¿Quién financia los ataques al Ejército en sus cuarteles?

Provocación burda, ¿buscan más víctimas? ¿Otro tigre suelto?

27 de septiembre, 2018

Carlos Aguila Franco

Provocación burda, ¿buscan más víctimas? ¿Otro tigre suelto?

En los últimos días se han suscitado ataques a cuarteles del Ejército Mexicano en el estado de Guerrero, lo cual preocupa y mucho, dado que esos ataques, que no son los únicos en un periodo de de cuatro años, pareciera que lo que buscan es que ante esa burda provocación, los militares en legítima defensa respondan y entonces si habrá la respuesta inmediata de ONGS, de las nefastas Comisiones de Derechos Humanos, para defender a las “pobres víctimas” de los represores militares. Porque mientras no haya heridos o muertos, no aparecen y mucho menos cuestionan lo que estos vándalos, delincuentes llevan a cabo.

Y les llamo vándalos, delincuentes así con toda la extensión de la palabra, por los actos que cometen y porque andan encapuchados. Quien se tapa la cara para cometer un delito es un delincuente y además cobarde en no mostrar el rostro.

Muchas dudas surgen ante lo que ha venido aconteciendo particularmente en el estado de Guerrero con estos ataques y en la ciudad de México, derivado de los sucesos acontecidos en Iguala, Guerrero con los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, y que este miércoles cumplieron 4 años. Las dudas son: ¿quién financia estos ataques al ejército? Porque para hacer bombas molotov, comprar cohetones, transportarse Se gasta y mucho. ¿Qué buscan con provocar al Ejército.

Asimismo, ¿Quién financia a los “supuestos” padres de los 43 desaparecidos?, y digo “supuestos” porque en ningún momento he visto en ningún medio que se acrediten como tales. ¿Cuatro años estar en la ciudad de México, sin trabajar, no tienen familia que atender y mantener? ¿Permanecer en la Ciudad de México, las movilizaciones que realizan en todas partes y más en la ciudad de México, cuestan, de dónde sale el dinero?

Porque es obvio que se requiere mucho dinero para durante 4 años estar con estos ataques y movilizaciones.

Importante en cuanto a los ataques a cuarteles del Ejército Mexicano hacer una rápida recopilación de lo que han hecho estos “supuestos” estudiantes y padres de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa.

19 de febrero del 2015, Chilpancingo, Gro.

Alrededor de 200 estudiantes atacaron con bombas molotov las instalaciones del 35 Batallón de Infantería del Ejército en Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, en protesta por la desaparición de 43 de sus compañeros el pasado 26 de septiembre. Los alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa agredieron las instalaciones castrenses en el marco de la conmemoración del 102 aniversario del Ejército mexicano sin que se registraran heridos. “Nos faltan 43”, escribieron los jóvenes en la fachada del batallón ubicado en Chilpancingo, a donde llegaron con palos y machetes en cuatro autobuses procedentes de Normal, ubicada en el barrio de Ayotzinapa, en el municipio de Tixtla.

El hecho ocurrió por la celebración del día del Ejército en el Campo Militar Marte de la capital mexicana, luego de que el presidente Enrique Peña Nieto afirmara que la “honorabilidad de las Fuerzas Armadas está por encima de cualquier sospecha o duda”.

Los familiares de los estudiantes desaparecidos piden que se investigue el papel de las Fuerzas Armadas en los hechos violentos del 26 de septiembre en Iguala, en los que seis personas murieron y otras 25 resultaron heridas a manos de policías locales.

15 de diciembre del 2016, Chilpancingo, Gro.

Estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y padres de los 43 alumnos desaparecidos en Iguala en septiembre de 2014 lanzaron petardos, cohetones y bombas molotov contra las instalaciones del 50 batallón de infantería, ubicado a un costado de la Autopista del Sol México Acapulco, en esta capital. “¡Devuelvan a nuestros compañeros, ustedes saben dónde están!”, gritaron los normalistas a los militares, mientras los padres exigían: “¡devuélvannos a nuestros hijos!” Al filo de las 14:50 horas, los inconformes lanzaron cocteles molotov que afectaron al menos tres vehículos que se hallaban en el interior del cuartel, cuyos medallones quedaron destrozados.

La jornada de lucha, como la definió el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, empezó poco después del mediodía con la toma de la caseta de cobro de Palo Blanco por contingentes de la Normal de Ayotzinapa y padres de los 43 jóvenes desaparecidos.

23 de septiembre de 2017, Iguala Gro.

Padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos acompañados de estudiantes lanzaron cohetones y piedras al 27 Batallón de Infantería en Iguala, para exigir que el Ejército les diga en dónde están sus hijos y se investigue su actuación en los ataques de la noche del 26 de septiembre de 2014.

