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La visión de hoy: Nuestros reyecillos los políticos

Lo sucedido en estas semanas nos confirma nuevamente que la clase política del país está muy lejana de la realidad del ciudadano común, de sus supuestos representantes.

1 de mayo, 2015

Francisco Javier Aguilar Díaz

Lo sucedido en estas semanas nos confirma nuevamente que la clase política del país está muy lejana de la realidad del ciudadano común, de sus supuestos representantes. Para ellos la vida de lujos, despilfarros y banalidades no tiene fin y además, la ven como lo más normal.

Veamos tan solo el caso del ex titular de la Conagua, David Korenfeld, quien fue captado por un vecino del residencial que habita cuando abordaba junto a su familia, un helicóptero de la dependencia para trasladarse al aeropuerto del DF con todo y maletas para de ahí irse a esquiar a un destino internacional. Luego de la filtración de las fotos el hombre se justificó afirmando “era una emergencia médica” y que por ello hizo lo que todo ciudadano común haría. ¿Tomar un taxi? ¡No! Llamar al helicóptero de la dependencia que dirigía para que lo llevara a tomar su vuelo junto a su familia. Cuando ya no pudo cubrirlo más, Korenfeld dijo no entender por qué tanto escándalo, que total, ya había pagado lo correspondiente al uso del aparato, que no veía ningún comportamiento inadecuado y menos aún razón para renunciar. Lo vio como peccata minuta pues. Y ya que no tuvo la vergüenza de renunciar, ¡lo renunciaron! Pero además vayan ustedes a saber cuántas veces el señor hizo uso del helicóptero y otros bienes de la CONAGUA para asuntos personales. De este nos enteramos, pero quien sabe de cuantos no. Seguramente sigue sin entender por qué se quedó sin trabajo, para él ese abuso fue algo normal. En su mentalidad y la de muchos “servidores”, Director de algo, dueño de todo lo que conforma ese algo.

Pero nuestra izquierda no se queda atrás, esa izquierda mexicana tan exquisita, que habla con la izquierda y se sirve con la derecha y que recién había criticado el affaire Korenfeld. Resulta que el presidente del PRD, Carlos Navarrete, encontró mucho tráfico en la carretera cuando se dirigía a Zitácuaro para estar presente en el arranque de campaña del candidato de su partido a la gubernatura de Michoacán, Silviano Aureoles, así que igualmente, hizo lo que cualquier persona normal haría… ¡pidió un helicóptero para que lo recogiera en Toluca y lo llevara a su destino! El costo del viajecito de 25 minutos fue de 54 mil pesos. Obvio, al cuestionarle si le parecía un gasto superfluo contestó tajante que no, además ¡lo pagó el partido! Claro que se olvida de algo o cree que las personas lo ignoran. ¿Quién financia al partido? Ellos no, ¿verdad? ¡Nuestros impuestos! Y no solo Navarrete llegó en helicóptero a ese evento, también Graco Ramírez, gobernador de Morelos –que dijo que pagó el viaje de su bolsa-, el gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, el conocido mapache político y ex priísta, José Guadarrama, así como el medio hermano del candidato, quienes se vieron titubeantes en sus justificaciones y en la explicación del dinero que pagó sus taxis aéreos.

Ahora bien, estamos viendo el inicio de las campañas –también financiadas por nosotros- donde los candidatos, lejos de priorizar sus propuestas, se han dedicado a tirarse lodo por un lado y a hacer el ridículo por el otro. Entre acusaciones de que unos usan relojes carísimos que su ingreso no justifica y otros construyeron presas ilegales en su propiedad, tenemos a un candidato como Diego Leyva, bailando tribal con todo y botas de punta larguísima y cantando –por cierto, ya lo demandaron por usar la canción sin permiso- y a otro como Cuauhtémoc Blanco, emulando a Rocky Balboa en versión región 4, otros más hablando a sus potenciales electores como los grandes amigos presumiendo todo lo que ha hecho por su región sin que uno sepa quién es el cuate del anuncio. Y las propuestas, nada más no llegan.

Mientras tanto, todos los chapulines dejaron sus cargos sin concluir sus periodo, porque les urge agarrar hueso, ya saben, para ellos vivir fuera del erario es vivir en el error, porque ¡en una de esas tendrían que trabajar! ¿Qué no habrá manera de decir “a usted se le eligió como diputado, delegado o presidente municipal por 3 años y no puede dejar su cargo hasta concluir el periodo establecido a menos que se esté muriendo”? Pero como los legisladores son quienes hacen las leyes y son los primeros chapulines que brincan usualmente de una cámara a otra, ¡qué esperanzas! Además, como en las monarquías, a la herencia del puesto solo familiares y cercanos.

Y es que ¿quién no quisiera ser legislador, con tantas prebendas que te permiten estar en otro nivel de vida, lejos de limitaciones? Así sucede con Carlos Romero Deschamps, eterno líder del sindicato de Pemex, conocido por su vida familiar de lujo máximo, quien en plena sesión –se supone que trabajando- está revisando un catálogo de yates, un lujo que cualquier mexicano se puede dar, o como Layda Sansores, quien devengaba su más que jugoso sueldo jugando en red con su nieto desde la iPad que se le dio para desempeñar sus funciones parlamentarias, que no creo que sean los juegos en línea.

Podríamos complementar con la imagen superflua de la primera dama, las propuestas locas de AMLO y el cinismo del multimultado PVEM, pero bueno, creo que merecían su propio espacio en otra oportunidad. Mientras tanto, sintámonos afortunados de contar con estos representantes y líderes de nuestra política… después de todo, cada pueblo tiene lo que se merece, ¿no creen?

Otro vistazo.

Los viejos criterios y costumbres del PRI no cambian y lo podemos ver en la designación del nuevo titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte. Se trata del ex comisionado de Seguridad y Desarrollo Integral en Michoacán, Alfredo Castillo, quién es ¡abogado! Así es, un abogado dirigirá los destinos del deporte nacional. No es de sorprender, hay que recordar que en poco más de dos años y medio este es su cuarto puesto igual de disímbolo. Luego de la pifia en el caso Paulette y ya en este sexenio, primero llegó a la PGR como Subprocurador, después fue el titular de la Procuraduría Federal del Consumidor, luego estuvo en Michoacán, en un paso tristemente célebre y hoy, está en la CONADE. ¿Cuál su experiencia en el campo deportivo? ¡Ya lo dijo! ¡Le gusta el tenis! Chamba para los cuates pues.

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