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165 200 razones para no creerle al presidente López Obrador

8 de febrero, 2021

La vez más reciente en que el presidente Andrés Manuel López Obrador se mostró confiado de que México va bien y estará mejor fue el jueves pasado, cuando por medio de un video anunció que esa mañana le hicieron la prueba de antígeno de COVID y salió negativo. Añadió: “todavía tengo que esperar unos días más pero ya estoy bien de salud. Me estoy recuperando del COVID”.
Durante su mensaje dijo, entre otras cosas, que “debemos de seguir adelante… Yo tengo mucha fe… la esperanza es una fuerza muy poderosa. Y tenemos condiciones inmejorables para salir adelante… ya estamos consiguiendo la vacuna contra el Covid… este mes vamos a vacunar masivamente, este mes de febrero, lo mismo marzo, abril, vamos a vacunar primero a los ancianos, a los adultos mayores… y luego al resto de la población. Ya tenemos hechos los contratos y la semana próxima empiezan a llegar vacunas en buena cantidad; dosis suficientes para que inicie la campaña nacional de vacunación. Esto nos va a dar mucha seguridad, nos va a proteger contra esta terrible pandemia. Entonces vamos a salir adelante en lo relacionado con la crisis sanitaria…tengamos fe de que ya no nos vamos a enfermar…”.
Si lo que dijo el jueves Andrés Manuel suena familiar es que lo es, porque ya en otras ocasiones nos ha dicho lo mismo sin que se cumplan sus promesas.
Aseguró que “ya estamos consiguiendo la vacuna” cuando desde hace meses tanto él, como el secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard, los dos charlatanes que están al frente de la Secretaría de Salud y hasta el secretario de Hacienda Arturo Herrera anunciaron con bombo y platillo que ya estaban conseguidas.
No puedo olvidar como, el 14 de octubre pasado, durante la conferencia presidencial matutina de esa mañana, ante el presidente, Ebrard y los dos charlatanes, Herrera dijo que “Durante el mes de diciembre se podría vacunar hasta 2.6 millones de personas, después 3.5 millones de personas adicionales entre enero y febrero y 11 millones en marzo, de tal forma que hasta el primer trimestre del próximo año se estarían vacunando más o menos alrededor de 20 millones”.
Herrera no hablo ese día al tanteo, lo que dijo se basó en lo que a él le informaron AMLO, Ebrard y los dos médicos. Tanto, que ninguno de ellos lo contradijo. Ese día, esa fue la promesa y el compromiso del gobierno de la 4T.
Promesa fallida y compromiso incumplido, porque hasta ayer solo se habían aplicado 710 198 dosis, la mayoría de ellos a trabajadores del sector público que atienden a enfermos de Covid. Si tomamos en cuenta que hay 1.5 millones de estos trabajadores, ni la mitad de ellos ha recibido la primera de las dos dosis que requieren para lograr la inmunidad del 94%.
En total se han aplicado 0.56 dosis por cada 100 personas, 0.5% de la población ya recibió la primera dosis y solo el 0.1% la segunda. Falta que poco más de 90.35 millones de personas reciban las dosis que le correspondan dependiendo de la vacuna, pero que en casi todos los casos serán dos. Es decir unas 180.7 millones de dosis.
Yo no comparto ni el optimismo, ni la fe ni la esperanza del presidente. Tampoco le creo. Podría darle 165 200 razones para no creerle, que es el número oficial de personas que hasta ayer había matado el coronavirus.
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