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Los hilos detrás de Isis

Todo el mundo, sobre todo a partir de los salvajes ataques en varios puntos de París hace algunos días, conoce o por lo menos ha...

27 de noviembre, 2015

Joaquín Vázquez

Todo el mundo, sobre todo a partir de los salvajes ataques en varios puntos de París hace algunos días, conoce o por lo menos ha oído habar de Isis, o Estado Islámico, organización terrorista originada a partir de la caída del régimen de Sadam Hussein en Irak a principios de la década pasada, como un brazo más de Al Qaeda que, por lo menos hasta donde se sabe, estaba destinado a hacer frente a la ocupación Estadunidense en dicho país. Posterior a la salida de las tropas norteamericanas, el grupo cobró más fuerza y se extendió principalmente a Siria y en segunda instancia a países con gobiernos inestables como Libia y Egipto. Además, diversos grupúsculos extremistas de Medio Oriente, África, Asia e incluso Europa, y civiles confundidos (o no), han engrosado de manera importante las filas de Estado Islámico, sirviendo en muchos casos como carne de cañón en diversos ataques terroristas.

Su crueldad y barbarie en contra de otros grupos religiosos y/o étnicos, dada su filosofía ultra xenófoba que considera a cualquiera que no profese de manera estricta sus creencias como un infiel que merece ser destruido, la devastación de ruinas milenarias, así como museos y otros tesoros históricos, patrimonios invaluables de la humanidad sin ningún miramiento y su retórica retadora y pendenciera contra las potencias internacionales, han hecho de Isis uno de los grupos extremistas más odiados por el mundo occidental.

Pero analizando un poco el crecimiento casi impune de este grupo fundamentalista, me surgen ciertas preguntas de las que no he encontrado respuestas claras o cuando menos lógicas, las cuales planteo a continuación:

La primera y quizá la más importante de las preguntas que me hago es: ¿Quién o quienes financian a Isis?

En un principio se decía que el grupo se autofinanciaba gracias a los saqueos realizados a los bancos iraquíes, secuestros perpetrados contra personajes pudientes de todos los ámbitos y demás ilícitos cometidos en contra del pueblo iraquí. Esto es creíble si el grupo extremista se hubiera quedado del tamaño de una guerrilla como tantas otras, sin embargo en la actualidad se calcula que sus finanzas alcanzan varios miles de dólares, presuntamente gracias al contrabando de petróleo de los yacimientos por ellos controlados, lo que me lleva a la siguiente pregunta:

¿Quién compra el petróleo de Isis?

Al parecer, uno de sus clientes principales sería el gobierno turco, que fingiendo demencia y haciéndose que la virgen le habla (perdón, Alá) está haciendo muy buen negocio comprando el petróleo de contrabando a precios casi de regalo. Sin embargo, es difícil pensar que solamente Turquía se beneficie del petróleo de Isis. Por lo tanto:

¿Quiénes más colaboran o apoyan a Isis?

Quizá no se trate de colaborar de manera directa, pero el hecho de hacerse de la vista gorda es en sí una forma de colaboración pasiva, y aquí mencionará yo a los Estados Unidos, país que a la vista del mundo se promulga furiosamente en contra del grupo radical, inclusive con bombardeos a presuntos puntos clave donde se esconden sus líderes, pero que en la realidad no le han hecho grandes daños. Incluso me ha sorprendido su tibia respuesta posterior a los ataques parisinos. ¿Será que a río revuelto, ganancia de pescadores?

Arabia Saudita es otro de los países que tampoco ha dicho o hecho nada en referencia a Isis, y las malas lenguas sostienen que los saudíes contribuyen por debajo del agua su mantenimiento, pues ven con muy buenos ojos que este grupo sunita se encargue de otras sectas rivales, principalmente de los chiítas.

Sin embargo lo que más me sorprende es el poco interés que Isis ha puesto en Israel, que teóricamente debería ser su rival acérrimo por excelencia, y en su lugar ha preferido ejecutar acciones terroristas en los países contiguos o incluso en Europa. Aunque no soy partidario de las teorías de conspiración, si me llaman mucho la atención esos “detalles” raros que han salido a la luz con respecto a los ataques de París, y remontándome más atrás, en el ataque al diario satírico Charlie Hebdo, y por supuesto, el famoso 9/11. Pero de eso, si me lo permiten, hablaré en otra ocasión. Por lo pronto, me formulo la última pregunta:

¿Quiénes son los reales beneficiarios con la existencia de Isis?

Ojalá ustedes me la respondan.

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