De Frontera a Frontera: En Guardia

Después de un tiempo de silencio noticioso, vuelvo a comunicarme con ustedes, los factores muchos, preocupantes, pero para eso nací, para ser periodista y no...

8 de marzo, 2019

Manuel de Jesús Ruiz Nettel

Después de un tiempo de silencio noticioso, vuelvo a comunicarme con ustedes, los factores muchos, preocupantes, pero para eso nací, para ser periodista y no quedarme callado.

Dicho esto, inicio con el tema que a todos nos preocupa, que nos mantiene con el sueño ligero y con los nervios de punta… la situación de violencia extrema que vivimos y que nos crea mucha inseguridad a todos nosotros.

Durante un tiempo Tapachula se había mantenido al margen de todo el problema de inseguridad y sus facetas, que afectan a todo el país.

12 años nos duró el gusto de la tranquilidad, hasta que las Caravanas pasaron por nuestra ciudad y la costa Chiapaneca, que dejó a muchos hondureños y salvadoreños varados en nuestra ciudad y con estatus de refugiados.

Este incremento de extranjeros legales e ilegales que están en Tapachula y la costa chiapaneca, han creado un fenómeno de violencia extrema, ya que los problemas que traían las bandas MS13 y la Barrios 18 en sus respectivos países, se ha arraigado rápidamente en la ciudad y los municipios aledaños.

Dicho esto, los asaltos violentos en las calles se han incrementado, los asesinatos desalmados también, sin olvidar las aberrantes violaciones de niños y niñas inocentes que la ciudadanía Tapachulteca no se puede explicar, aunque sea “un pueblo sabio” y así en todos los medios Tapachultecos y algunos nacionales han hecho eco de la escalada violenta que ha invadido a Tapachula de manera exagerada este año.

Muchos culpan a la actual administración municipal, pero son los pocos que perdieron las elecciones pasadas y que saben las causas de la violencia extrema, pero protestan para saciar sus intereses personales.

Como observador de los diferentes escenarios que se dan en la ciudad, puedo decirles que las autoridades están haciendo lo necesario con los pocos recursos que se tienen. Tanto el Gobierno Estatal que dirige el Sr. Gobernador Rutilio Escandón Cadena como el Presidente Municipal de Tapachula están haciendo lo concerniente para combatir en el poco ámbito que les permite el Sistema Penal Acusatorio que heredaron del Gobierno Peñista les permite, donde las víctimas, las fuerzas policiales y los militares son los que tienen más que perder, mientras que el delincuente lleva las de ganar.

Estos son los tiempos que nos tocó vivir, porque aunado a esta situación, la ciudadanía en su totalidad está desunida y confrontada por el simple hecho de que todos se sienten con derecho. Expresando en las “benditas” redes sociales su descontento hacia las autoridades municipales y estatales.

Ante todo, esto… la Guardia Nacional es bien vista por al menos 60% de los mexicanos. Del 40% restante, un 20% se resiste a que se vaya a aprobar como lo mandó el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el otro 20% de los mexicanos se expresan en el sentido de que es insuficiente la Guardia Nacional como se plantea.

Para ese 20% la Guardia Nacional nace cortita, porque lo ideal debería haber sido que los policías municipales y las policías del estado se unieran a los policías militares, los policías navales y los policías federales y de la gendarmería nacional. Así, las labores de defensa de la ciudadanía sería hecha por un bloque compacto que cubra todas las tareas que tiene intrínsecamente incluidas la Seguridad, tanto en prevención como imposición.

De mientras… ¡Sálvense quien pueda!

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