la muerte y aguantando lo...

15 de junio, 2020

Manuel de Jesús Ruiz Nettel

Los días pasan y el año ya está a la mitad de su periodo, nos la hemos pasado sorteando a la muerte y aguantando lo más que hemos podido. Para el presidente Andrés Manuel López Obrador “la gente no puede estar más encerrada” y está promoviendo que la gente salga y que “ejerza su derecho a la libertad” cuando en realidad Andrés Manuel López Obrador está llamando a los mexicanos a su muerte, a cometer suicidio colectivo en aras de su idea personal de libertad.

Mientras tanto, contradictoriamente el dr. López-Gatell dice todo lo contrario “Quédate en casa” y la presión política le pega en el rostro que muestra en cámaras a nivel nacional más preocupado y demacrado, porque dentro de él, sabe la verdadera magnitud de la pandemia.

Ciertamente la pandemia no es culpa del actual gobierno, pero su estrategia social para que el menor número posible de mexicanos se infecte, ha fracasado rotunda y mortalmente. Desde las “puntadas” cómicas del presidente López Obrador en televisión nacional y redes repetidas como verdades que solamente su minoría rapaz las cree fervientemente, hasta las mentiras del dr. López-Gatell en torno a las pruebas COVID-19 y los tapabocas y otros dispositivos de defensa personal, han ocasionado que una gran parte de la población haya creado un pensamiento propio (soberbio): que nada le va a pasar y que el destino es lo que rige si será o no infectado.

“Sabiondos ridículos” que hablan de tal o cual remedio contra el COVID-19, que hablan de tal o cual conspiración mundial o hablan de cómo curarse una vez infectado, para todo tienen una frase y se llenan la boca de tonterías. Poco a poco vemos cómo vamos a vivir de ahora en adelante, porque la gente olvida y olvida rápido, pensando así que todo ya ha pasado, pero la realidad les cae cuando muere algún conocido cercano o algún familiar.

Ahora sí vivimos todos al día, porque cada día será la muestra de vida que Dios Nuestro Señor o cualquier entidad que ustedes quieran, nos da “chance de vivir”. Ahora sí vivimos al día porque tenemos suerte de conservar el trabajo o la entrada de efectivo que mantenga precariamente tu vida, no hay miras al futuro, solamente está el salvar el día y sobrevivir a este virus.

Ayer me enteré, como diariamente lo hago y con mayor frecuencia lo hago por estos días, de la muerte de una persona que conocí, adoradora de Andrés Manuel López obrador, de sus preceptos y por lo mismo de los dichos del dr. López-Gatell.

No le gustaba usar tapabocas, seguía con su ritmo de vida de comida y bebida, para él la pandemia era algo inventado por la derecha para conservar el modelo neoliberal en todo el mundo, andaba por la calle “visitando” los incautos que tenía en la mira para embaucarlos con “créditos y demás artilugios” para ganarse unos pesos y mantener sus antojos diarios de bebida y comida. En fin, la vida se lo cobró, no se cuidó máxime que era diabético descontrolado.

Otros están muriendo, pero la causa de muerte es por “causas” naturales y nunca entran en las estadísticas, como pasa en el municipio de Mazatán (Chiapas), donde diariamente muchos de edad avanzada y “cincuentones” son reportados en Facebook diariamente en un promedio de siete. Lo mismo está comenzando a pasar en el municipio de Suchiate (Chiapas), en la mera frontera con Guatemala, donde se comienzan a reportar también fallecidos por las mismas causas naturales desde los ejidos costeños. En estos lugares, la actividad en las bananeras no se ha detenido ni un solo momento. Ahí entre el agua los cortadores y linieros trabajan arduamente entre el agua estancada entre los bananos en plena producción.

La gente no entiende y escucho las “tonterías” del presidente López Obrador sobre “salir, pero con precaución” y lo ha hecho en grandes cantidades. Han salido de nuevo para andar aún más intransigentes que nunca, más prepotentes que nunca porque según ellos han sobrevivido, cuando en realidad han salido a un mundo con un virus que nos mantiene al filo de la “Ruleta Rusa”.

Dale Gracias a Dios Nuestro Señor si sobrevives el día.

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