De acuerdo con la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI), la industria petrolera privada ha invertido más de 11 mil millones de dólares en México y existen compromisos contractuales por más de 36 mil millones de dólares en planes aprobados por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Entre el 11 de diciembre del 2014, cuando se lanzó la primera convocatoria para una licitación petrolera (la histórica Ronda Uno), y el 27 de marzo del 2018, cuando se adjudicaron 16 contratos de la primera licitación de la Ronda 3, México logró un modelo de licitaciones exitoso. Este modelo energético mexicano logró atraer a las empresas más importantes del mundo, con licitaciones basadas en las mejores prácticas internacionales de transparencia y competitividad.
La primera fase de la Ronda 3 fue la última licitación que se celebró. Había dos licitaciones más programadas, pero se cancelaron con la entrada del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Con base en datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y también con base a lo que se informó en noviembre del 2019 en el documento “Vamos Bien: resultados y prospectivas de los contratos petroleros” presentado ante el Senado de la República, la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (AMEXHI) destaca lo siguiente:
Las empresas operadoras en México han superado récords en cuanto a tiempos de ejecución de planes de exploración y producción, desde el otorgamiento del contrato hasta la perforación de los pozos. A pesar de que sólo 29 de los 111 contratos firmados con el Estado Mexicano se encuentran en etapa de producción, la gran mayoría se encuentran en fase de exploración, los avances son muy significativos:
- La producción por contratos operados por empresas privadas al 1 de diciembre del 2019 es de 47 mil barriles diarios de petróleo.
- Los operadores privados han perforado 67 pozos y 647 más se encuentran comprometidos en planes aprobados por la CNH.
- Hacia el año 2024 se prevé una producción estimada de 280 mil barriles diarios de petróleo.
Además, gracias a los 111 contratos petroleros firmados, México ha logrado:
- Descubrir nuevos yacimientos o redimensionar los ya existentes, asegurando que existan más recursos y reservas de los estimados inicialmente.
- Pagos al Fondo Mexicano del Petróleo por más de mil 900 millones de dólares por contraprestaciones y transferencias a Pemex por mil 671 millones de dólares.
- Generar en los últimos años más del doble de información del subsuelo mexicano de la que se había obtenido en toda la historia de nuestro país.
Por último, hay que señalar que la industria petrolera privada ha dado muestras de estar lista para seguir invirtiendo en México, tanto en los contratos vigentes, como en oportunidades derivadas de nuevas rondas petroleras. El modelo ha sido exitoso en la medida en que el Estado Mexicano no ha asumido riesgos. Al contrario, gana las contraprestaciones que se generan. Es tiempo que se reanuden nuevamente las licitaciones petroleras que en el año 2018 se cancelaron.
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