La protesta se llevó a cabo como parte de la Jornada Nacional de Lucha por Ayotzinapa, comenzó cerca de las 10 de la mañana y participaron unos 200 manifestantes, quienes aseguraron que el Ejército sabe dónde están los 43 normalistas desaparecidos y exigieron “¡entréguenlos!”, ante el acceso principal del cuartel militar.

El vocero de los padres, Felipe de la Cruz señaló en el lugar que se debe “investigar la responsabilidad de los militares, sabemos a ciencia cierta que participaron, y hoy vemos cómo el disimulo sigue igual a casi tres años, es por eso que los padres de familia nos encontramos en este batallón que forma parte de este crimen que fue cometido el 26 y 27 de septiembre de 2014”.

A los padres los acompañaron integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM), que viajaban en 10 camiones con los cuales bloquearon el periférico Oriente, apoyaron la manifestación gritando consignas contra el Ejército e intentaron abrir el portón de acceso al batallón. Los primeros en bajar a la puerta del batallón fueron los padres y familiares de los 43 normalistas, que constantemente culpaban de la desaparición de sus hijos al Ejército.

Hicieron pintas en el acceso principal en las que se leyó “+43”, en referencia al número de estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos, y lanzaron un cohete a un cajero que está al interior del cuartel y le reventó los vidrios, justo en la entrada.

20-septiembre-2018-Iguala, Gro.

A unos días de conmemorar cuatro años de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, presuntos normalista protestan con un ataque en las instalaciones del 27 Batallón de Infantería en Iguala. El ataque de protesta inició hace un par de horas con la participación de presuntos estudiantes y supuestos familiares de las víctimas de los hechos de septiembre de 2014.

Como parte de las actividades programadas para conmemorar el cuarto aniversario de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, estudiantes de ese plantel, así como integrantes del Frente Único de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) y de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECS), se trasladaron a Iguala para movilizarse y exigir la presentación con vida de sus compañeros.

En la protesta participaron cerca de 500 estudiantes, quienes llegaron a bordo de 13 autobuses. De inmediato se dirigieron al cuartel militar para realizar un mitin, en el que señalaron al Ejército de haber participado en la desaparición de los 43 normalistas, ocurrida en septiembre de 2014.

Tras lanzar varias consignas en contra de los militares, los estudiantes realizaron pintas en la fachada del cuartel, y arrojaron bombas molotov y pertardos. También incendiaron un cajero automático que se encuentra en el acceso principal del 27 Batallón.

23-septiembre-2018-Chilpancingo, Gro.

Estudiantes de Ayotzinapa que demandan la presentación con vida de los normalistas desaparecidos hace 4 años, atacaron las instalaciones de la 35/a Zona Militar en Chilpancingo, Bombas molotov, piedras y cohetones fue lo que ocuparon los normalistas para atacar el cuartel militar.

Previo a los ataques marcharon desde la zona norte de Chilpancingo, lanzando consignas en contra del gobierno federal por no tener resultados claros pese a tener más de 100 personas detenidas por la PGR. La zona militar permaneció cerrada.

25 de septiembre de 2018, Iguala, Gro

300 alumnos de normales rurales del país integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) marcharon en Igual, hicieron pintas en la 35 Zona Militar a la que le arrojaron cohetes y bombas molotov. Al exigir la presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa hace 4 años, denunciaron que el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero fue quien los desapareció.

La protesta comenzó al norte de la ciudad a las 5 de la tarde con una manta al frente que decía, “Ángel Aguirre Rivero, asesino, no mereces un cargo político, mereces cárcel y castigo”. En el mitin político en la explanada de la plaza Primer Congreso de Anáhuac, un normalista de Ayotzinapa denunció que “salimos a las calles a decir que no nos cansamos, que somos el aliento de los padres de los estudiantes que Ángel Aguirre y sus secuaces desaparecieron”.

Alrededor del mitin se vio a cientos de personas, pero sólo algunas estuvieron atentas al mensaje de los estudiantes. Unas pasaron de largo, muchas se mantuvieron alrededor del Zócalo donde la banda de música del Ayuntamiento tocó a unos 20 metros la protesta estudiantil. A su paso por la ciudad algunos jóvenes con playeras en la cabeza para cubrirse el rostro hicieron pintas en las fachadas de edificios de públicos y de gobierno.

Insisto en preguntar: ¿Qué buscan provocando al Ejército y cometiendo delitos?, ¿Quién los financia, tanto a los estudiantes como a los “supuestos padres”? ¿Seguirán cometiendo delitos sin que se les apliquen las leyes? ¿Impunidad para ellos? Usted que piensa estimado lector.

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