Entrevista Verónica del Castillo – Primera Parte

¿Quién es Verónica del Castillo?

9 de junio, 2017

Claudia Blix

¿Quién es Verónica del Castillo?

Verónica del Castillo es una mujer que ha tratado de sacar lo mejor de ella en circunstancias adversas, he aprendido lo que es la resiliencia porque he pasado situaciones muy difíciles, yo diría que estoy viviendo horas extras. Soy madre sobre todo, conferencista, periodista, escritora y ayuda adicta.

¿Por qué dices que estás viviendo horas extras?

Una vez estuve en el hospital con convulsiones por un medicamento donde no me dijeron que no podía tomar alcohol y me tomé un caballito de tequila.

Otro día trataron de secuestrarme en Acapulco de chica, era muy irresponsable salía a andar en moto sin casco y con minifalda para que nos empezaran a corretear los policías.

Era muy responsable en la escuela porque siempre estuve becada pero siempre sacaba cero en conducta.

¿Cómo fue vivir con un papá actor, Eric del Castillo?

Para mí fue divertido y apasionante, aunque difícil, mi mamá estaba algo enojada porque ella tenía que ver por nuestra educación más que mi papá porque trabajaba mucho, no estaba ahí físicamente, se la pasaba viajando, a veces yo no quería ser la rara del salón. Kate y yo fuimos las más pobres de las escuelas en las que estuvimos, mi mamá tenía que hacernos la ropa. Ser actor es una profesión muy cruel donde no siempre tienes trabajo, por las becas estábamos en escuelas de niñas ricas, pero sin serlo. Pero mi papá con su trabajo se fue ganando lo que es hoy en día. Nos dieron una buena educación porque nos mantuvieron siempre como muy ubicadas. Estudiamos en el Ciudad de México y en el Sierra Nevada que son escuelas para gente rica.

Mi mamá tuvo un noviazgo muy largo antes de conocer a mi papá, duró como siete años, llegó mi papá y se acabó todo, mi papá era repudiado por la familia de mi mamá, ella era una niña fresa de familia bien, conservadora y acomodada, y cómo se iba a casar con un actor pobre, divorciado y con un hijo – ésto era lo peor para aquella época –, mi abuelo no quería a mi papá al principio.

Se las vieron negras los primeros años de casados, pero mi mamá tuvo la inteligencia de sacar adelante la familia ya que mi papá tenía una vida un poco desordenada.

¿A ti nunca te dio por ser actriz?

Yo me quite el “gusanito” haciendo varias películas, hice como dos o tres video homes, y estaba más preocupada por las clases que estaba perdiendo en la universidad que por la película. Estaba muy atractivo hacer esas películas, pero si yo no estaba contenta, es que no tenía la vocación.

Estudié en la Universidad del Nuevo Mundo la carrera de Ciencias y técnicas de la información.

¿Qué tanto estabas clara en tu vocación?

Pues no la tuve muy clara porque estaba entre Psicología y Comunicación, yo soy la persona más indecisa del mundo.

Pero la vida me ayudó porque en la Universidad del Nuevo Mundo no había Psicología, por otro lado leo mucho de libros de autoayuda, y uso mucho la psicología en mis entrevistas para ver por dónde puedo tener reacción de mis entrevistados.

¿Cuál de tus entrevistas han sido tus favoritas?

Con Ricardo Arjona, a mí la verdad me encanta físicamente y fue una de las entrevistas más difíciles que tuve que hacer, porque me tiró la onda en plena entrevista, me sacó de mi centro y de mi concentración, fue muy difícil ser objetiva en esa entrevista; y con Alonso Lujambio, el ex Secretario de Educación, el que murió, me hizo un recorrido por un pasaje secreto que hay en su oficina, son personas con las que generé mucha empatía, puedes generar empatía hasta con un criminal.

Cuéntame de alguna vez que hayas entrevistado a un criminal.

Fui a una prisión y entrevisté a tres mujeres, pero ellas eran inocentes, pobres e indígenas. Estaban ahí como “pagadoras”, como dicen los policías, porque muchas veces ellos tienen que cumplir con cierta cuota, y gracias a este reportaje que fue transmitido en el Senado de la República, salieron libres otras indígenas, quizás es el trabajo más importante que he hecho por los efectos que produjo este reportaje.

Cubriste también para Primer Impacto el funeral de Michael Jackson. Cuéntame.

Es interesante cubrir este tipo de eventos por la personalidad que era Michael Jackson.

¿Con qué te quedaste de Michael Jackson?

Con lo que yo me quedo es que fue un personaje muy obscuro, muy enfermo, sí abuso de menores, pero había muchos testigos pagados por él a favor, testigos que fueron comprados y que muchos eran padres de los abusados.

Cuéntame cómo ha sido tu experiencia del problema que tiene tu hermana Kate por haber tenido contacto con “el Chapo” Guzmán.

La Chaponovela me ha traído noches de insomnio y de paranoia, de sentirme que me están vigilando, Kate pecó de naïf, de inocente y de intrépida, puso sin pensar en riesgo a su familia y su vida propia por el dios fama, ya que primero está su carrera antes que nada, para mí primero está mi familia. Tenemos un choque ahí, pero nos tenemos que amar y respetar a pesar de nuestras diferencias.

A veces pienso que mi papá y mi hermana como son actores, viven en un mundo de ficción y yo al ser periodista, vivo en un mundo de demasiada realidad, piensan que soy una dramática y una exagerada, finalmente vivo más en el México real que ellos.

Las investigaciones no deberían de perder el tiempo con los inocentes como Kate, deberían de ir tras los criminales que están sueltos. Aparte ella no hizo nada fuera de la ley.

A mí, no me quisieron decir nada en mi familia, yo me enteré por la prensa y me enojé con ellos.

(CONTINUARÁ)

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