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Las trampas del Nearshoring

La trampa de cabecera del Nearshoring predica que el mismo resolverá como por arte de magia todos los problemas estructurales de México.

30 de octubre, 2024

Fernando Jeannot

Near shoring ¿Nos conviene? ¿Le convenimos nosotros?

Los pensamientos trampa son falacias consistentes en argumentos falsos, pero aparentemente verdaderos, destinados a inducir errores o a engañar. Justifican determinado tipo de decisiones económicas. Para prevenir el daño ocasionado por los conceptos tramposos tales como la Trampa de la Liquidez, de la Población, de Tucídides, del Atraso Económico, del Ingreso Medio… o del Nearshoring; este artículo ayuda a tomar conciencia de los posibles escenarios verdaderos correspondientes a los mellizos Near y Friendling-Shoring.

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La trampa de cabecera del Nearshoring propalada por políticos, economistas, administradores y opinadores, predica que el mismo resolverá como por arte de magia todos los problemas estructurales de México. O lo que es muy parecido: la Mano Invisible del Nearshoring nos hará económicamente eficientes y eficaces conduciéndonos hacia la prosperidad. En realidad, el Nearshoring no nos situará en ningún Mundo Feliz, sino en otro presidido por la Incertidumbre XXI, poco feliz y bastante desdichado.

Como resultado de la secuencia histórica mexicana, se difundió la falacia de que la economía rentista nacional configuraría rutas logísticas eficientes (seguridad pública, parques industriales), reglamentaría al mercado de trabajo de la misma manera, e institucionaría un estado de derecho legítimo y funcional. La dependencia de la trayectoria o del camino recorrido nos dice que todo esto no sucedió, porque las reformas de eficiencia y eficacia han fracasado secularmente. Fracaso que compete tanto al sector público como al privado.

El Nearshoring tramposo, recupera el proteccionismo con respecto a los terceros países. Como siempre sucede, el proteccionismo genera o agranda a la clase empresarial rentista, porque institucionaliza una competencia de baja intensidad promotora de la ineficiencia macroeconómica derivada de la captura de rentas de diverso tipo, tanto como la ineficacia micro que rentabiliza a las ganancias de oportunidad; por lo tanto, se organiza una economía compradora que frena el desarrollo de la ventaja competitiva nacional a causa de su preferencia por comprar, pero no por producir.

La organización contemporánea del libre comercio con el proteccionismo representa; en el primer sentido, motivar la competencia intensiva portadora de eficiencia y eficacia; pero, en el segundo sentido, generar o agrandar la economía rentista ineficiente e ineficaz. Entonces, para evitar la trampa y concretar la promesa del Nearshoring, la recomendación de política económica es acentuarlo al paso de la reducción de la economía rentista a su mínima expresión mediante una reforma radical que vaya al fondo del problema con cualquier ideología política; al mismo tiempo que desarrolle sin ambages la ventaja competitiva nacional dentro de una economía productiva.

En seguida, la evocación de otras trampas del Near o Friendling-Shoring a fin de que las percibamos con mayor claridad.

El bloque comercial norteamericano puede acarrear imposición de políticas conjuntas, las cuales no son buenas por definición; tal como las referidas al mercado de trabajo, o a la seguridad pública, o a la lucha contra la corrupción y el soborno.

El aumento del comercio en el bloque de América del Norte entraña el incremento de la interdependencia, donde algunos son más interdependientes que otros. México es más interdependiente con los EE. UU que viceversa, porque este último es mucho más poderoso que México en todos los órdenes, particularmente el económico. El Nearshoring puede incrementar la dependencia mexicana con los EE. UU.

La mentalidad tradicionalista y conservadora bloquea a la flexibilidad propia de la eficiencia adaptativa que adapta en el mercado interno a las oleadas tecnológicas y organizativas de avanzada. Esta versión de la mentalidad mexicana puede perpetuar la ineficiencia adaptativa nacional mediante el apuntalamiento del Nearshoring

La economía mexicana transformada por los mellizos Near y Friendling, puede generar decrecimiento y/o estancamiento por mérito propio. Si no nos cree, vea el desempeño del PIB en los últimos treinta o cuarenta años y la expectativa de decrecimiento para 2025.

El Nearshoring es una práctica de comercio exterior administrado (managed trade), la cual combina libertad de comercio exterior con proteccionismo con respecto a las economías amigas; pero, al contrario, aplica solo proteccionismo a las importaciones de las economías enemigas, consecuentemente, el proteccionismo acarreará la promoción de la economía rentista mexicana con toda su carga de males públicos. Dado que EE. UU gravó con 12% las importaciones chinas; ¿por qué México lo hizo con 25%? ¿porque fue más papista que el Papa?; no lo creemos así, sino que el Tío Sam desconfía de su propia capacidad competitiva con China al 12%, mientras que México hace lo propio al 25%. Deshaciendo la trampa del Nearshoring y a lo mejor, México baja del 25%.

Las deslocalizaciones lejanas de China en México incrementarán la interdependencia EE. UU./México, pero disminuirá la soberanía nacional de este país a causa del desequilibrio de poderes que mencionamos anteriormente.norteamericana que hace de México el primer socio comercial de los EE. UU.

Si bien la secuencia histórica de México registra un modelo mental compartido y dominante presidido por el Nacionalismo Revolucionario pleno de xenofobia hacia los EE. UU.; el pragmatismo del presente aconseja a los equipos populistas gobernantes, olvidarse de tal aversión y, en cambio, tratar de integrarse los más rápidamente posible a uno de los mercados más grandes y solventes del mundo. De aquí que el populismo azteca de izquierda tradicional y visceralmente antiyanqui, apueste al progreso económico en función del mercado estadounidense de producción competitiva; pero no del mercado interno rentista de la economía petrolizada y remesada objeto de la gran preferencia chauvinista.Entonces, cabe decirles a los fervorosos creyentes en el Nacionalismo Revolucionario: