¡Libertad, libertad!

¿Cuántos crímenes se cometen en tu nombre? Exclamación postrevolucionaria francesa tantas veces repetida a partir de esa fecha y tan vigente y verdadera que hoy… ¿Cuántos crímenes se cometen en tu nombre? Exclamación postrevolucionaria francesa tantas veces...

11 de mayo, 2015

RHT

¿Cuántos crímenes se cometen en tu nombre? Exclamación postrevolucionaria francesa tantas veces repetida a partir de esa fecha y tan vigente y verdadera que hoy…

¿Cuántos crímenes se cometen en tu nombre?

Exclamación postrevolucionaria francesa tantas veces repetida a partir de esa fecha y tan vigente y verdadera que hoy la repetimos casi a diario.

Desde la Independencia para acá vivimos en un país libre y nos vanagloriamos de esta libertad que gritamos como desaforados el 15 de septiembre; nos alineamos con los países del Mundo Libre, nos liberamos de la Cortina de Hierro, no sufrimos de las dictaduras de Cuba, Chile o de la imposición de Venezuela. ¡Somos libres! Presumimos que la conservación de nuestra libertad se debe a nuestro sistema democrático donde el voto nos permite elegir a quienes se encarguen de cumplir y hacer cumplir los valores nacionales plasmados en la Constitución.

Esa es la teoría. La dolorosa realidad nos muestra una verdad muy distinta: Jefes de gobierno que ni sus propios bandos cumplen, diputados cómplices de delincuentes a los que meten en la cajuela de sus coches a fin de brindarles la protección del fuero, ejecutivos que se coluden con el narco, jueces que en aras del debido proceso pisotean la Justicia, leyes apegadas al dicho de “hecha la ley hecha la trampa”

El derecho a la información se ve truncado por la desinformación acarreada por el maremoto de mensajes; tiempo que nadie paga a los medios y que no merma la carretada de dinero con la que los partidos políticos se despachan para tratar de llenarnos de resentimientos, mentiras, malas palabras, promesas infundadas, sin propuestas etc.

Esta carretada de información nos produce un par de reacciones sociales: para la mayoría el bloqueo mental que desacredita la actividad política y para los minoritarios la polarización sin información de las personas propuestas como candidatos a ciencia y paciencia de las multas que pagan con dinero público. A los votos duros “ni les beneficia ni les perjudica sino todo lo contrario”.

Y, ¿qué es lo que hacemos? Lo mismo que en los embotellamientos: le damos la vuelta al problema sin buscar resolverlo conscientes de nuestra impotencia. Este es el momento en que debe cambiar nuestra actitud, podemos y debemos unirnos en un ¡ya basta!

Salgamos de la inacción, dejemos de quejarnos y propongamos algo diferente.

Ya hemos visto que votar por partidos no funciona, que los plurinominales son rémoras sanguijuelas, la expresión más pura de la partidocracia que hoy nos domina y que la reducción de su número es una de tantas promesas de campaña que no se cumplen.

Votemos por personas. No me cabe duda que aún en Morena debe haber alguna persona decente preparada y bien intencionada que nos pueda servir como gobernante.

Si consideramos que la libertad es la elección inteligente del mayor bien, vemos que nos es indispensable el conocimiento de los candidatos. Hoy los partidos no promueven a las personas y no tenemos información amplia y confiable de los candidatos.

Propongo que se exija al INE la publicación de una página web que contenga toda la información de los candidatos a todos los puestos de elección que están en juego. La experiencia de que se inscriban voluntariamente a páginas de buena voluntad es negativa. El INE tiene información indispensable para su registro y en esta etapa la información adicional sería libremente aportada por los candidatos.

Pero no se trata de una página más en el laberinto informático, se trata de ¡una señora página! ¡La madre de todas las páginas electorales¡ De un centro de información, una base de datos de la calidad y el tamaño que justifique el descomunal presupuesto que le otorgamos a las elecciones. A partir de la información obligatoria de cada candidato deberá aparecer una sección que haga referencia a las páginas de inscripción voluntaria y las invitaciones rehusadas para inscribirse con los argumentos esgrimidos como “corro un riesgo demasiado grande si doy a conocer mi fortuna” y así sabremos si votamos por este candidato o no.

Esta página deberá ser objeto principal de la campaña publicitaria del INE instruyendo en los promocionales la forma de acceder a ella en cualquier internet público, con su computadora, lap, tablet o teléfono. Con el método más amigable posible.

También tendrá una sección con hipertextos que la liguen a las diversas páginas voluntarias que se dediquen a la elección de referencia municipal estatal o federal.

Que sea esta página el escaparate obligatorio de todos los candidatos, no sólo para los que se promueven en cadena nacional sino hasta los del último municipio del país. Que sea tema de programa para el locutor de la única radiodifusora de San Garabato, Cuc. Y que sirva de información para el votante tanto práctica como política para tomar decisiones.

Que le diga conforme a los datos que aparecen en su credencial para votar – estado, municipio y sección – cuáles son las elecciones en las que va a participar, con muestras de las boletas, animación de la organización de la casilla y la participación del votante. En hoja comparativa mostrará por columnas la información de los candidatos: partido, nombre, edad, grado máximo de estudios, estado civil, nombre del cónyuge y declaraciones patrimoniales, experiencia laboral y política. Optativas serán declaraciones de principios, fiscales de los últimos 5 años, de intereses, proyectos personales, promesas/compromisos de campaña, relaciones y asociaciones a las que pertenece (no es lo mismo El Yunque que la Masonería. Ninguno se prohíbe pero tenemos derecho a saberlo antes de votar por ellos), aficiones y lo que consideren de interés para los votantes.

Habrá también un salón de chateo de libre acceso y podrán fijarse fechas y horarios para debates entre los candidatos con presencia e intervención de los interesados. Un lugar para decirles sus verdades decentemente, exhibir sus omisiones, darles oportunidad para aclaraciones y precisiones. Un muro donde grafitearlos y un espacio para responder.

Cuando el INE se decida a elaborar esta página, el Universo entero conspirará a su favor para que la termine en tiempo y forma y que nos sirva.

Puede decirse que el plazo para elaborar esta página es muy limitado pero en México tenemos el talento suficiente para realizarlo El costo no presupuestado puede provenir de un pellizco que se le de al importe de las multas impuestas a los partidos delincuentes electorales. Si se quiere, se puede.

Lo que podemos hacer es una presión generalizada de los miembros de la comentocracia. Si la vemos como una herramienta útil y cerramos filas, en una presión gremial que vea por el bien del país y no por el incremento de rating, se puede conseguir. Las manifestaciones serían objeto de burla como la que se hizo de la “manifestación de los pirrurris” y una promoción de un solo líder de opinión llevaría a un “gracias por participar” como el que le dieron a Pedro Ferriz de Con cuando presentó su propuesta de eliminar la lacra de los plurinominales.

Necesitamos a todos los comentaristas sin importar la empresa en la que hoy trabajen o que estén “de vacaciones” como Aristegui y tendremos unas verdaderas elecciones libres. Informadas. Recordemos lo hecho por los artistas con Cantaré, Cantarás o We are the World.

Un paso a la vez en el camino hacia la verdadera libertad.

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