"You may say that I am a dreamer…but I am not the only one." Imagine, John Lennon
Es un personaje extraordinario, ex presidente de un país sudamericano, actualmente tiene 80 años y vive en una casa-pequeña granja, cuando era presidente conducía su propio automóvil, un VW de 1987 con el cual solía dar aventón a quien se lo pedía. Desde que tomó posesión del cargo anunció que donaría el 90% de su salario a diversas causas sociales, especialmente el financiamiento de casas habitación a los más desprotegidos, así lo hizo durante todo su mandato. Cuando tuvo la oportunidad, convenció a las autoridades de cancelar la compra de un avión presidencial austero y en su lugar autorizó la compra de un helicóptero que siempre estuvo al servicio de las urgencias médicas y los servicios sociales.1,2
No, no es una falacia ni una exageración, el extraordinario personaje existe, se trata de José Mujica ex presidente de Uruguay (Marzo 2010 – Marzo 2015), quien vive con su esposa Lucia Topolansky en las afueras de Montevideo en una pequeña casa-granja donde no se sabe dónde empieza o termina una o la otra. El jardín no existe, las hierbas han crecido por doquier, solo sobresalen algunas macetas que suelen marcar el camino al interior de la construcción. Es una habitación simple, no muy iluminada con muebles viejos, pero muy cómodos. Existen libros amontonados por doquiera y un gran librero junto a la pared donde no hay cabida para otro libro más. Varias fotografías decoran las paredes, junto al librero hay un escritorio con pilas de papeles, esperando revisión.
José Mujica y su esposa solo tienen la compañía de una perra que tiene tres patas, no tienen sirvientes, así es que ambos se encargan de los quehaceres domésticos y resuelven sus asuntos más inmediatos. Ahí en esa casa es donde él recibió a los reporteros del Economist para realizar una entrevista en Agosto del 2014.3 Los aspectos más relevantes de dicha conversación se presentan a continuación, el texto en itálicas refleja la versión original del ex presidente.
José Mujica era un ciudadano ejemplar, hasta que se estableció la tiranía militar en el poder, eran los finales de los 60’s e inicios de los 70’s cuando él se afilio al grupo guerrillero Tupamaros que robaba bancos, secuestraba empresarios y políticos para cobrar rescates, asaltaban los negocios de dueños de dudosa reputación. Sin embargo, la organización era eminentemente social, sin afanes de lucro personal. Repartían el dinero entre los pobres o compraban comida para distribuirla en forma gratuita. José Mujica fue subiendo de rango hasta convertirse en uno de los líderes de la organización, fue tiroteado 6 veces y finalmente fue aprehendido y torturado por mucho tiempo, duró 14 años preso, 7 de ellos en incomunicación total.
La conversación con los reporteros fue muy fluida, preguntas y respuestas muy específicas y sumamente ordenadas, lo más trascendente durante su mandato fue:
- Aumentó los salarios y las prestaciones a los trabajadores más desprotegidos, disminuyó sensiblemente el desempleo.
- Legalizó el aborto antes de los tres meses de embarazo
- Legalizó los matrimonios entre homosexuales
- Concedió asilo político a varias familias Sirias y a cinco prisioneros políticos de Guantánamo.
- Estableció una clara definición de las capacidades y los poderes de la iglesia y el estado.
- Legalizó y definió el uso de la mariguana, el estado produce, distribuye y controla el uso de la mariguana a 40 gramos por mes, estableció el costo en un dólar por gramo. Si acaso deseas producir tu propia cosecha, podrás crecer hasta 6 plantas para tu propio consumo.
- Renunció al automóvil oficial y al grupo de escoltas a los que tenía derecho, en su lugar manejó su propio VW y solo aceptó el servicio de dos guardias para resguardar su casa. Tampoco tenía ninguna servidumbre asignada a su servicio.
- Renunció al 90% de su salario y a la compra de un avión austero para el uso particular de la Presidencia. En su lugar se adquirió un helicóptero que se utilizó para emergencias de naturaleza social.
Su mandato de cinco años se caracterizó por decisiones y proyectos de elevado contenido social en favor de los débiles y los más desprotegidos en respuesta a los tiempos tan críticos y difíciles en todo el mundo, una de mis principales metas es disminuir la pobreza y ofrecer más oportunidades a la gente. Precisamente, dentro de esas oportunidades, reconoció la urgencia de los pueblos latinoamericanos por mejorar su educación y su instrucción para que puedan orientarse mejor acerca del mundo que los rodea y a la vez capacitarse para desempeñar trabajos más remunerados y así poder contribuir al abatimiento de la pobreza.
La respuesta a varias preguntas específicas acerca de su popularidad y su éxito personal se podría resumir en: tengo la mala costumbre de decir lo que pienso, lo cual incomoda a mucha gente hoy en día, ya que está acostumbrada a disfrazar sus convicciones para no causar problemas. Tal vez esa sea la razón por la cual la gente se fija en mí. La pregunta acerca de su austeridad y la frugalidad en que vive la resolvió así: las propiedades son ataduras de las que no te puedes librar, por eso es que yo empaco ligero. Yo sé que tengo pocas virtudes, una de ellas es que puedo decir lo que pienso, sin ataduras.
Acerca de la pobreza en América Latina, él enfatizó las palabras de Albert Camus en el sentido de que pobre no es el que no tiene sino el que carece de espíritu para obtenerlo, Mujica agrega: pero que hay que ayudarle a obtenerlo; eso es todo. Considera que la pobreza no es solo una estadística o un dato del censo sino un cambio cultural que debe procurarse tarde o temprano, está consciente que estos cambios son difíciles y tardan en lograrse.
Acerca del consumismo y la desigualdad, Mujica expresó estar en desacuerdo con el consumismo de cosas superfluas e innecesarias, invoca al concepto marxista de las necesidades y ejemplifica con la injusticia y la falta de solidaridad de las personas que desperdician el agua mientras que otras tienen que acarrearla sobre su cabeza por varios kilómetros.
Así transcurrieron 2 horas, muchos temas quedaron inconclusos porque sencillamente no existe una solución, porque los cambios que se requieren no son sujetos a las palabras sino a las acciones; como las que Mujica ha implementado en su periodo. Tal como él lo plantea las cosas son muy simples, muy simples para alguien que ha reflexionado y analizado nuestra realidad con responsabilidad y madurez, con solidaridad y justicia. Pareciera ser que José Mujica es una fantasía, un sueño inalcanzable, algo fuera de este mundo; pero él aún vive en las afueras de Montevideo y nos ha dejado un legado difícil de imitar.
______________________________________________________________
REFERENCIAS
- Jonathan Watts, Uruguay’s president José Mujica: no palace, no motorcade, no frills. The Guardian. Diciembre 13, 2013
- Nicolas Bourcier; Christine Legrand. Uruguay’s José Mujica: the humble leader with grand ideas. The Guardian. Mayo 27, 2014.
- M.R. y H.C. A conversation with President José Mujica. The Economist. Agosto 21, 2014
SARS-CoV-2, el ENEMIGO IMPLACABLE
Antonio G. Trejo. Correo electrónico: [email protected] Los tiempos actuales son críticos, difíciles, enigmáticos e inciertos, simplemente porque tenemos enfrente...
julio 23, 2020El VIRUS G4 la NUEVA AMENAZA
El lunes 29 de junio, por lo menos tres periódicos de circulación internacional reportaron la frecuente aparición del G4...
julio 9, 2020EL CORONAVIRUS VILLANO
Los virus son auténticos parásitos que invaden el cuerpo de su víctima, lo usan para replicarse, desorganizarle las funciones...
junio 29, 2020EL CORONAVIRUS, la NUEVA AMENAZA
Como si en México no tuviéramos de que preocuparnos, ahora surge una nueva amenaza médica desde Wuhan, China. Se...
enero 23, 2020